Traducido del inglés para Rebelión por J. M.
La aldea palestina de Irqit se despobló en la guerra de 1948 y luego quedó casi totalmente arrasada. Ahora las nuevas generaciones de sus residentes originales están tratando de actualizar un fallo del Tribunal Superior de décadas de antigüedad que reconoce su derecho a regresar.
Un joven se sienta cerca de una cruz con vista a la campiña y los alrededores de la desplazada aldea palestina de Iqrit en el norte de Israel, 21 de abril de 2014. Los habitantes originales de Iqrit fueron evacuados a la fuerza en la Nakba de 1948. Aunque el alto tribunal israelí otorgó a los residentes, que son los palestinos ciudadanos de Israel, el derecho a regresar a sus hogares en 1951, el ejército destruyó el pueblo y ha impedido su regreso. Sólo la iglesia de la aldea y el cementerio se mantienen intactos y todavía son utilizados por los residentes de la aldea mientras hacen campaña para una vuelta completa.
Podría parecer que las autoridades israelíes se confabularon para entrelazar la historia de Iqrit con la narrativa cristiana.
En vísperas de Navidad, en noviembre de 1948, el ejército israelí forzó a los residentes de Iqrit y la vecina aldea de Kufr Bir’im -todos ciudadanos del nuevo Estado de Israel- a abandonar sus hogares cerca de la frontera norte con Líbano a causa de operaciones militares en la zona. La época del Advenimiento es la estación cristiana de espera antes del nacimiento de Jesús en Navidad. A los residentes de Iqrit les prometieron que podrían volver a sus hogares en el plazo de dos semanas. Todavía están esperando.
En julio de 1951, el Tribunal Supremo de Israel dictaminó que el pueblo de Kufr Bir’im y el de Iqrit tenían derecho a regresar a sus hogares. El ejército se negó a cumplir y en la víspera de la Navidad de ese año hizo estallar todas las casas de ambos pueblos. Sólo las iglesias y los cementerios se dejaron intactos. Poco después, todas las tierras de la aldea fueron confiscadas por el Estado. Como la familia del recién nacido Jesús huyó a Egipto, también estos pobladores se vieron obligados a exiliarse.
Desde entonces, décadas de movilizaciones y recursos legales por el derecho de los habitantes a regresar culminaron en una serie de decisiones favorables de los tribunales y de las comisiones que se han traducido sólo en más promesas rotas y resoluciones no ejecutadas.
En 1972, la primera ministra Golda Meir dijo claramente por qué incluso los ciudadanos palestinos desplazados de Israel dentro de su propio Estado no podían regresar a sus pueblos de origen:
«No es sólo la consideración de la seguridad [que evita] una decisión oficial sobre Bi’rim y Iqrit, sino el deseo de evitar un precedente. No podemos permitir que nos volvamos más y más enredados y lleguemos a un punto a partir del cual no podemos liberarnos».
En la década de 1970, el Gobierno había concedido el uso del cementerio, permitiendo que sólo los muertos vuelvan a Iqrit después que habían vivido y muerto en Kufr Yasif, Rameh, en Haifa o en otros lugares de exilio. Como un poblador comenta, «el cementerio es la única parte viva del pueblo, de acuerdo con la ley». Pero el evangelio cristiano que los residentes de Iqrit siguen sostiene que la tumba no tiene la última palabra.
«La comunidad está viviendo como una comunidad a pesar de la distancia geográfica», dice Shadia SBAIT, coordinador de la Asociación Comunitaria de Iqrit. Las familias se reúnen para la misa en la iglesia del pueblo el primer sábado de cada mes y mantienen campamentos de verano para los niños todos los años.
Después del campamento de verano de 2012, los jóvenes de la tercera generación de los sobrevivientes de Iqrit, tomaron la iniciativa de comenzar a resucitar el pueblo a pesar de limbo legal del mismo. Desde entonces, un grupo de más o menos 20 activistas se asegura de que el pueblo esté constantemente habitado durmiendo en tiendas de campaña, bajo las estrellas o en salas anexas a la iglesia.
«Están practicando retorno completo en Iqrit y nosotros estamos muy orgullosos de ellos», dice SBAIT. «Trajeron la vida de nuevo al lugar».
Las autoridades israelíes destruyen con frecuencia cada cosa nueva que construyen o plantan en el pueblo. Pero con el tiempo, han sido capaces de añadir algunas comodidades como paneles solares en el tejado de la iglesia y las luces eléctricas, televisión por satélite y ordenadores utilizados para campañas en los medios sociales.
Este espíritu de firmeza dio energía este año a las festividades de Lunes de Pascua en Iqrit mientras generaciones de aldeanos llenaban la iglesia y la plaza con una celebración de la oración, la poesía, la música, el arte y la fiesta. Tuvieron que celebrar la Pascua el lunes debido a que su sacerdote es prestado de un pueblo cercano donde tuvo que celebrar la misa del domingo. Los fieles de Iqrit están acostumbrados a esperar.
Después de la misa, los jóvenes contaron la historia de la aldea a través del teatro y la danza. Fotos en la pantalla mostraron el pueblo antes de su destrucción y sus diversas campañas y manifestaciones en los últimos años. El espíritu de la jornada fue a la vez festivo y desafiante, una declaración preventiva de la victoria haciéndose eco de la creencia cristiana no sólo en la resurrección de Jesús en la Pascua, sino también su promesa de volver algún día a establecer un reinado duradero de la justicia y la paz.
«No queremos regresar a nuestras aldeas en ataúdes, sino cuando estamos vivos», declaró el pueblo de Iqrit y Kufr Bir’im en una súplica al papa Francisco, que concluye:
Le rogamos que intensifique sus esfuerzos sagrados para ejercer presión sobre el Gobierno de Israel para poner fin a las injusticias que ha infligido a nuestra comunidad. Esperamos que su próxima visita a Palestina e Israel sirva para este fin… [N] uestras oraciones se centran en el objetivo de lograr nuestra propia resurrección en la tierra, con la justicia, la igualdad y la paz.
Un letrero hecho a mano señala el camino a la despoblada aldea palestina de Iqrit en el norte de Israel.
Un joven camina entre los escombros que cubren la aldea palestina desplazada de Iqrit, cuyos habitantes originarios fueron evacuados a la fuerza en la Nakba de 1948
El lunes de Pascua en la aldea palestina desplazada de Iqrit, los jóvenes realizan una danza interpretativa de la historia de la ciudad
Una fotografía de la aldea palestina de Iqrit antes de su destrucción está colgada en la iglesia, el único edificio que permanece en pie
Hanna Nasser de pie cerca de las tumbas de la familia en el cementerio de la aldea palestina desplazada de Iqrit. Sólo la iglesia de la aldea y el cementerio se mantuvieron intactos, y todavía son utilizados por los residentes de la aldea, mientras hacen campaña por un retorno completo.
Los niños contemplan a un artista que pinta un cuadro de la iglesia en la aldea palestina desplazada de Iqrit.
El lunes de Pascua en la aldea palestina desplazada de Iqrit, jóvenes y ancianos danzan alrededor de la iglesia del pueblo
Paneles solares y una antena parabólica se instalaron en el tejado de la iglesia de la aldea palestina desplazada de Iqrit en el norte de Israel, 21 de abril de 2014. Los habitantes originales de Iqrit fueron evacuados a la fuerza en la Nakba de 1948. Aunque el alto tribunal israelí otorgó a los residentes, que son los ciudadanos palestinos de Israel, el derecho a regresar a sus hogares en 1951, el ejército destruyó el pueblo y desde entonces ha impedido su regreso. Sólo la iglesia de la aldea y el cementerio se mantuvieron intactos y todavía son utilizados por los residentes de la aldea.
Paneles solares y una antena parabólica se han instalado en el tejado de la iglesia de la aldea palestina desplazada de Iqrit en el norte de Israel.
Una fotografía histórica muestra el desplazamiento de la aldea palestina de Iqrit por el ejército israelí en 1948.
El lunes de Pascua de 2014, generaciones de desplazados la aldea palestina de Iqrit celebran misa en la iglesia del pueblo, el único edificio que permanece en pie.
El lunes de Pascua en la aldea palestina desplazada de Iqrit, jóvenes danzan e interpretan música en frente de la iglesia del pueblo
Fuente: http://972mag.com/photos-on-easter-palestinians-resurrect-their-destroyed-village/89933/