Tras reunirse con representantes de varios partidos políticos, el Ejército egipcio, que dirige el país, accedió a reformar la ley electoral por la que varias formaciones habían amenazado con boicotear las elecciones.El Ejército egipcio, que dirige el país desde la caída en febrero de Hosni Mubarak, aceptó ayer la reforma de la ley electoral que […]
Tras reunirse con representantes de varios partidos políticos, el Ejército egipcio, que dirige el país, accedió a reformar la ley electoral por la que varias formaciones habían amenazado con boicotear las elecciones.El Ejército egipcio, que dirige el país desde la caída en febrero de Hosni Mubarak, aceptó ayer la reforma de la ley electoral que numerosos partidos han criticado y por la que amenazaron con boicotear las elecciones. El Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas aceptó reformar el artículo 5 de la nueva ley para permitir a los partidos políticos presentar candidatos para la tercera parte de los escaños, que hasta ahora se reservaba a los independientes. La decisión se produjo tras un encuentro entre el jefe del Estado Mayor, Sami Anan, y los miembros de la Coalición Democrática, una alianza de la que forman parte una treintena de formaciones, desde el partido de los Hermanos Musulmanes hasta grupos laicos como el partido liberal Wafd.
El jueves amenazaron con boicotear las elecciones si el citado artículo no se eliminaba. También exigen la reactivación de una ley que prohíbe a los políticos condenados por corrupción presentar su candidatura durante un período de diez años. El pasado viernes, miles de manifestantes volvieron a acusar al Ejército desde la plaza Tahrir de de perpetuar el sistema represivo del pasado, y exigieron un calendario concreto para el traspaso del poder a un gobierno civil y el fin de los juicios militares por delitos políticos.
La Policía cargó ayer contra los que seguían en la plaza y detuvo al menos a diez de los manifestantes que se negaban a abandonarla.