El Pueblo Nuevo dialogó en forma exclusiva con el Embajador Palestino en nuestro país, Walid Muaqqat, sobre la situación del Pueblo Palestino; La Flotilla de la Libertad y el accionar del Estado de Israel. Una nueva flotilla solidaria estaba poniéndose en marcha desde Grecia, pero desde Israel dijeron que impedirían su llegada y el gobierno […]
El Pueblo Nuevo dialogó en forma exclusiva con el Embajador Palestino en nuestro país, Walid Muaqqat, sobre la situación del Pueblo Palestino; La Flotilla de la Libertad y el accionar del Estado de Israel.
Una nueva flotilla solidaria estaba poniéndose en marcha desde Grecia, pero desde Israel dijeron que impedirían su llegada y el gobierno griego les prohibió la salida, ¿cómo ven Ustedes esta cuestión?
No es extraño para nosotros ese comportamiento de parte del gobierno de Israel porque, y en primer lugar quiero describir qué es Israel, es el gran violador de los Derechos Humanos en el mundo.
Israel superó al régimen del apartheid de Sud África, sometiendo al pueblo palestino bajo su hegemonía con todas las medidas represivas.
La represión en el pueblo palestino es insoportable, donde estamos frente a un ocupante bien decidido a seguir confiscando los territorios palestinos. Sigue construyendo asentamientos en nuestro territorio; sigue impidiendo a los palestinos cultivar sus tierras, bajo órdenes de que son zonas militares. Israel quiere asfixiar al pueblo palestino para que salga de su territorio y avanzar en la limpieza étnica que está haciendo, dando la espalada a todos los organismos internacionales y a todos los estados amantes de la paz y la justicia.
Los palestinos seguimos en nuestra lucha, no violenta, contra este ocupante hasta que podamos lograr nuestra soberanía e independencia.
En las últimas semanas salió la noticia de la orden de detención por parte del Tribunal Penal Internacional para Muamar Kadafi y si uno compara estas acusaciones con los hechos que viene cometiendo Israel en Palestina no se comprende la inacción de los organismos internacionales.
Exactamente. No hay comparación absoluta entre lo que hace Israel y de lo que acusan a Libia.
Israel lleva 63 años de ocupación con cotidiana violación de los Derechos Humanos; de represión del pueblo, haciéndoles la vida imposible; matando, asesinando y aplicando castigos colectivos. Imaginemos que el Parlamento israelí sacó una ley por la que permite utilizar la tortura sobre los palestinos en las investigaciones. No hay justicia en el mundo cuando vemos que se defiende a los movimientos llamados de «la primavera árabe» y defendiendo sus derechos a la autodeterminación y la libertad, cuando se trata de Palestina, todas las bocas se cierran, y la pregunta es, ¿acaso el pueblo palestino no es parte integrante de este mundo?
Estamos enfrente de un panorama totalmente injusto y parcial.
El informe Goldstone, aprobado en la ONU, comprobó que durante la última incursión israelí a Palestina se utilizaron armas prohibidas y se asesinaron niños.
El informe Goldstone ha sido una clara evidencia para la comunidad internacional pero lamentablemente ahí está el informe en papel sin que haya una reacción ni un castigo ni condena contra Israel.
Por eso no nos queda otra opción que seguir luchando y trabajar arduamente para que el próximo septiembre en la ONU Palestina sea reconocida como un miembro pleno y sea protegida de una vez por todas por las resoluciones y la legalidad internacional.
¿Cuáles son las expectativas que tienen de esta reunión en Naciones Unidas?
Hasta ahora tenemos más de ciento veinte países que reconocieron el derecho del pueblo palestino a ser miembro pleno de la ONU y seguimos haciendo una campaña a todos los niveles en Europa; Asia; América Latina y en el Caribe para que esos gobiernos voten a favor de este derecho del pueblo palestino a obtener su soberanía.
¿Cómo siente el pueblo palestino las muestras de solidaridad del mundo como la flotilla que está a punto de partir?
La flotilla actual ya ha sufrido sabotajes en territorio griego, lo que demuestra que Israel a través de sus servicio secreto está trabajando para frenar su salida utilizando todas sus influencias en Grecia y medidas terroristas.
La flotilla la integran barcos de todo el mundo como españoles; estadounidenses; turcos; griegos e incluso israelíes. Esta solidaridad significa mucho para el pueblo palestino y demuestra que el mundo entero está apoyando para que logremos nuestra independencia y lograr romper el bloque a los habitantes de la Franja de Gaza que se ha convertido en una cárcel con un millón y medio de personas en trescientos sesenta kilómetros cuadrados, por lo que la zona más poblada del mundo, donde carecen de comida; medicinas; materiales de construcción, donde el gobierno israelí destruyó más de diez mil viviendas.
Los que van en estas flotillas saben bien que sus vidas están amenazadas y sin embargo quieren seguir luchando junto al pueblo palestino a enfrentar a este estado terrorista, por lo que más que nunca no perdemos la esperanza.
Casi el 65% de la población israelí está a favor de la conciliación y de la paz, pero en las elecciones ganan los ultra ortodoxos, que están llenos de discriminación y odio contra los palestinos.
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