Las Fuerzas Israelíes de Defensa (IDF) todavía están usando a los palestinos como escudos humanos, desafiando una sentencia del Tribunal Supremo prohibiendo tal práctica, de la que el diario Haaretz ha tenido conocimiento. Fuerzas de las IDF irrumpieron en casa de Mahmoud Rajabi en el vecindario de Jabel Johar en Hebrón […]
Las Fuerzas Israelíes de Defensa (IDF) todavía están usando a los palestinos como escudos humanos, desafiando una sentencia del Tribunal Supremo prohibiendo tal práctica, de la que el diario Haaretz ha tenido conocimiento.
Unos 15 soldados, armados con rifles, ametralladoras y equipo de observación, tomaron el apartamento del cuarto piso donde los 16 miembros de la familia de Rajabi viven, por lo menos la mitad de ellos son menores. La familia está formada por Rajabi y su esposa, sus niños y su hijo Nabil y los suyos.
Los miembros de la familia dijeron que los soldados pidieron a la mayoría de ellos que salieran, pero retuvieron a tres de los hijos de Rajabi – Nabil, de 30 años, Raja’ai, de 19 y Najah, de13 – cautivos en el apartamento. Los tres fueron usados como escudos humanos durante la estancia de los soldados, contra suvoluntad. Los soldados no les dijeron cuánto tiempo durarían las operaciones ni cuánto tiempo pensaban permanecer en su casa. El resto de familiares fueron a otros apartamentos del edificio que es propiedad de Rajabi.
Al principio, el portavoz de las IDF negó que que los tres hermanos estaban retenidos contra su voluntad y dijo que podrían salir siempre que ellos quisieran. Pero el comandante de la fuerza le dijo a Haaretz que estaban reteniendo a los tres hasta que acabaran las operaciones.
Aparentemente sin darse cuenta del la obligación de las IDF bajo la sentencia del Tribunal Supremo de no usar a civiles como escudos humanos, Liron dijo que era el procedimiento normal pensado «para proteger las vidas de sus soldados». Él también ignoraba el rechazo del portavoz de las IDF a que los tres estuvieran retenidos hasta el final de las operaciones.
El comandante dijo que él y las tropas estaban usando a los miembros de la familia para «impedir el lanzamiento de piedras y grandas a los soldados en la casa.»
Confirmó que estaban reteniendo a tres hombres dentro del apartamento pero dijo, «Estamos tratándolos muy bien aquí, no como los enemigos. Ellos saben que nosotros no estamos aquí para hacerles daño.»
Preguntado si conocía la sentencia del Tribunal Supremo que prohibe el uso de civiles como escudos humanos, dijo, «yo no se de violaciones de la ley. Yo estoy preparado para lo que sea para proteger a mis soldados. ¿Qué pasaría si mientras abandono el edificio mi legislador fuwera atacado con piedras o con una bomba?»
Preguntado por lo haría él si alguien hiciera lo mismo a su familia, el comandante dijo, «Usted está entrando ahora en política, y yo no me meto en política.»
Nabil Rajabi dijo, «Los soldados entraron en el edificio sin mostrar orden alguna o decirnos por qué estaban forzando la entrada. A los otros les ordenaron salir y nos dijeron que nos quedáramos con ellos. Teníamos que estar con ellos todo el tiempo.»
Los soldados abandonaron la casa de la familia antes del alba, el viernes.
Las IDF habían dicho en el pasado que acataban la decisión judicial y negaron que tales medios todavía estuvieran en uso.
El abogado de Rajabis, Laviv Haviv, ellos enviado una carta al Fiscal del distrito de Judea y Samaria exigiendo que los tres hermanos sean liberados. «Este flagrante acto ilegal constituye una infracción severa de los derechos y de la dignidad de la familia Rajabi, después de que fueran conducidos fuera de su apartamento,» escribió.
El portavoz de IDF dijo, «Todos los años empiezan el primer día de Elul (lunes), hay 20 días, 10 de los cuales se permiterezar sólo a los judíos orar en la Cueva de los Patriarcas [en Hebrón]. Los otros 10, se permite sólo a los musulmanes, rezar en la cueva.»
Las IDF han estado preparando la salvaguarda de los servicios religiosos judíos y musulmanes en la cueva, cuando muchos devotos llegan para orar. Como parte del despliegue, las tropas tomaron posiciones preminentes en azoteas, y en algunos casos los efectivos fueron reforzados. En uno de los edificios de los que fueron tomados, el comandante retuvo a algunos de los civiles de la casa. Esto constituye una violación de los procedimientos y se investigará completamente con toda la apropiada seriedad.
Las IDF están haciendo todo lo que pueden para posiblitar la libertad de rito de ambas religiones y asigna numerosos efectivos para mantener la seguridad de los devotos y fortalecer la let y el orden durante los actos.»
Traducido por Carlos Sanchis