Traducido para Rebelión por Marina Trillo
El comité ejecutivo de la OLP y el Comité Central de Fatah se reunieron el miércoles en Ramala y decidieron que en caso de que la gravedad del Presidente Palestino Yasser Arafat lleve a su fallecimiento, el presidente del Consejo Legislativo Palestino, Rouhi Fatouh lo sustituirá por un periodo de 60 días durante los cuales habrán de celebrarse elecciones generales para la elección de nuevo Presidente.
Dirigiéndose a los periodistas al salir de la reunión, el Miembro del Comité Central de Fatah, Rafiq Natsheh, dijo que la decisión de designar a Fatouh como Presidente «está condicionada a la existencia de una posibilidad real de celebrar elecciones antes de 60 días,» si se demuestra que no es posible, añadió «la cuestión será devuelta al mando Palestino para adoptar acuerdos convenientes»
La constitución Palestina establece claramente que en caso de que el presidente fallezca o se quede permanentemente incapacitado para realizar sus funciones, el presidente del CLP ocupará su lugar durante un periodo de 60 días para preparar unas elecciones presidenciales.
Los comentarios de Netsheh son más significativos que la decisión tomada por la reunión conjunta de Fatah-OLP. En realidad, considerando como están las cosas ahora mismo, es imposible celebrar elecciones presidenciales en las áreas de la Autoridad Palestina dentro de 60 días.
En primer lugar, tanto Israel como Estados Unidos han estado firmemente en contra de celebrar elecciones presidenciales en las áreas de la Autoridad Palestina, y no se espera que cambien de postura. Es obvio que sin la aprobación israelí será prácticamente imposible celebrar elecciones.
En segundo lugar, los Palestinos no acudirán a elecciones que excluyan la participación de los Palestinos de Jerusalén Este. Al mismo tiempo, la esperada pronta muerte de Arafat no convencerá a Israel para que permita la colocación de urnas en Jerusalén Este. Sobre la base de pasadas experiencias, les llevará a ambas partes más de 60 días preparar el orden del día de una reunión para hablar de una cuestión tan sumamente importante.
En tercer lugar, aún cuando el mando Palestino se presente sólido y unido, las luchas por el poder empezarán probablemente tras el final del período de luto. La ausencia del incontestado líder Palestino, que ocupó la cima de la pirámide política y nacional Palestina durante los últimos 40 años, no puede pasar desapercibida.
La ausencia de Arafat desatará finalmente las ambiciones de muchos miembros de la seguridad de OLP-AP y líderes políticos. Por lo tanto, se espera que las luchas por el poder dominen la vida pública Palestina durante un tiempo, sobre todo si se convocan elecciones rápidas.
Finalmente, en ausencia de Arafat, los grupos de oposición, en particular Hamas, emergerán como serios competidores. Los candidatos del movimiento Islámico tendrán verdaderas posibilidades de ganar. En sus pesadillas más terribles, Israel y Estados Unidos no consideraron quitar a Arafat como medio para invitar a Hamas.
Tal y como yo lo veo, la última decisión de OLP-Fatah es una maniobra política, que terminará probablemente con una declaración culpando a Israel de obstruccionismo ante los intentos de la AP de adherirse a las exigencias de la constitución. Por lo tanto, irá seguida de una decisión del mando para designar a Mahmoud Abbas como próximo Presidente Palestino.
10 de noviembre de 2004
http://www.imemc.org/headlines/2004/November/week2/111004/elections%20in%2060%20days.htm