En la Junta Rectora del Parque Regional del Sureste, reunida ayer lunes, la Comunidad de Madrid ha apoyado unproyecto del campo de golf en Getafe, dentro del parque Regional del Sureste, pese a que las previsiones del futuroPlan Rector de Uso y Gestión (PRUG) prohíbe expresamente futuras instalaciones de este tipo. Con esta postura,incompatible con […]
En la Junta Rectora del Parque Regional del Sureste, reunida ayer lunes, la Comunidad de Madrid ha apoyado un
proyecto del campo de golf en Getafe, dentro del parque Regional del Sureste, pese a que las previsiones del futuro
Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) prohíbe expresamente futuras instalaciones de este tipo. Con esta postura,
incompatible con unos criterios lógicos de conservación, la Consejería de Medio Ambiente y Urbanismo está
primando los intereses urbanísticos y especulativos en la zona de Perales del Río (Getafe). Al liberarse suelo en el
interior del Parque para este campo de golf, se deja más terreno para urbanizar en los nuevos desarrollos de
Perales (al lado justo del límite del Parque), y de paso se revalorizan las plusvalías para especuladores,
constructores y propietarios del suelo.
El campo de golf, proyectado por la Federación Madrileña del Golf y el Ayuntamiento de Getafe, se situaría en las
inmediaciones del barrio de Perales del Río, ocupando una superficie de 60 hectáreas dentro del Parque Regional del
Sureste. Constaría de 18 hoyos, más un campo de prácticas, aparcamiento para 200 vehículos y edificaciones para el
centro social. El consumo estimado de agua sería de unos 382.000 m3/año, supuestamente procedentes de la cercana
depuradora Sur, aunque el proyecto se guarda la posibilidad de la conexión a la red del Canal de Isabel II. Las aguas
procedentes de las depuradoras no reúnen la calidad suficiente para el riego de estas instalaciones. Además de los altos consumos de agua, el campo de golf supondría un foco más de contaminación a los suelos y a los acuíferos, debido a las altas dosis de productos fitosanitarios que se emplearían para el cuidado del césped.
La zona del proyecto cuenta con grandes posibilidades de regeneración, en las inmediaciones del río Manzanares.
Supondría la desnaturalización del soto de ribera, que actualmente cuenta con manchas de olmos aparentemente no
atacados por la enfermedad de la grafiosis.
Detrás del proyecto se esconde una gran operación especulativa, fomentada por el Ayuntamiento de Getafe. Este
Ayuntamiento realizaría una permuta de suelo con los propietarios de las parcelas donde se situaría el campo. Se
intercambiaría así suelo no urbanizable de protección por suelos urbanizables. Por otro lado, el actual PGOU de Getafe
propone urbanizar toda la zona de Perales del Río. La existencia del campo de golf provocaría un aumento automático del valor de esos suelos.
La actitud de la Administración Regional resulta escandalosa. El apoyo a esta iniciativa urbanística se produjo tras entregar ayer, a la Junta Rectora, el borrador del Plan Rector de Uso y Gestión del Parque (que debería haber entrado en vigor en agosto de 1999). En este documento se especifica taxativamente que «Queda prohibida la instalación de nuevos campos de golf o para prácticas de este deporte» (página 39).
Estas prácticas especulativas ligadas a la construcción de campos de golf son desafortunadamente frecuentes en la Región.
En la actualidad existen unos 15 proyectos sobre el plano (Algete, Aranjuez, Valdemoro, San Sebastián de los Reyes…),
todos ligados a actuaciones urbanísticas. De llevarse a cabo todos estos proyectos se podría llegar a una situación de
colapso hídrico en la Comunidad de Madrid.