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Fondo de Reserva de la Seguridad Social

Fuentes: Rebelión

En las siguientes líneas vamos a tratar de señalar lo que nos parece más peligroso y negativo del Proyecto de Ley de este Gobierno del PSOE, con el que se pretende canalizar una parte del llamado «Fondo de Reserva de la Seguridad Social» hacia inversiones en Bolsa, con el objetivo, según manifiestan, de lograr una […]


En las siguientes líneas vamos a tratar de señalar lo que nos parece más peligroso y negativo del Proyecto de Ley de este Gobierno del PSOE, con el que se pretende canalizar una parte del llamado «Fondo de Reserva de la Seguridad Social» hacia inversiones en Bolsa, con el objetivo, según manifiestan, de lograr una mayor rentabilidad. No debemos olvidar que este Proyecto cuenta con el total respaldo de la CEOE y de los llamados Agentes Sociales (UGT y CCOO).

Que el Estado invierta en Bolsa no es ninguna novedad. Actualmente tiene participaciones en varias empresas. Pero es que además las formas en las que el Estado incide de una manera indirecta y decisiva en la marcha de las sociedades cotizadas en Bolsa es enorme: desgravaciones fiscales, contratos del Estado, cotizaciones sociales, inversiones… son decisiones en las que los intereses de estas sociedades pesan más que los intereses de la mayoría de la población.

En estos últimos años hemos visto como a medida que se desarrollaban las multinacionales españolas, la diplomacia y los intereses del Estado van apareciendo cada vez más nítidamente como elementos de presión y de defensa de sus intereses ante los Gobiernos de los países extranjeros en los que invierten. Cuestionar esta política creemos que, además de justo, es necesario.

Dinero público en manos del capital financiero

Si los dineros del Estado y sus políticas se acoplan tan perfectamente a los intereses de las empresas del IBEX 35 no tienen necesidad de que parte del «Fondo de Reserva» pase de financiar Deuda Pública a participar en una pequeña parte de su capital bursátil.

La gestión de esos fondos públicos la llevará a cabo la oligarquía financiera por mediación de las llamadas Gestoras de Fondos de Pensiones. Es de tal calado la medida que supone entregar, en lo inmediato, decenas de miles de millones de euros a las Entidades financieras para su gestión, dándoles un poder de decisión que no les corresponde y asegurándoles unos suculentos ingresos por sus comisiones de gestión. Estas medidas van en el camino de satisfacer una de sus más importantes reivindicaciones de futuro: la gestión de los fondos de la Seguridad Social para el pago de las pensiones.

No debemos olvidar que desde hace más de quince años, los Servicios de Estudios de estas Entidades vienen anunciando la quiebra inminente del sistema de pensiones en nuestro país y la necesidad de importantes reformas. Retomando el objetivo declarado de este Proyecto de Ley, que es el de aumentar la rentabilidad de este «Fondo de Reserva», hay que decir que los Fondos de Pensiones que gestiona la gran banca no se caracterizan precisamente por la rentabilidad que obtienen para los partícipes. Otra cosa sería si nos fijamos en los rendimientos que obtienen los dueños de la Sociedad de Gestión. Si lo que realmente se pretendiese fuera aumentar su rentabilidad, que se haga directamente por parte del propio Estado, sin necesidad de intermediarios, que en el mejor de los casos lo único que harán será restar la rentabilidad al detraer sus comisiones.

Es inconcebible que un Estado como el español decline su responsabilidad en una cuestión como esta. Lo que se persigue es dar un nuevo paso para poner el Estado al servicio de los grandes intereses corporativos de este país. De aquí viene el enojo con que el Partido Popular ha recibido este Proyecto de Ley, negando la necesidad de tramitarlo por procedimiento de urgencia, porque quieren ser ellos, cuando vuelvan al Gobierno, quienes se reivindiquen ante la gran banca con una medida como ésta.

Los pocos meses que quedan de Legislatura, la falta de mayoría parlamentaria, la incertidumbre sobre los valores de la Bolsa y la postura señalada del PP, nos deberían permitir mirar esperanzados el futuro inmediato, ya que es posible que esta Ley quede para más adelante. Pero este aplazamiento no serviría para nada si no somos capaces de denunciarlo ante la opinión pública y levantar una oleada de opiniones que frenen estos aires de rapiña.

Hemos dejado para el final el señalamiento de uno de los capítulos más vergonzantes de esta historia. Desgraciadamente nos referimos a una parte de los llamados agentes sociales (UGT y CCOO). Su interés en este tema es lo inmediato. Con su participación accionarial en las principales sociedad de Gestión de Fondos de Pensiones, en las que poseen cada una un 15%, este Proyecto de Ley viene a asegurarles nuevos ingresos millonarios a los que ya obtienen con el Fondo de Pensiones de los Funcionarios Públicos, recurrido ante los Tribunales, el Fondo de Pensiones de los Trabajadores de Telefónica, etc.

http://www.coordinadorasindicalm.org/