En un comunicado oficial, Richard Falk, el Relator Especial de la ONU sobre la situación de derechos humanos en los Territorios Ocupados desde 1967, denuncia el bloqueo de Israel sobre Gaza como «una violación flagrante, continua y masiva del derecho internacional humanitario»; describe la situación de catástrofe humanitaria; califica las políticas implementadas como […]
En un comunicado oficial, Richard Falk, el Relator Especial de la ONU sobre la situación de derechos humanos en los Territorios Ocupados desde 1967, denuncia el bloqueo de Israel sobre Gaza como «una violación flagrante, continua y masiva del derecho internacional humanitario»; describe la situación de catástrofe humanitaria; califica las políticas implementadas como un Crimen contra la Humanidad; acusa de cómplices a los gobiernos que continuan brindando su apoyo político y económico a Israel; llama a las Naciones Unidas a adoptar inmediatamente una acción protectiva para proteger a una población civil que está siendo castigada colectivamente; y destaca que Corte Penal Internacional denería imputar a los líderes civiles israelíes y los comandantes militares responsables del sitio a Gaza por violaciones al derecho internacional humanitario.
9 de diciembre de 2008
Richard Falk, el Relator Especial de la ONU sobre la situación de derechos humanos en los Territorios Ocupados desde 1967, emitió el siguiente comunicado:
Ginebra
En días recientes, la desesperada situación de la población civil de Gaza ha sido reconocida por figuras internacionales tan respetadas como el Secretario General de las Naciones Unidas, el Presidente de la Asamblea General de las Naciones Unidas y la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
La semana pasada, Karen AbyZayd, quien encabeza los esfuerzos de ayuda de las Naciones Unidas en Gaza, ofreció una confirmación de primera mano acerca de la desesperada urgencia y las condiciones inaceptables que enfrenta la población civil de Gaza. Aunque muchos líderes han comentado la crueldad y la ilegalidad del bloqueo impuesto por Israel sobre Gaza, tal proliferación de denuncias por oficiales normalmente cautos de las Naciones Unidas no había ocurrido a escala global desde el apogeo del apartheid sudafricano.
Y sin embargo, Israel mantiene su bloqueo sobre Gaza al punto de máxima furia, permitiendo que entre apenas la comida y combustible suficientes para que no se desate la hambruna masiva y la enfermedad. Una política de castigo colectiva como ésta, iniciada por Israel para castigar los desarrollos políticos que tuvieron lugar a lo interno de la Franja, constituye una violación flagrante, continua y masiva del derecho internacional humanitario bajo el artículo 33 de la Cuarta Convención de Ginebra.
Ya hace mucho que las conversaciones dejaron de ser suficientes. Como lo ha afirmado AbuZayd, «el abismo entre la palabra y el hecho » en relación con el respeto de los derechos humanos en la Palestina ocupada crea una situación en la que el «radicalismo y el extremismo se enraízan fácilmente». Las Naciones Unidas están obligadas a responder bajo estas condiciones. Algunos gobiernos del mundo son cómplices al continuar brindando su apoyo político y económico a la aproximación punitiva de Israel.
Debe adoptarse inmediatamente una acción protectiva para compensar las persistentes y amplias violaciones del derecho fundamental a la vida, y frente a la situación de emergencia que está produciendo la catástrofe humanitaria que se despliega día a día. Por difícil que sea políticamente, es tiempo de actuar. Como mínimo, se debería realizar un esfuerzo urgente a nivel de Naciones Unidas para implementar la norma acordada de ‘responsabilidad de proteger’ a una población civil que está siendo castigada colectivamente por políticas que califican de Crimen Contra la Humanidad.
De la misma manera, pareciera una obligación de la Corte Penal Internacional abrir una investigación sobre la situación, y determinar si los líderes civiles israelíes y los comandantes militares responsables del sitio a Gaza deberían ser imputados y procesados por violaciones al derecho internacional humanitario. Como ha declarado AbuZayd, «Esta es una crisis humanitaria impuesta deliberadamente por actores políticos».
Debe tomarse nota de que la situación empeoró en días recientes luego de que se rompiera una tregua entre Hamas e Israel que había sido observada por varios meses por ambas partes. La tregua fue respetada por Hamas a pesar del fracaso de Israel de cumplir con su obligación bajo el acuerdo de mejorar las condiciones de vida del pueblo de Gaza.
El reciente rebrote de la violencia ocurrió luego de una incursión israelí que mató a varios supuestos militantes palestinos dentro de Gaza. Es una violación criminal del derecho internacional que elementos de Hamas o cualquier otra persona dispare cohetes a poblaciones israelíes independientemente de la provocación, pero un comportamiento palestino de esta naturaleza no legaliza la imposición por Israel de un castigo colectivo que amenaza la vida – y la salud – del pueblo de Gaza, y no debería distraer a las Naciones Unidas o a la sociedad internacional de cumplir con su deber fundamental y moral de brindar protección al pueblo palestino.
Traducido por Asociación de Socorro al Pueblo Palestino, Canaan (www.canaan.org.ve)
Comunicado en inglés en la página de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos:
Gaza: Silence is not an option
http://www.unhchr.ch/huricane/