Traducido para Rebelión por Carlos Sanchis
El General Comandante retirado Doron Almog, jefe de las Fuerzas Israelíes de Defensa (IDF) del Comando del Sur desde diciembre del 2000 hasta julio del 2003, evitó, por poco, el arresto por efectivos de Scotland Yard en el aeropuerto de Heathrow el 11 de Septiembre de 2005.
La orden judicial fue emitida el día anterior por un juzgado de Londres. Almog fue acusado de crímenes de guerra, incluyendo la destrucción sin piedad de 59 hogares civiles en el campo de refugiados de Rafah en enero del 2002, una grave violación de la Cuarta Convención de Ginebra de la que Israel es signatario.
También está implicado en la muerte de una mujer embarazada, Noha Shukri al-Makadma, en marzo del 2003, y en el lanzamiento de una bomba de una tonelada en un barrio densamente poblado de Ciudad de Gaza. La bomba, usada para asesinar al líder de Hamas, Salah Shehadeh, mató a 15 personas (incluyendo a 9 niños) e hirió a 150.
Almog evadió el arresto negándose a desembarcar de su vuelo después de que aterrizara en el aeropuerto de Healthrow en Londres, al parecer informado y alertado por las autoridades británicas. Amnistía Internacional «deploró» el fracaso de los funcionarios del Reino Unido para abordar el avión y arrestar a Almog.
Otros prominentes comandantes han sido avisados para que eviten el Reino Unido, puesto que los tribunales posiblemente emitirán ordenes judiciales de arresto similares a la de Almog. Entre ellos están el anterior Jefe de Estado Mayor Moshe Ya’alon y Dan Halutz, quien infamemente informó que él «durmió bien por la noche» en contestación a la crítica sobre el bombardeo del barrio de Gaza en el que él jugó un papel. Halutz fue promovido a continuación a Jefe de Estado Mayor de las IDF.
Yesh Gvul, un movimiento de soldados israelíes que se niegan a servir en los territorios ocupados, está implicado en algunas de las quejas entabladas en el reino Unido debido a su falta de confianza en el sistema judicial israelí. Yishai Menuhin, de Yesh Gvul, dijo al periódico Haaretz que, «Nos estamos acercando a instancias extranjeras sólo después de haber intentado todo lo posible en Israel.»
Los tribunales de Israel no han pedido siquiera una investigación criminal del bombardeo de Gaza que se llevó la vida de 14 personas inocentes. Los asesinatos extrajudiciales también son ilegales bajo la ley internacional.
The New Standard informó que » en una declaración emitida por la firma de abogados Hickman y Rose se lee en una parte: La persecución de criminales de guerra y la prosecución de esos responsables de crímenes de guerra es una estrategia a largo plazo diseñada para combatir la cultura de impunidad que es endémica dentro del ejército israelí, del sistema judicial y del político».
Los residentes de Jerusalén Oriental cuyas casas han sido destruidas por la municipalidad de Jerusalén también han decidido entablar reclamaciones por crímenes de guerra en el Reino Unido. «Los inspectores de construcción del ayuntamiento de Jerusalén pueden tener que pensárselo dos veces antes de veranear en Europa,» informó Haaretz.
Cada año el Ministerio del Interior y el ayuntamiento de Jerusalén destruyen docenas de edificios en Jerusalén Oriental, a menudo con la plena complicidad del sistema judicial israelí.
El Comité israelí Contra las Demoliciones de Casas (ICAHD) y una empresa judicial británica especializada en Derechos Humanos sugirió la idea de interponer reclamaciones en el extranjero contra empleados municipales aproximadamente hace seis meses. Según Haaretz:
«La atención se centra en Micha Ben-Nun, jefe del departamento de licencias del ayuntamiento y en Zvi Schneider que supervisa la construcción en el Distrito de Jerusalén para el Ministerio del Interior. Se han interpuesto demandas contra ellos en Gan Bretaña, pero ninguna fecha para el juicio ha sido fijada. El ICAHD piensa extender el alcance de sus actividades y la interposición de demandas contra más destacados funcionarios o inspectores municipales de más bajo rango.
«Hemos estado planeando esta maniobra desde hace ahora más de medio año ‘ dijo ayer Meir Margalit del ICAHD. ‘Nos aproximamos al abogado británico Daniel Machover cuyo despacho está especializado en derechos humanos. Nuestra acusación principal es que la demolición de las casas de una población Civil inocente es una violación de la Ley internacional, específicamente de la Cuarta Convención de Ginebra que prohíbe a un estado ocupante dañar a la población civil exceptuando durante el transcurso de operaciones militares. ‘Creemos que en unos años más, todos los estados miembro de la Unión Europea se cerrarán a esas personas [que participaron en las demoliciones) dijo Margalit»
El artículo 147 de la Cuarta Convención de Ginebra estipula que «la destrucción extensa y la apropiación de propiedad, no justificada por necesidades militares, llevada a cabo perversa e ilegalmente,» es una «grave violación » de ley internacional.
28 de septiembre de 2005