Estimada diputada, estimado diputado: Reciba un cordial saludo de la plataforma estatal Activ@s contra la crisis*. El proyecto de reforma laboral que una mayoría de ustedes aprobó el pasado 29 de julio ha provocado el rechazo general entre las trabajadoras y los trabajadores, la beligerancia unánime del movimiento sindical, desde el sindicato más grande al […]
Estimada diputada, estimado diputado:
Reciba un cordial saludo de la plataforma estatal Activ@s contra la crisis*.
El proyecto de reforma laboral que una mayoría de ustedes aprobó el pasado 29 de julio ha provocado el rechazo general entre las trabajadoras y los trabajadores, la beligerancia unánime del movimiento sindical, desde el sindicato más grande al más pequeño, y la oposición de una amplia mayoría social que no quiere la involución de los derechos laborales y sociales, el acoso y castigo a los más débiles -por una crisis que no han provocado-, ni tampoco el retroceso de la calidad democrática en nuestra sociedad.
Desde entonces, la aplicación del objetivo real de la reforma, que no es otro que el de facilitar y abaratar el despido, no ha tardado en materializarse en varias empresas, llegando incluso a facilitar los despidos preventivos. Su trámite por el Senado, lejos de suavizar el proyecto de reforma laboral, ha empeorado su contenido. Así, se ha facilitado el abuso empresarial que supone el despido por absentismo, se han introducido mayores trabas para hacer fijos a las trabajadoras y los trabajadores eventuales, y se han abierto vías administrativas para maquillar las cifras del paro, criminalizando de este modo a las personas en paro que no accedan a un curso de formación en el abreviado plazo de 30 días.
A la mayoría de diputadas y diputados que otorgaron su voto favorable a la reforma laboral, les recordamos que tal decisión implica una renuncia del programa de defensa y mejora de los derechos de las trabajadoras y los trabajadores con el que se presentaron ante sus electoras y electores. Practicamente ninguna fuerza política concurrió a las elecciones con el programa de abaratar los despidos, congelar las pensiones, rebajar los sueldos del funcionariado público y mermar los servicios públicos de empleo mediante la privatización de gran parte de sus competencias. ¡Ese es el mandato popular al que deben lealtad democrática!
Sus Señorías fueron elegidos por sus conciudadanas y conciudadanos para defender sus derechos y la soberanía democrática, no para someterse a las imposiciones, instrucciones y chantajes escandalosos e inadmisibles de la Comisión Europea, el Gobierno alemán de la canciller Angela Merkel, el Banco Central Europeo, el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial, o los mercados financieros, cuya responsabilidad ante la crisis financiera y económica global es evidente. Tanto, como públicas y notorias han sido sus presiones y coacciones durante el estallido de la llamada crisis de «deuda soberana» de España.
Nos preguntamos, ¿Son ustedes conscientes de la tremenda regresión que están produciendo en los derechos, no sólo de las trabajadoras y los trabajadores sino de la ciudadanía en su conjunto, para defender únicamente los intereses de la industria financiera, de los bancos y las grandes empresas?
La retórica parlamentaria empleada por los defensores de la reforma laboral expresa la terrible actualidad de la «neolengua» orwelliana. Se defiende y justifica la reforma laboral en nombre del «empleo estable» y la «limitación de la precariedad laboral», cuando es todo lo contrario: se facilita el despido, se abarata, y se incrementa el paro y la precariedad.
Sus Señorías, que sepan que hasta el ciudadano más inocente y apolítico del país grita ¡»la reforma laboral está desnuda y sus lacras antisociales por el cuerpo de la ley son clamorosas!».
En la votación definitiva sobre el texto de la reforma laboral en la próxima sesión parlamentaria del jueves 9 de septiembre, ustedes pueden detener el curso hacia la regresión social y alejarnos de la espiral de medidas antisociales que nos arrastra hacia la barbarie. Para muchos de ustedes es el momento de reconciliarse con su conciencia, con sus conciudadanas/os, afialiadas/os de partido y de sindicato que les dicen, exigen o suplican: ¡voten NO a la reforma laboral!
Ustedes tienen la palabra y la decisión para tirar la reforma laboral al basurero de la historia, o por el contrario, para imponérsela al pueblo trabajador que la rechaza.
A las trabajadoras y los trabajadores y, a la ciudadanía solidaria en general, nos quedará la memoria para agradecérselo.
Atentamente,
Activ@s contra la Crisis
Activ@s contra la Crisis es una amplia plataforma estatal que reúne sindicatos, movimientos y organizaciones sociales, ecologistas, feministas, estudiantiles, de inmigrantes, plataformas de parad@s y partidos políticos de la izquierda transformadora.
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