Policía israelí detiene presidente del Sindicato de los Metalúrgicos de Porto Alegre por más de tres horas, incauta su laptop e investiga emails. Policías israelíes mantuvieron incomunicado, bajo presión, chantajes y amenazas, «en una verdadera tortura», durante más de tres horas en el aeropuerto Internacional de Tel-Aviv, el presidente del Sindicato de los Trabajadores Metalúrgicos […]
Policía israelí detiene presidente del Sindicato de los Metalúrgicos de Porto Alegre por más de tres horas, incauta su laptop e investiga emails.
Policías israelíes mantuvieron incomunicado, bajo presión, chantajes y amenazas, «en una verdadera tortura», durante más de tres horas en el aeropuerto Internacional de Tel-Aviv, el presidente del Sindicato de los Trabajadores Metalúrgicos de Porto Alegre, Lírio Segalla, que viajó en misión oficial de representación de la CUT al Congreso Sindical de la Federación de Sindicatos Palestinos (PGFTU).
Después de ser llevado a una sala en separado en el aeropuerto Ben Gurion, Lírio fue sometido a un extenso interrogatorio y fueron revisadas sus pertenencias. Bajo amenaza, los policías investigaron el contenido de su celular y del laptop, incluyendo emails y redes sociales, anotando todo, en una clara violación de privacidad. «Querían saber mis contactos, nombres, teléfonos, emails, direcciones, lo que yo pensaba de Israel y de la Palestina, lo que yo había ido a hacer allá. Un insulto ya al descender del avión, en la inmigración», denunció Lírio, que es negro.
Llegado el último miércoles de Ramalah, en Cisjordania, donde permaneció durante cerca de una semana, Lírio denuncia «la grave crisis humanitaria a que viene siendo sometido el pueblo palestino por la ocupación israelí, que toma sus tierras, destruye sus casas, construye asentamientos ilegales, usurpa, humilla». «Es una situación mucho más absurda y criminal de lo que pensamos, es una política de terrorismo de Estado que alcanza indistintamente a todos los palestinos», destacó.
En relación a los niños y jóvenes que toman el frente de las manifestaciones contra la agresión israelí, denunció el dirigente cutista, «la situación es aún peor, pues las tropas disparan para matar, en la altura de los ojos y a corta distancia». «Yo aún presencié el asesinato a quemarropa de un joven palestino por el ejército de Israel. Dispararon un tipo de bomba de gas que está prohibida internacionalmente. El envoltorio es de acero y, como son lanzados de muy cerca, destruyen la cabeza de las personas. Fue eso lo que aconteció con el joven Mustafa, de sólo 27 años, asesinado en frente de mí a las 10 horas de la mañana del día 10 de diciembre en Nabi Saleh».
Impedido de circular por Cisjordania y de entrar en la Franja de Gaza, Lírio denuncia la multiplicación de los «puntos de control» israelíes por todo el territorio palestino, en un cerco total: «hay más de 750 kilómetros de muros del apartheid, con seis metros de altura, alambres de púa y todo tipo de sensores y alarmas». «La ocupación ilegal va acorralando los palestinos, tomando sus tierras y construyendo asentamientos. En estos locales los israelíes son doctrinados para hostilizar los árabes. En Hebron, ciudad milenaria palestina, yo vi locales donde los israelíes tiran basura y ácido a los árabes, que intentan protegerse como pueden. En esta misma ciudad milenaria yo vi los israelíes caminando tranquilos por las avenidas, protegidos por sus tropas, y los palestinos obligados a andar por estrechos pasillos. Cuando los israelíes están más próximos, ellos escupen, llaman de cerdo, insultan de toda manera», relató el sindicalista.
Según Lírio, «esta realidad no aparece en los medios de comunicación del Brasil. No da para tener noción, las personas están sitiadas, desempleadas, humilladas. Todo lo que vi me dejó con un asco muy grande de los israelíes. Es algo que revuelve el estómago. No quise comprar nada de Israel, no quiero tener nada que me recuerde aquel país», añadió.
CUT defiende castigo ejemplar a los criminales
El secretario de Relaciones Internacionales de la CUT, João Antonio Felício, envió carta este viernes al Embajador de Israel en Brasil, Rafael Eldad, y al ministro de Relaciones Exteriores del Brasil, Antonio Patriota, defendiendo la investigación del asesinato de Mustafa Tamimi y cobrando la elucidación del crimen y la punición ejemplar de los responsables en el ámbito de la ley internacional, en especial la IV convención de Ginebra.
En relación a la ofensa a Lírio, la CUT exige una retractación formal de las autoridades israelíes, así como solicita a las autoridades brasileñas que acompañen el caso, a fin de que tan vergonzosos hechos no se repitan más.