Ahora que estamos envueltos en la memoria del antifranquismo digamos que yo jamás he olvidado a quienes han sumado siglos en las cárceles franquistas por el solo hecho de hablar a favor de la libertad. A mi no me hace falta recordar nada, jamás lo he olvidado. Por eso pido a los desmemoriados -o a […]
Ahora que estamos envueltos en la memoria del antifranquismo digamos que yo jamás he olvidado a quienes han sumado siglos en las cárceles franquistas por el solo hecho de hablar a favor de la libertad. A mi no me hace falta recordar nada, jamás lo he olvidado. Por eso pido a los desmemoriados -o a los ignorantes- que repasen los hechos de un siglo de historia en Palestina, y que quienes ahora se desmelenan con la democracia israelita pretendiendo oponerla a los gobiernos tiránicos de Oriente Medio, miren con atención que el terrorismo sionista de entonces son los lodos y los fangos en los que nos enterrarán en los años venideros. Para quienes quieran saber algo más antes de abrir su boca y decir sandeces, hecho habitual en periódicos y emisoras de radio, les ofrezco una lectura muy recomendable. No voy a pedirles a estos ignorantes – que con tanto desparpajo opinan- que se remonten a los acuerdos de Sykes-Picott, ni al primer congreso sionista en 1897; ni el papel que tuvo lord Rothschild, presidente de la Federación Sionista de Gran Bretaña en 1917; ni la declaración de Arthur Balfour, aunque no estaría de más que leyeran un poco de la historia documentada, no la inventada por la propaganda interesada y defensora de intereses ocultos. Lean, por favor los textos de las Resoluciones de la ONU, la 181 (29.11.1947); 194 (11.12. 1948); 242 (22. 11. 1967); 338 (22. 10. 1973); 3236 (22. 11.1974); 1322 (7. 10. 2000). Sólo esas por favor. No es preciso que lean las 46 Resoluciones de la ONU que el Estado Judío de Israel ha incumplido y que se pasado por el forro del pantalón. Por supuesto ahora esta en boga -de moda- mencionar la 1559 que obliga a la reorganización del Líbano y que hubiera dejado sin defensas a los libaneses. Los hechos son tozudos, y se ha visto que el ejército libanés -con unos 10.000 soldados de infantería- no puede contener la potente maquinaria militar del Estado Judío de Israel. Leamos más, y especulemos menos. También recomiendo una lectura muy interesante, averigüen lo que puedan sobre los grupos terroristas sionistas: Haganah, Irgún, Lehi o la banda de Stern, Palmaj, la Unidad 101. También repasen la historia de Ben Gurión (cómplice en la matanza del Hotel Rey David en 1946) y Menahen Beguin (autor material); de Isaac Shamir (Pimer Ministro presente en 1991 en las conversaciones de Madrid) autor material del asesinato del representante de la ONU Folke Bernadotte en 1948 (este caso es estudiado en Derecho Internacional en las Universidades españolas). Pero lean algo más, y vayan a Chaim Weizmann (Presidente de Israel), Golda Meir; Isaac Rabin; y al inigualable Simón Peres (laborista), miembro de la Haganah y jefe de reclutamiento de este grupo terrorista en 1940. Tienen todos ellos un pasado que usted mismo calificará como de héroes o villanos. Si usted se ocupa de leer yo no tendré que escribir esto nunca más. Para muestra un botón: lea por favor el Talmud y descubrirá perlas como esta. «asesinar a un no judío siempre que sea posible es una obligación. Un judío es un pecador si puede asesinar a no judíos pero no lo hace. Asesinar a los no judíos agrada a Dios, porque la carne de los no judíos es la carne de asnos y su esperma es el esperma de animales». Se enseña en la escuelas de primaria de todo el Estado de Israel. No sé que decir. Dígamelo usted.