El MIA condena la agresión sufrida por el activista Fernando Llorente Arrebola, que fue atacado en su propia casa el día 12 de noviembre. La agresión le causó lesiones gravísimas que pudieron acarrearle la muerte. Desde el MIA sospechamos que la agresión puede estar relacionada con alguna de las actividades de defensa ambiental desarrolladas por […]
El MIA condena la agresión sufrida por el activista Fernando Llorente Arrebola, que fue atacado en su propia casa el día 12 de noviembre. La agresión le causó lesiones gravísimas que pudieron acarrearle la muerte. Desde el MIA sospechamos que la agresión puede estar relacionada con alguna de las actividades de defensa ambiental desarrolladas por Fernando.
El día 12 de noviembre, cuatro individuos se introdujeron en casa de Fernando, en el término municipal de Talaveruela de la Vera (Cáceres), con la excusa de pedirle ayuda y, una vez dentro, lo dejaron inconsciente de un fuerte golpe en la cabeza. Cuando recuperó la conciencia, Fernando les señaló donde guardaba el dinero y la reacción de los atacantes fue extremadamente violenta puesto que le golpearon la cara con un hacha, le rompieron la mandíbula y lo desfiguraron severamente. Las heridas podrían haber sido mortales.
La actuación de los atacantes hace difícil creer que el móvil del ataque fuera un mero atraco. Desde el MIA se sospecha que la pretensión de los agresores era la intimidar a Fernando y a todos los activistas ambientales. Fernando estaba comprometido en la demanda del cierre de la central nuclear de Almaraz, en la regeneración democrática de su pueblo y en la demanda contra la urbanización ilegal de la isla de Valdecañas, entre otras campañas.
La metodología de la agresión parece más una reacción a alguna de estas actividades, ya que un simple atraco no requería semejante nivel de violencia, que puso en peligro la vida de nuestro compañero. Si ese fuese el móvil, se trataría de un acto terrorista dirigido a amedrentar a Fernando y a los activistas ambientales que trabajan contra los proyectos que degradan nuestro medio natural y ponen en peligro nuestra propia salud.
Por todo ello, el MIA, además de condenar la agresión, exige que se esclarezcan los hechos.
Desde el MIA también nos solidarizamos con Fernando, y para mostrarle nuestro apoyo llamamos a participar en la concentración silenciosa de repulsa que se producirá el próximo sábado día 19-11-2016, a las 17 horas, en la Plaza de Talaveruela.
Más Información: Francisco Castejón, 639104233