Traducido del inglés por Carlos Sanchis y revisado por Caty R.
Me llevaron ayer ante el tribunal por sentarme en una casa de una aldea beduina no reconocida cuando la excavadora se encontraba frente a la pared, lista para demoler la casa. La policía me sacó de allí y me arrestó, y un par de años después me han llevado a juicio por «perturbar a un policía».
Nos reunimos unos 40 de nosotros media hora antes del juicio. Nos sentamos fuera del tribunal: éramos judíos y árabes. Ésta no fue una batalla de judíos contra árabes -sino de todos nosotros contra una injusticia de gran alcance-.
En el palacio de justicia me senté en el banquillo de los acusados. Todos los asientos de la sala estaban ocupados: mis colegas, mis compañeros activistas de derechos humanos, líderes de la comunidad beduina y el hombre cuya casa demolieron aquel día. Todos estaban allí conmigo. El abogado Gabi Laski presentó los alegatos preliminares: la «defensa de la justicia»: ¿Cómo puede el gobierno de Israel declarar tanto que los beduinos no son intrusos como que el gobierno debe reconocer los pueblos y al mismo tiempo demolerles las casas? Las estadísticas dicen que una de cada doce familias de la comunidad beduina ha sufrido la experiencia de la demolición de una casa… ¿Y cómo puede la Knesset aprobar una ley que perdona a las personas que han actuado oponiéndose a la evacuación de la colonia de Gush Katif, sobre la base de que esta evacuación fue traumática, pero por otro lado las demoliciones de viviendas han sido traumáticos durante los últimos 60 años, y encima el gobierno me lleva a juicio?
Las palabras del abogado Laski, que describen vívidamente la brutalidad de las políticas contra los beduinos, otorgan dignidad a la situación. En cuanto a mis amigos y compañeros, a mi manera, sentía como si estuvieran gritando en silencio: todos estamos contigo en ese asiento. El letrado Laski nos representa a todos nosotros. El juez nos juzgará a todos.
¡Gracias a todos! a quienes me enviasteis una palabra de aliento, a quienes estáis compartiendo la carga financiera, a todos los que vinisteis… habéis hecho compartida la carga y la responsabilidad de la situación. No me sentí sola en absoluto. Yo, y creo que todos, salí de este intento del gobierno por romper nuestro espíritu mucho más fuerte.
El juez, magistrado George Amorai, parece interesado en la línea de defensa que el abogado Laski está presentando. Ambas partes fueron requeridas para proporcionar sus alegaciones por escrito y la próxima audiencia tendrá lugar el jueves 16 de septiembre.
Dos horas antes de mi juicio Nuri el Uqbi fue procesado por un montón de falsas acusaciones por parte de la policía. El juez dictaminó que todas ellas eran falsas…
Para más información: Yeela Raanan, Consejo Regional de las Aldeas No Reconocidas (RCUV). 972 7487005 54. [email protected]
Fuente: http://theonlydemocracy.org/