Introducción. Por principio, todo ser humano debe rechazar la intromisión con fines de control y manipulación en los asuntos personales, sociales, nacionales e internacionales. Son sus asuntos, y a la larga o a la corta, se verá afectado. Los distintos imperios que han existido a lo largo de la historia de la humanidad han sojuzgado […]
Introducción.
Por principio, todo ser humano debe rechazar la intromisión con fines de control y manipulación en los asuntos personales, sociales, nacionales e internacionales. Son sus asuntos, y a la larga o a la corta, se verá afectado.
Los distintos imperios que han existido a lo largo de la historia de la humanidad han sojuzgado y sometido a pueblos enteros mediante el empleo de la fuerza militar bruta directa.
El paso del siglo XX al XXI no ha sido una excepción en este modo de actuar imperial, como se ha demostrado en Irak, Afganistán y Libia, por citar ejemplos. Solo que ahora, a esa fuerza, se le ha agregado otra más sutil: la de los medios de información y comunicación.
Desde el pasado siglo el Imperio Mundial existente, comenzó a utilizar esa nueva forma de injerencia al utilizar dichos medios para manejar la opinión pública. Esta es objeto de una «preparación informática previa» (semejante a la artillera de la guerra), para facilitar la burda intervención.
Eso ha quedado más que demostrado por los testimonios de Bradley Manning y Julián Assange , en el caso de wikileaks; por Edgard Snowden, con los hechos de espionaje global realizados por la Agencia de Seguridad Nacional de los EEUU y ahora por la Associated Press (AP), con el Zunzuneo de la USAID.
Estas revelaciones no nos deben asombrar porque responden a una naturaleza de rapiña, que mientras exista imperialismo, en cualquiera de sus formas persistirá.
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Es por lo que se deben tener en cuenta, y a partir de estas experiencias, sacar las correspondientes enseñanzas y lecciones que se puedan derivar de ellas, con el fin de tomar acciones para neutralizar y eliminar este tipo de agresiones.
El Cable: Acciones tomadas y a tomar.
Un cable de la AP, fechado el 30 de abril de 2014 en Washington, denuncia por si solo la acción subversiva encubierta contra el gobierno cubano , mediante el proyecto-programa Zunzuneo, costeado por la Agencia Estadounidense para el Desarrollo Internacional (USAID) del gobierno yanqui.
Conocido el hecho, la USAID rápidamente se esforzó en negar y ocultar el papel del gobierno norteamericano en este proyecto, porque la Ley de Seguridad Nacional de los EEUU define como «encubiertas» las actividades del gobierno de ese país que buscan influenciar en las condiciones políticas en el exterior y en las que «el papel del gobierno de Estados Unidos no será reconocido públicamente».
Esa Ley exige que el presidente autorice la realización de esas operaciones. Es por lo que el gobierno de Obama, a través de sus personeros, ha negado la participación en ese programa por ser encubierto, político y subversivo.
Pero eso no es lo que se desprende del trabajo periodístico investigativo de la AP. Veamos.
Según el cable de marras, se confeccionó una clasificación de los usuarios de los teléfonos celulares de la Isla en «pro-revolución», «apolíticos» o » antirrevolucionarios» con el fin de crear una base de datos sobre ellos, que incluyese género, edad, «receptividad» y «tendencias políticas».
El objetivo era monitorear el estado de opinión existente, para cuando se tuviera una buena cantidad de usuarios captados, enviarles mensajes que pudieran movilizarlos masivamente contra el gobierno cubano
En el cable se señala que se redactaron 249 distintos mensajes relacionados con tecnología, deportes, noticias mundiales y otras trivialidades, y que la USAID empleó, entre otros, a un escritor de sátiras cubano para que los preparara, con un contenido abiertamente político sobre los líderes de la Revolución.
Para ver si la distribución de esos mensajes era viable fueron enviados esos textos a medio millón de números de celulares, como parte de una prueba. Algunos mensajes incluyeron preguntas y se pedía que respondiesen.
Las respuestas a esos textos fueron analizadas, recogiéndose «una muestra de 700 contestas a los mensajes emitidos, siguiendo dos criterios. El primero era el nivel de interés en los mensajes recibidos y el segundo la naturaleza política de la respuesta».
«Los cubanos que respondieron a los mensajes de texto – reconoce el cable -no sabían que el gobierno estadounidense estaba recabando información sobre ellos»
Se rindió un informe que reflejó que (y cito): «el 68% de las respuestas reflejaban leve interés en los textos. Lo que más querían saber muchos de quienes respondieron era algo que los administradores del proyecto querían mantener en secreto: ¿quiénes estaban enviando los mensajes? Indicó que 210 respuestas criticaban la anonimidad de los textos.
– «Explícate mejor porq (sic) no entiendo y recuerda q quien n (sic) le deve n (sic) le teme por lo menos dime tu nombre si no eres tan cobarde», decía uno».
«Otro, además de preguntar quién le había escrito un mensaje de texto, le pedía «no juegues con los sentimientos de los cubanos «.
«Muchos de los usuarios se dieron cuenta de que los mensajes procedían de España y respondieron usando el término «gallego», que es el gentilicio para los nacidos en la región de Galicia en España, pero que en el argot cubano significa «bruto» o «estúpido».
Según la fuente «fueron analizadas 59 respuestas por su contenido político» identificándose a las personas por el número de sus teléfonos, su nombre y su ubicación geográfica. «Se comprobó que sólo diez de ellas tenían comentarios de tono político, dos de los cuales eran antirrevolucionarias.»
El resultado de la encuesta explica de por sí el fracaso del proyecto ZunZuneo y la decisión de la Agencia de suspenderlo al darse cuenta de que no encontró eco en la población y juventud cubanas para lograr sus propósitos.
Las condiciones para la investigación periodística realizada por la AP estaban creadas, pero también para sacar de ellas las primeras lecciones y acciones a tomar. Así:
– Las respuestas dadas a la provocación zunzuneana demostraron la fortaleza folklórica- cultural del pueblo cubano y que a veces las críticas dirigidas a la juventud no son más que mera inercia, recelo y rutina generacional que debe ser superada.
– Se debe escuchar más a los jóvenes, depositar en ellos una mayor confianza, brindarles una mayor información para lograr su participación activa en vitales y necesarios debates en que debe sumergirse la nación.
– Esto es necesario para despertar el interés y el protagonismo de la juventud en hechos que generen una verdadera nueva mentalidad que contribuya a la solución de los problemas del país.
Concluye el cable de la AP con importantes comentarios que hace Julia Sweig , directora de estudios latinoamericanos del Consejo de Relaciones Exteriores, quién dijo que la creación de perfiles de los usuarios cubanos del twitter es algo «muy inapropiado». Y continuó:
-«Imagine por un momento cómo se sentiría el pueblo estadounidense si otro gobierno estuviese recabando subrepticiamente información sobre ellos a través de una red social», dijo.
Y cabe preguntarse y preguntarle a Julia, ¿cómo se deben sentir (y de hecho se sienten) los demás pueblos latinoamericanos y del mundo si otro gobierno estuviese recabando subrepticiamente información sobre ellos a través de una red social, como en definitiva lo hace el gobierno estadounidense?
En este y otros casos parecidos se le puede responder a Julia que, por lo general, únense y se solidarizan los pueblos y hombres unos con otros ante situaciones extremas y de ataques de todo tipo. Por eso:
– La «sutil» y flagrante humillación de ser monitoreados, para, a su vez, ser controlados y manejados a través de medios manipulados por una élite mundial, es una de estas agresiones que ha tenido y tiene una sólida respuesta por parte de la dignidad humana.
Mientras existan hombres, el hombre nunca estará solo. La reacción inmediata de lo ocurrido con el Zunzuneo lo confirma:
Acusaciones y demandas en los organismos internacionales correspondientes; toma de decisiones de crear redes propias, como la tomada por el gobierno de Brasil; exigencias diplomáticas de explicaciones, como la recabada por el gobierno de Costa Rica al de EEUU; la declaración de la CELAC en solidaridad con Cuba y en contra de tales prácticas, son algunos ejemplos manifiestos de lo que provocan tales acciones del poderoso de turno de este mundo.
Otras Acciones a Tomar
En un artículo anterior (1) expuse: « Es una práctica que nos acompaña ya desde hace más de un siglo. Los mambises la iniciaron. Los rebeldes, la continuaron… y prácticamente, se ha convertido, además, en una convicción, en un principio glorioso del cubano pueblo y de las tantas tradiciones heroicas que posee: si no tienes el arma, arrebátasela al enemigo. Pelea con sus propias armas. Hazlas tuyas si no tienes otra posibilidad. Es un legado histórico con el cual estamos comprometidos que ni podemos olvidar, ni mucho menos abandonar»
En el nuevo escenario originado por las llamadas nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones (TICs), no queda más remedio que apropiarnos de ellas también, so pena no solo ya de perecer en esta lucha, sino de llevar al país a la época de la barbarie.
Ah!, ¿qué el enemigo las creó, las domina y utiliza contra nosotros?; por favor, no me digan, eso no es ninguna novedad; ¡si es que siempre ha sido así y así lo ha hecho y hará mientras perviva!
Entonces lo que procede es estudiarlo en detalles, escudriñarlo; no por gusto y con toda intención utilizando sus propios medios. Solo así podremos enfrentarlo y neutralizarlo.
Sin embargo, no basta con arrebatarle las armas, hay que aprender a usarlas y más aún, saber como usarlas. Es técnicamente el llamado Know how, pero en el caso de estas nuevas técnicas, se refiere a que se debe hacer más hincapié en el uso del soft, que en el del hard. Sí es así, entonces, ¿Cómo hacerlo?
Martí, que escribió para todos los tiempos, se lo explica a los niños en su Edad de Oro (2), donde manifiesta que para hacer más instructivos los artículos y los temas que se seleccionen de la Revista «serán siempre tales que, por mucha doctrina que lleven en sí, no parezca que la llevan», añadiendo que «los artículos…irán acompañados de láminas, de verdadero mérito… para completar la materia escrita y hacer su enseñanza más fácil y duradera», consejo este más que valioso en esta época del predominio de los audiovisuales.
Más adelante, en su artículo sobre La Ilíada, vuelve a recalcar la idea, y escribe: «en la Ilíada, aunque no lo parece, hay mucha filosofía y mucha ciencia y mucha política, y se enseña a los hombres, como sin querer…»
– O sea, como el que no quiere las cosas, para defendernos, debemos los cubanos realizar nuestras producciones mediáticas y audiovisuales, con las TICs y sin ellas, haciéndolas agradables, atractivas, entretenidas, ordenadas y útiles.
Se puede. «Cortando huevos se aprende a capar», dice un refrán guajiro popular cubano
Por último, como se ha dicho y escrito:»Los principales proveedores de noticias son los departamentos de prensa de los gobiernos y de las grandes corporaciones» (3,4), cuestión esta que fue magistralmente reflejada con gran ironía creativa por G. Orwell en su monumental 1984, mostrando cómo lo hacen mediante su original «Ministerio de la Verdad».
Los países socialistas, con la URSS a la cabeza, funcionaron de la misma forma con sus departamentos de prensa, propaganda e ideológicos.
Cuba, lamentablemente, no ha sido una excepción y no ha estado exenta de estos departamentos que, como pulpo monopólico, todo lo han querido dirigir, controlar, borrar, alterar, magnificar, en fin, ocultar las informaciones que se brindan y ofrecen de tal manera que respondan a determinados intereses y no a los de la población y del país, que es como debiera haber sido y ser.
Sin embargo, Cuba que en estos momentos se revisa a si misma, con conocimiento de causa y efecto por todo lo que ha pasado, incluyendo las agresiones mediáticas imperialistas, a las que se le ha sumado el ZunZuneo, tiene todas las condiciones habidas y por haber, suficientes y necesarias, para que esos departamentos superen y mejoren sus funciones.
En las nuevas condiciones que existen y que se avecinan,
– dichas instancias, además de ofrecer informaciones, justas y verídicas que respondan a los intereses «de todos y para el bien de todos», siguiendo los postulados martianos, se deben dedicar a:
– enseñar a las nuevas generaciones a convivir, sin sometimiento alguno, con su poderoso vecino del norte que siempre ha querido poseer esta Isla,
– educar a todos los cubanos en el ejercicio de la crítica, que no es más que ejercer el criterio propio,
– instruir en el arte del debate, abierto y sin miedos, a todos los niveles de la sociedad. Esto se puede perfectamente como lo están mostrando en estos momentos las revistas Temas, del Instituto Cubano de Artes e Industrias Cinematográficas (ICAIC), con su Ültimo Jueves, y Espacio Laical, de la Archidiócesis de La Habana, las cuales periódicamente organizan encuentros-debates donde se exponen y discuten los más acuciantes problemas de la Cuba actual.
– Las cuestiones a analizar y discutir sobran. Queda por establecer una metodología general que las organice y ordene que supla las deficiencias presentes al respecto. Esto contribuirá a un nuevo despertar de la sociedad cubana.
– estar convencidos e ilustrar con ejemplos individuales y colectivos que solo con la honestidad como base, se logrará el socialismo sustentable que necesita el país.
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(1) – Ponce Seoane, Nyls G. www. La Joven Cuba. «Contra el cinismo imperial».
(2) – Martí, José. Obras Completas. T.18. págs. 297, 330. Editorial Nacional de Cuba, La Habana, 19641963.
(3) – Serrano, Pascual. » Medios felizmente intoxicados que nos intoxican» . Panorama Mundial 13/5/2014. La Habana, tomados de El DIARIO, ES, 19 de mayo de 2914, España.
(4) Chomsky Noam;