Desde la época en la que Guillermo Cabrera dirigía el Instituto Internacional de Periodismo José Martí y yo iba allí con frecuencia -lo mismo a la defensa de una tesis que a tomarme un café con el Guille- me he hecho una pregunta: ¿por qué los dueños de esa mansión de 21 y G construyeron […]
Desde la época en la que Guillermo Cabrera dirigía el Instituto Internacional de Periodismo José Martí y yo iba allí con frecuencia -lo mismo a la defensa de una tesis que a tomarme un café con el Guille- me he hecho una pregunta: ¿por qué los dueños de esa mansión de 21 y G construyeron un hueco? Nunca le pregunté a mi sabio interlocutor. Quizás él no lo sabía tampoco, aunque, por supuesto, supongo que sus primeros inquilinos dejaron la oquedad y luego otras personas fabricaron bancos, escaleras, todo rústico.
Lo cierto es que como la furnia de Las iniciales de la tierra, la medular novela de Jesús Díaz, el hueco, también en el medio del Vedado, puede servir para muchas cosas como la peña La pupila asombraba que los últimos viernes de cada mes, a partir de las seis y treinta de la tarde, se desarrolla en ese pintoresco lugar.
Utilizando el decir audiovisual: la idea y el proyecto son de Iroel Sánchez, que como todo lo que hace, le impregna su aliento particular de hombre defensor del socialismo y de Cuba. Para acompañarlo se buscó a un talentoso y carismático loco, mi amigo El Fide, (Fidel Díaz Castro), con quien sostengo encendidas polémicas porque tiene un gran defecto: ser industrialista.
Fui a la última peña, actuaba Alexis Díaz Pimienta, otro gran amigo, también industrialista pero por embullo (no sabe nada de pelota, El Fide sí). Uno y otro cuando iba por la acera del instituto dijeron: «Ahí viene Paquita Armas». Empecé a sentirme muy bien: La pupila asombrada no tiene nada de encartonada, es espontánea y a la vez muy seria cuando se requiere.
Iroel presentó, con el rigor que se necesitaba, a Victor Casaus, quien habló de su excelente texto Girón en la memoria, que allí repartieron y yo pude tener de nuevo un ejemplar. El mío me lo habían robado.
Y Alexis una vez más demostró quién es en la improvisación con una larga seguidilla. Luego tocó con un grupo de Pimientas pero sería bueno que alguna vez fuera a La pupila… como narrador, poeta, ensayista, con una buena cantidad de libros publicados y premios dentro de la literatura porque siempre el buen repentista le gana al buen escritor.
Le pregunto a Iroel cuándo surgió y qué diferencia a La pupila… de otras peñas y me dice: «La primera fue el 24 de enero. Es una extensión de mi blog, La pupila insomne, en asociación con El diablo ilustrado y también una evolución de la peña La Utopía que hacía el Fide. Mantiene la estética de mi blog, su vocación de no esconder una intencionalidad cultural e ideológica y también difundimos materiales -sobre todo videos e imágenes- que vienen del blog. Creo que lo que la diferencia de otras peñas es la concepción de incluir cortos de cine de estudiantes del ISA, materiales periodísticos extraídos de la web, comentar a fondo una noticia o tema reciente, la tecnología que da la posibilidad de llevarse esos materiales vía WiFi o chatear. La flexibilidad que permite entrevistar a un invitado, presentar un libro o incluir a alguien como Alexis que no es exactamente un trovador. Se venden tragos. Nuestra aspiración es que sea como un cabaret inteligente y tecnológico pero sin lentejuelas ni estridencias.»
El día que fui, sin que sea una excepción, según me dice Iroel, hubo una asistencia mayoritaria de jóvenes, estudiantes universitarios, gente que sale de su trabajo y profesionales de centros científicos.
La peña arranca con unos quince minutos de videos de música poco difundidos en los medios, luego se presenta el espacio por Iroel y el Fide; sigue otro paquete de videos (¡por supuesto, no de los paquetes audiovisuales que se alquilan!), le sigue el espacio periodístico y luego empieza el concierto del invitado principal que puede durar entre 45 minutos y una hora.
Y termina con otros videos vinculados a un tema que el Fide comenta, puede ser García Márquez, o Santiago Feliú o Juan Gelman, uno o dos cortos de jóvenes del ISA y al final generalmente cierra una descarga de trovadores. Por ahí han pasado Alejandro Gil y sus películas, Oni Acosta con el tema Chavez y la música, también se han comentado las polémicas que han generado el paso de artistas cubanos por Miami y proyectado videos de esos momentos.
La selección musical corre a cargo de El Fide que tiene mucha información, conocimiento, y buenos archivos, por lo general es música de alta calidad, poco difundida aquí. La llamada canción pensante tiene un peso, también el rock, música brasileña, siempre ha habido temas de Calle 13, de Silvio, de Sabina, de Fito, de Santi…
Para Iroel, al cabo de tres meses resulta gratificante » la estabilidad y la convocatoria que se han alcanzado, también que nos acompañen gente de excelencia (Gerardo Alfonso, Tony Ávila, Raúl Torres, Alexis) que vayamos incrementando los contenidos que damos por el WiFi (Ya tenemos 42 gigas de libros, videos, música, arte digital)»
Iroel reconoce el apoyo de la UJC y del Instituto Internacional de Periodismo, se alegra de que se multiplique lo que a otros les sea útil o válido: Los Pimienta se llevaron la idea del WiFi para su peña en el Pabellón Cuba y en la UCI crearon una Pupila digital .
Por ser de fácil acceso, el espacio La pupila asombrada está llamado a ser un punto de referencia en el imaginario mapa de ofertas de entretenimiento, pero ojo: este pretende ser un auténtico espacio en el que el pensar acompañe la risa y el placer.