El presidente del Parlamento libanés, Nabih Berri, afirmó hoy que «todo Líbano» rechaza el borrador de resolución del Consejo de Seguridad la ONU pactado ayer por Estados Unidos y Francia. El rechazo libanés ya había sido anticipado anoche por el enviado especial libanés a la ONU, Nouhad Mahoud. Israel, en cambio, ve con buenos ojos […]
El presidente del Parlamento libanés, Nabih Berri, afirmó hoy que «todo Líbano» rechaza el borrador de resolución del Consejo de Seguridad la ONU pactado ayer por Estados Unidos y Francia. El rechazo libanés ya había sido anticipado anoche por el enviado especial libanés a la ONU, Nouhad Mahoud. Israel, en cambio, ve con buenos ojos el documento.
«Líbano, todo Líbano, rechaza cualquier conversación o cualquier borrador de resolución que no incluya el plan de siete puntos del Gobierno», declaró hoy Berri, que es además negociador de Hezbolá.
Este plan incluye un alto el fuego inmediato y una retirada total de las tropas israelíes. El documento, que luego fue adoptado por el Gobierno, lo presentó el primer ministro libanés, Fuad Siniora, en la Cumbre de Roma del pasado 26 de julio.
Prevé además, una excarcelación recíproca de prisioneros entre Israel y Hezbolá, la retirada de las tropas israelíes del sur de Líbano y que sea el Gobierno libanés, con apoyo de una fuerza internacional, quien tome el control de esta zona.
«Siempre hablamos de un alto el fuego inmediato. Nunca hablamos de poner fin a las operaciones militares porque esto es de alguna manera como legitimar la ocupación, como si se legitimara la guerra», dijo enfurecido.
OBJETIVO DE FRANCIA
Mientras, el ministro francés de Asuntos Exteriores, Philippe Douste-Blazy, afirmó hoy que su máxima prioridad es lograr el apoyo de Líbano y de los demás países árabes para el borrador. «Lo más importante para nosotros es obtener el acuerdo del Gobierno libanés y el mundo árabe», dijo a la emisora France-Info.
«Todo el mundo ha tomado nota perfectamente de las peticiones del primer ministro (libanés). Francia es muy sensible a las preocupaciones libanesas», añadió el jefe de la Diplomacia. La canciller alemana, Angel Merkel, también respaldó el borrador.
Sin embargo, Berri recalcó que el borrador está inclinado a favor de Israel. «Israel no ha ganado la guerra y aún así obtiene todo esto, ?qué habría pasado si hubieran ganado?», se preguntó. Según dijo, Líbano pedirá mañana a los ministros de Exteriores la Liga Arabe que se reúnen de manera extraordinaria en Beirut que rechacen el texto.
«Los países árabes han apoyado el plan de arreglo del conflicto en siete puntos. Les pedimos que concreten este apoyo rechazando el proyecto de resolución», dijo Berri en su rueda de prensa, destacando que el texto pactado ayer «entra en contradicción» con el proyecto libanés.
También el ministro de Exteriores sirio, Walid Moalem, que llegó hoy a Beirut, afirmó que el borrador es una «receta para que continúe la guerra».
El proyecto de resolución de la ONU ordena un «cese total de las hostilidades basado, especialmente, un cese inmediato de todos los ataques de Hezbolá y el cese inmediato de todos los operativos ofensivos de Israel».
Pide también que la actual fuerza de las Naciones Unidas en el Líbano, conocidas como UNIFIL, vigile el cese de las hostilidades. Una vez que ambas partes hayan aceptado las medidas incluidas en la resolución, el Consejo de Seguridad autorizaría que una nueva fuerza de paz multinacional se despliegue en la región.
VICTORIA PARA ISRAEL Y EEUU
El lenguaje representa una victoria para Israel y Estados Unidos, que ha insistido en que debe tener el derecho de responder si Hezbolá lanza misiles contra su territorio. Francia y otros países habían demandado un cese inmediato de las hostilidades sin ningún tipo de condiciones.
Así, la primera reacción del Gobierno israelí fue elogiar el borrador de resolución y destacar especialmente que el texto permite a sus fuerzas armadas permanecer en el sur de Líbano para impedir que Hezbolá tome posiciones en la zona, hasta que se despliegue una fuerza internacional.
Fuentes gubernamentales citadas por los medios locales expresaron su satisfacción por el texto, «demasiado bueno para ser aceptado por la otra parte», según fuentes citadas por el ‘Yediot Aharonot’ en su edición electrónica.
El diario ‘Haaretz’, por su parte, destaca que Israel ha decidido en su posición inicial de rechazar que la actual fuerza de la ONU desplegada en el sur de Líbano, UNIFIL, tenga capacidad para supervisar el alto el fuego.
En virtud del borrador, UNIFIL sería la encargada de supervisar el alto el fuego en su fase inicial, hasta que Israel y Líbano lleguen a un acuerdo de largo plazo que permita el envío de una fuerza multinacional a la región.
Así, el Gobierno israelí destacó que hasta que esa fuerza se despliegue, sus tropas podrán permanecer en el sur de Líbano. Las fuentes destacaron que esta era la demanda básica del Estado hebreo. En un principio, Israel se oponía a permitir que el alto el fuego estuvieses supervisado por UNIFIL, a quien acusa de haber cerrado los ojos en el pasado a los ataques lanzados por Hezbolá.
CONTINUARÁN LOS ATAQUES
Según este diario, para aceptar este escenario Israel ha recibido garantías de que UNIFIL será reforzada con tropas francesas de alto nivel. La fuerza está liderada actualmente por el comandante francés Alain Pelegrini e incluye 2.000 efectivos de Francia, China, Ghana, India, Irlanda, Italia, Polonia y Ucrania.
Además, el ministro israelí de Justicia, Haim Ramon, sostuvo que, aunque el borrador de resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para el fin de las hostilidades en Líbano es bueno, Israel continuará atacando a los milicianos de Hezbolá en el sur del país vecino.
En declaraciones a la radio del Ejército, Ramon consideró que el borrador de resolución es bueno para Israel, pero agregó que su país todavía tiene objetivos militares que alcanzar.
«Incluso si es aprobado, es dudoso que Hezbolá cumpla con la resolución y ponga fin a sus disparos», afirmó el ministro. «Por tanto, tenemos que continuar luchando, continuar golpeando a cualquiera que podamos golpear en Hezbolá, y yo asumo que mientras continúe, la posición de Israel, diplomática y militarmente, mejorará», agregó.