Oscar Wilde afirmaba sobre el cinismo que este consiste en ver las cosas como realmente son y no como se quiere que sean. La declaración de la administración Obama hace dos semanas cuando solicitó formalmente a Israel congelar la construcción de asentamientos en Cisjordania por un año, pareció ajustarse plenamente a la frase del novelista […]
Oscar Wilde afirmaba sobre el cinismo que este consiste en ver las cosas como realmente son y no como se quiere que sean. La declaración de la administración Obama hace dos semanas cuando solicitó formalmente a Israel congelar la construcción de asentamientos en Cisjordania por un año, pareció ajustarse plenamente a la frase del novelista inglés.
Lo cierto es que Israel ha continuado sin pausa la construcción de viviendas sobre territorio expoliado a los palestinos, sin un asomo de preocupación por la proclamada prohibición de la comunidad internacional incluyendo teóricamente a Estados Unidos. Como las cosas son así, se trata esta vez de pretender verlas como queremos que sean al menos por un año.
La catástrofe humanitaria que vive el pueblo palestino en Cisjordania y de manera terrorífica en Gaza debe ser uno de los dramas más extensamente documentados de que se tenga registro, pero por extraño que parezca da la impresión de ser siempre insuficientemente conocido. Una interrogante que parece a estas alturas más de orden moral que informativo.
Un reconocido científico habló alguna vez del problema de Orwell, en alusión al conocido escritor inglés que fue el primero en esbozarlo. El autor de «Homenaje a Cataluña» se preguntó cierta vez cómo es posible que con tanto acceso a la información sepamos tan poco. Lo cierto es que el sufrimiento es cotidiano y conocido para el que lo quiera averiguar aunque básicamente invisible. Podríamos aludir ciertamente al bloqueo mediático, pero cuanto tiene que ver la voluntad de no saber.
Huwaida Arraf es una reconocida activista palestino-estadounidense-israelí que es la cara visible del movimiento Free Gaza. El grupo cada año organiza travesías por el mediterráneo rumbo a puerto Gaza a bordo de una pequeña embarcación denominada Dignity. Un viaje que intenta romper el bloqueo del Estado de Israel a Palestina, llevando medicinas, alimentos. La tripulación compuesta por un grupo de legisladores y personalidades europeas, estadounidenses y de Medio Oriente lleva además la solidaridad internacional a un pueblo encarcelado.
Conversamos con Huwaida sobre la actual situación en Palestina, principalmente en Gaza que vive según un reporte de la ONU difundido este lunes una «crisis de dignidad humana». Charlamos además sobre el trabajo de Free Gaza y las formas en que se puede hacer efectiva la solidaridad internacional y desde América Latina.
RM: Cuál es la situación actual en Gaza
HA: La situación en Gaza es absolutamente horrible. En algunos aspectos está tal y como estaba el día en que dejaron de arrojar bombas, desde que Israel mantiene el bloqueo de Gaza. La lista de ítems permitidos es de aproximadamente 300 contra casi 4000 desde antes del 2006. La gente todavía vive en tiendas de campaña, ubicadas encima de los escombros de las que fueron alguna vez sus casas. Muchos heridos permanecen enfermos y sin recuperarse debido a que no es posible encontrar la atención médica necesaria a causa del bloqueo y además los pacientes no se pueden ir. Mientras la gente mantiene un espíritu de resistencia y entereza, las condiciones son deplorables y toda la responsabilidad es de Israel, en primer lugar, y de toda la comunidad internacional en segundo plano.
RM: Cómo es un día común para un niño en Gaza
HA: Un día común y corriente para un niño en Gaza implicaría ir a uno de los múltiples turnos para el colegio, eso, si es que su colegio no fue destruido. No existen muchos lugares para jugar en Gaza, dado que está tan poblado y especialmente después de los ataques de enero, muchos padres no se sienten seguros con los niños afuera. Israel continua monitoreando Gaza desde el aire, con aviones, helicópteros y sondas espías, así que hay un temor de que los misiles pueden llegar en cualquier momento. Quizás algunos vayan a la playa, en busca de un pequeño relajo en el agua. Sin embargo, el agua está muy contaminada, gracias a que Israel bota sus desechos en Gaza, junto al hecho de que los israelíes bloquean un adecuado tratamiento de las aguas servidas en Gaza. Así que hasta el agua es un riesgo.
RM: Crees que una solución viable sea un estado constituido por dos zonas geográficas separadas y unidas por un túnel o un puente.
HA: No tengo un plan específico para cómo crear un Estado, o siquiera se si necesitamos un Estado, ciertamente hay un punto argumentable es el hecho de que si tenemos un Estado perderemos algunos derechos. Preferiría ver una situación donde la Ley Internacional y los derechos humanos fuera implementados. En ese punto quizás las fronteras no serían necesarias. Lo que quiero decir es que la actual «solución-de-dos-estados» de la que se habla, ni siquiera se acerca a lo que son las aspiraciones palestinas y menos al criterio mínimo (o básico) de asegurar un respecto por los derechos humanos de los palestinos, como también de sus derechos civiles y políticos. Esto incluye el derecho de los palestinos a retornar a las casas de las que han sido expulsados, el derecho de ser tratados con equidad y no ser discriminados negativamente por su raza, religión o etnia. El «Estado palestino» que está en un 22% de nuestra patria (siendo optimistas, porque siendo realistas, con los asentamientos y la muralla, es menos que eso) se vislumbra existiendo lado a lado con el Estado Judío de Israel. Un estado judío de Israel no permitiría regresar a los millones de refugiados palestinos ni trataría igualmente a sus ciudadanos no-judíos, los árabes, siendo que ellos son los nativos de esa tierra. Así que, ya sea que tengamos un solo estado, dos, 10 estados o ningún estado, no es tan importante para mi como lo es el poder asegurarse que se respeten los derechos humanos. El estado palestino que se está negociado -la solución de «dos-Estados» , ni siquiera se aproxima a eso.
RM: Israel continua imparable sus construcciones en suelo palestino mientras Estados Unidos, la Unión Europea y la Autoridad Palestina hablan de retornar al diálogo, la misma situación desde hace muchos años.
HA: En efecto, es la misma historia desde hace 15 años. Ahora, y de repente, se discute acerca de los asentamientos, como si estos no se hubiesen estado construyendo desde hace 40 años. Existen docenas de dictámenes de las Naciones Unidas, reportes y declaraciones sobre los asentamientos. ¿Por qué tendríamos que creer estos nuevos discursos hoy? La realidad continua tal como la quiere Israel .
RM: En todo este tiempo de ocupación qué cambios has observado en la resistencia al invasor.
HA: Estamos viendo dos cosas que son muy importantes. Primero, es que está volviendo la resistencia popular, involucrando a diferentes sectores de la sociedad. Esto todavía no está instalado de la manera que me gustaría, pero progresivamente diversos sectores de la sociedad palestinas se están uniendo a la resistencia. Segundo, está la necesidad de una verdadera solidaridad internacional que se movilice y pase a la acción, no sólo a hacer declaraciones. El aspecto más importante de esto es la respuesta al llamado de parte de la sociedad civil palestina para el Boicot, Desestimiento y Sanciones. Ya estamos viendo resultados. Una cantidad de compañías ya se han desistido de hacer negocios con Israel y estamos presenciando a gremios, comunidades, iglesias, fondos de pensiones, escuelas y organizaciones alrededor del mundo pasando a la acción. Esto es nuevo y realmente un acontecimiento destacable.
RM: Qué es Free Gaza
HA: El movimiento de liberación de Gaza es un esfuerzo palestino e internacional para enfrentar directamente pero sin violencia las brutales políticas de ocupación israelí. Nos hemos estado enfocando en el bloqueo ilegal de Gaza en razón de sus drásticos y devastadores efectos en la gente que vive allá, pero todas las políticas israelíes de ocupación deben ser enfrentadas – el permanente robo de las tierras y recursos naturales y la subyugación del pueblo palestino debe terminarse. Si nuestros gobiernos e instituciones que se supone que defienden los derechos humanos fallan, entonces creemos que no queda otra solución que sea la gente del planeta la que actúe, o pase a la acción
Desde agosto del 2008 hemos navegado enviado pequeños barcos a Gaza, llevando ayuda y trabajadores humanitarios, desafiando el bloqueo naval de Israel. A pesar de que hemos sido atacados, tenemos planeado seguir enviando naves y alentando a otras organizaciones y gobiernos para que se nos unan hasta que el sitio a Gaza se termine y el derecho del pueblo palestino a vivir con dignidad se cumpla.
RM: Cuál ha sido vuestra experiencia, qué ocurrió el 30 de junio pasado.
HA: Ese día Israel raptó nuestro pequeño trasbordador, donde iban 21 defensores de los DDHH, medicinas, útiles escolares, materiales de construcción y juguetes para los niños. La marina israelí rodeó nuestro barco con 8 barcos de guerra y envió botes zodiac con soldados armados y enmascarados para tomarse el bote. Algunos de nuestros miembros fueron golpeados, otros fueron esposados. Todos nuestros equipos, especialmente nuestras cámaras fueron requisadas y nos confinaron a un área del bote. Los soldados tomaron el timón del capitán y empezaron a avanzar de un modo desordenado y errático, que causó que algunas personas se cayeran dentro del bote y que vomitaran. Nos llevan al puerto israelí de Ashdod, nos revisaron y nos encarcelaron. Los voluntarios pasaron hasta 9 días en prisión antes de ser deportados a sus países de origen .
La marina israelí usó fuerza innecesaria, hasta amenazaron con abrir fuego, contra un pequeño bote que llevaba a bordo civiles desarmados y ayuda para la gente de Gaza. Esto sirve para mostrar que el bloqueo de Israel a Gaza no tiene nada que ver con temas de seguridad y mucho que ver con castigar a una población completa debido a que Israel no gusta de su liderazgo. Israel está tratando de poner de rodillas al pueblo palestino al mantenerlos al borde de la inanición. No podemos permitir que esto siga sucediendo. A pesar de que Israel atacó nuestro barco, el Espíritu de la Humanidad, y antes de eso que hundieran otro de nuestros botes, el «Dignidad», en mitad del océano. No podemos permitir que esta violencia nos detenga. La violencia perpetrada sobre el pueblo palestino cada día que el mundo permanece en silencio es mil veces peor que lo que nosotros vivimos.
RM: Muchas personas en América Latina desea expresar su solidaridad con el pueblo palestino, cómo puede hacerlo.
HA: Por favor únanse a nuestros esfuerzos. Necesitamos usar nuestro poder ciudadano para hacer responsable a Israel por su permanente ocupación y limpieza étnica. Esto significa que tenemos que enfrentarnos a sus políticas abusivas y tenemos que organizarnos en nuestros países de origen para aislar a Israel. El Movimiento de Liberación de Gaza (www.freegaza.org) continuará enfrentando el bloqueo de gaza por parte de Israel hasta que se quiebre. El movimiento de Solidaridad Internacional (www.palsolidarity.org) continuará marchando lado a lado con los Palestinos en contra del constante robo de sus tierras y la destrucción de su propiedad. Grupos, organizaciones, sindicatos, escuelas, universidades, empresas e individuos todos tienen un importante rol que jugar en casa. Organícense para imponer amplios boicots e implementen iniciativas de desestimiento de inversión contra Israel, de forma similar a lo que se hizo contra Sudáfrica en la era del apartheid, hasta que Israel cumpla con su obligación de reconocer el inalienable derecho del pueblo palestino de la auto determinación y acate totalmente la ley internacional.
RM: Muchos tienden a comprar la situación de los palestinos con la sucedida en Sudáfrica con el aparthied. Crees que se pueda establecer un paralelo.
HA: Ninguna situación es exactamente igual a otra, pero es indiscutible que Israel ha institucionalizado un sistema de segregación. Israel ha creado un sistema de control que incluye caminos separados, inequidad en la infraestructura, derechos legales y acceso a tierra y recursos entre Palestinos y residentes israelíes en los territorios palestinos ocupados. La Ley israelí le confiere privilegios a los colonos judíos en desmedro de los palestinos en el mismo territorio, sobre la base de sus respectivas identidades. Un estudio sudafricano determinó que las políticas y leyes de Israel en los territorios palestinos ocupados se ajustan a la definición de segregación contenida en la Convención Internacional por la Supresión y castigo del Crimen de Segregación (estoy usando este término para denominar apartheid). El arzobispo Desmond Tutu y otros destacados líderes Sudafricanos han destacado que lo que Israel le está haciendo al pueblo palestino es peor que al apartheid. Es cierto que el régimen del apartheid en Sudáfrica confinaba a sudafricanos negros a bantustans, territorios aislados, pero no los atacaba en ellos con aviones F-16, tanques, fósforo blanco y otro tipo de artillería, al tiempo que les denegaba el derecho a huir. No les impuso un bloqueo en estas tierras, restringiendo el acceso a comida, remedios, libros, útiles escolares y miles de otros ítems. No bombardeó sus casas, escuelas y hospitales para después prohibir el ingreso de materiales de construcción para permitir a la gente reconstruir sus casas.
*periodista chileno, [email protected]