Samir Tahseen Al Nadeem murió luego de esperar 35 días un permiso para salir de Gaza y poder tratarse de sus problemas cardíacos. Tenía 26 años. Los medicamentos que necesitaba nunca llegaron, pero su ataúd sí. El Ministerio de Salud palestino ha registrado hasta ahora 375 muertes causadas por la falta de medicamentos en Gaza. […]
Samir Tahseen Al Nadeem murió luego de esperar 35 días un permiso para salir de Gaza y poder tratarse de sus problemas cardíacos. Tenía 26 años. Los medicamentos que necesitaba nunca llegaron, pero su ataúd sí.
El Ministerio de Salud palestino ha registrado hasta ahora 375 muertes causadas por la falta de medicamentos en Gaza. La mayoría de los fármacos quedan varados en los puestos de control israelíes hasta que caducan.
Pero no hay fecha de vencimiento para los cerca de 10.000 ataúdes que fueron donados a Gaza. Los féretros sí pueden ingresar a este territorio costero palestino sometido a un férreo bloqueo israelí.
A finales del mes pasado, más de 70 por ciento de los medicamentos donados a Gaza, valuados en varios millones de dólares, debieron ser desechados por haber superado su fecha de vencimiento, informó el Ministerio de Salud palestino.
«Gran parte de los fármacos donados venían de Estados árabes», dijo a IPS el director del Departamento Farmacéutico, Mounir Al-Boursh.
El funcionario indicó que las naciones árabes han entregado más de 10.300 toneladas de medicinas por un valor de 25 millones de dólares.
Sin embargo, sólo 30 por ciento de éstas podrán ser usadas, explicó. El resto expiraron o están aún en manos de los israelíes.
Tampoco es fácil desechar los medicamentos. Si se los lanza con la basura común se puede poner en riesgo la salud de la población gazatí.
La Organización Mundial de la Salud está preocupada por «la disposición insegura de las medicinas y otro material médico», dijo un portavoz de ese organismo a IPS.
Mientras, las autoridades en Gaza recibieron 10.000 ataúdes, unos 1.000 de ellos para niños y niñas, informó Al-Boursh. No obstante, eso no «cubre las necesidades».
Lo que necesita Gaza son 110 tipos de medicinas y 123 clases diferentes de equipos médicos. Se calcula que el territorio se quedará sin medicamentos en los próximos meses.
El anunciado alivio del bloqueo israelí hasta ahora no se ha traducido en un mayor ingreso de suministros médicos.
Los fármacos más necesitados son los destinados a niños y niñas, los requeridos en los departamentos de maternidad y los que tratan enfermedades como cáncer, epilepsia, hemofilia y talasemias.
«La muerte se ha vuelto una rutina», dijo una joven mujer de Jabaliya en el norte de la Franja de Gaza, mientras espera en el corredor del Hospital Infantil de Al Nasser. A su lado, los padres de Israa Tabsh, de dos años, luchan por salvar a su pequeña de un problema cardiaco congénito.
«Hemos esperado durante semanas el permiso para salir de Gaza para someterla a la cirugía cardiaca que necesita», dijo el padre, Fayez Al Tabash. El hospital Al Maqased, en Jerusalén oriental, ofrece el tratamiento adecuado, pero Tabsh no puede llegar allí.
La familia, como tantas otras, primero necesita una autorización de salida y luego garantía financiera del Ministerio de Salud en Cisjordania, gobernada por el partido secular Al Fatah. Gaza está controlada por Hamás (acrónimo árabe de Movimiento de Resistencia Islámica).
Obtener ese apoyo financiero es casi imposible para la mayoría de los pacientes. «Se necesitan conexiones», dijo una madre de 53 años que solicitó una garantía para su hijo. «Estamos atrapados entre funcionarios corruptos y la muerte».
Los pacientes en Gaza dependen del gobierno de Cisjordania para obtener permisos y medicinas.
En 2010, Gaza recibió solo 22 por ciento de los medicamentos que necesitaba de la Autoridad Nacional Palestina, indicó Al-Boursh. Los suministros disminuyen. «En 2008 habíamos recibido 50 por ciento, y en 2009, 49 por ciento».
Por otra parte, los medicamentos que llegan a tiempo no se preservan adecuadamente. En el depósito médico de Al Ghifari, en Gaza, se filtran líquidos. «Son las ratas», dijo un conserje. «Se acercan a las bolsas y causan fugas. Las ratas llegan a las medicinas, y los pacientes a los ataúdes», añadió.
Fuente: http://www.ipsnoticias.net/nota.asp?idnews=96648
rCR