Durante horas de la madrugada del día 28 de junio de 2006, las Fuerzas de Ocupación israelíes lanzaron una extendida ofensiva en el sur de la Franja de Gaza. Como parte del asalto, la Fuerza Aérea israelí atacó tres puentes y la estación de energía de la Ciudad de Gaza, cortando la electricidad a casi […]
Durante horas de la madrugada del día 28 de junio de 2006, las Fuerzas de Ocupación israelíes lanzaron una extendida ofensiva en el sur de la Franja de Gaza. Como parte del asalto, la Fuerza Aérea israelí atacó tres puentes y la estación de energía de la Ciudad de Gaza, cortando la electricidad a casi toda la zona.
Uno de los puentes es aquel en Wadi Gaza, donde algunas ONGs medioambientales, miembros de PENGON, habían implementado generador de electricidad basado en energía solar, un proyecto de luminarias en el área, como un medio para promover tecnologías medioambientalmente limpias y reducir la contaminación de la generación de energía basada en la combustión. Parte del proyecto también ha sido destruido por el bombardeo.
El transformador es también utilizado para ayudar el bombeo de agua desde la red acuífera hacia los departamentos en Gaza. Como la energía ha sido cortada, el agua no puede ser bombeada y la población de Gaza no puede acceder al agua. Como resultado, cerca de 860.000 residentes en Gaza están actualmente sin electricidad ni agua corriente.
Los peligros a la salud pública, la sanidad y el medioambiente provenientes del daño causado a la infraestructura como resultado de la operación militar, incluye:
Los peligros a la salud pública, la sanidad y el medioambiente provenientes del daño causado a la infraestructura como resultado de la operación militar, incluye:
- cortes de agua
- contaminación de cualquier remanente de agua potable
- descarga descontrolada y flujo de aguas servidas sin tratamiento hacia las calles, resultando en la contaminación de los acuíferos subterráneos
- contaminación de tierras agrícolas que la población de Gaza no podrá cultivar ni cosechar, impactando negativamente en su capacidad de ingreso.
- daños a la flora y fauna marina por las aguas residuales sin tratamiento que fluyen hacia el mar
- migración de peces a otros lugares de la costa, resultando en una reducción del número de pescados, y en consecuencia, el dinero recaudado por los pescadores de Gaza será menor.
- exposición directa a aguas residuales en los sistemas abiertos
- riesgos indirectos a la salud humana debido al consumo de cultivos y pescados contaminados
- un incremento de hepatitis aguda y enfermedades infecciosas como resultado de virus, bacterias y protozoos adicionales en el agua. Esos son los causantes de serias enfermedades desde la gastroenteritis y cólera hasta fallas hepáticas y la muerte.
Jan Egeland, el sub-secretario de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas, ha advertido que la población de Gaza está a tres días de una mortífera crisis humanitaria a menos que Israel restaure sin demora el combustible y la electricidad requerida para bombear el agua. «Ellos se dirigen al abismo a menos que se les restaure la electricidad y el combustible… hay cientos de miles de niños que se encuentran sin agua ni electricidad… sin agua limpia en el caluroso verano estaríamos viendo en cosa de días una importante crisis humanitaria», declaró. La acción militar de Israel ha impactado en civiles inocentes, y por eso viola el derecho humanitario internacional. PENGON demanda a la comunidad internacional a presionar a Israel para que detenga su asalto inmediatamente.
Translation from english: E Abedrapo.