El ministro de Cultura de Cuba, Abel Prieto Jiménez, invitó hoy a la UNESCO a desarrollar «políticas de cooperación internacional con un carácter más solidario» en momentos de una «terrible crisis ética». «La solidaridad debe ser la palabra de orden de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura […]
El ministro de Cultura de Cuba, Abel Prieto Jiménez, invitó hoy a la UNESCO a desarrollar «políticas de cooperación internacional con un carácter más solidario» en momentos de una «terrible crisis ética».
«La solidaridad debe ser la palabra de orden de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) de hoy», afirmó Prieto en su discurso ante la Conferencia General de la UNESCO, que se reúne en París hasta el próximo día 23.
El máximo responsable de la cultura en Cuba lamentó la existencia de un «orden internacional injusto» impuesto por «los países del norte del planeta», a quienes culpó de ser los causantes de la crisis económica mundial, y habló de una «terrible crisis de ética que vive el mundo, nacida de la esencia misma del sistema capitalista».
De esa «crisis de ética», Prieto responsabilizó en buena parte a los medios de comunicación y abogó por que el periodismo luche contra «el subdesarrollo, el hambre, las enfermedades, la droga, la corrupción o la represión y la censura ejercidas por Gobiernos impuestos por golpes de Estado, como el caso de Honduras».
Un «periodismo responsable, de nuevo orden comunicativo e informativo mundial» -dijo Prieto- que no se dedique a hacer apología «del consumo y a enmascarar realidades a favor de los que más tienen y no de los que más necesitan».
Crítico con la UNESCO, el ministro cubano de Cultura se preguntó cuántos son los países que hoy pueden decir que han eliminado el analfabetismo gracias a los proyectos de dicha organización.
Recalcó, en cambio, que el programa cubano «Yo sí puedo» ha logrado que «cuatro millones de personas, otrora analfabetas, en 28 países de América Latina y el Caribe, África, Europa y Oceanía, hoy puedan ejercer el derecho a leer y escribir» y puso a disposición de la UNESCO el método cubano.
Prieto animó además a la agencia de Naciones Unidas a «revisar a fondo» su actuación en «materia de educación mediante una reforma profunda de esta esfera» y, por otro lado, aseguró que es «esencial el papel que pueda desarrollar la UNESCO contra el cambio climático», que definió como «el más grave y urgente problema que enfrenta a la humanidad y pone en eminente peligro la supervivencia de la especie humana».