Traducción para Rebelión de Loles Oliván
Los dirigentes israelíes han descartado negociar con cualquier gobierno palestino que incluya a Hamas tras un acuerdo palestino de unidad entre los rivales Hamas y Fatah.
Benjamin Netanyahu, primer ministro israelí, convocó a su gabinete de seguridad el jueves, al tiempo que el presidente israelí, Shimon Peres se refirió al acercamiento como un «grave error que impedirá el establecimiento de un Estado palestino y saboteará las posibilidades de paz y estabilidad en la región».
En una entrevista con la radio militar israelí, Avigdor Lieberman, ministro de Relaciones Exteriores de Israel, dijo que el acuerdo palestino había «cruzado una línea roja» para Israel.
Los comentarios se producen un día después de que Hamas y Fatah alcanzaran un acuerdo de unidad inicial en El Cairo para poner fin a una disputa de cuatro años que dejó a Fatah el control de Cisjordania y a Hamas el control de Gaza. Los palestinos reclaman ambos territorios para un futuro Estado independiente.
El acuerdo negociado por Egipto, que ha cogido a muchos por sorpresa, ha revivido las esperanzas de poner fin a las amargas luchas internas que han debilitado políticamente a los palestinos y que acabaron con la vida de decenas de personas en violentos enfrentamientos y debido a la represión.
El plan palestino reclama la formación de un gobierno provisional conjunto que prepare el camino para las elecciones del próximo año. Los palestinos afirman que la medida es un paso hacia la independencia.
Las perspectivas para la paz
Jaleda Yarrar, miembro del Frente Popular para la Liberación de Palestina, ha declarado a Al-Yazira que los últimos acontecimientos representan una oportunidad para los palestinos.
«Creo que es una buena oportunidad para la reconciliación, sobre todo con las revoluciones árabes a nuestro alrededor y con el movimiento de la juventud palestina que ha comenzado a presionar tanto a Fatah como a Hamas para que de verdad pongan fin a las divisiones».
«Esta vez esperamos que sea una verdadera reconciliación; funcionará debido a los cambios [en la región] y por la presión interna del pueblo palestino», afirmó.
Con la ruptura de las conversaciones de paz con Israel, los palestinos han estado haciendo campaña para que Naciones Unidas reconozca un Estado palestino en septiembre con o sin acuerdo de paz.
Peres ha declarado que temía que al final Hamas se hiciera cargo de Cisjordania tras las elecciones palestinas y que la influencia de Irán, que apoya a Hamas, se vería reforzada como resultado.
Sin embargo, Mahmud Abbas, el presidente palestino, subrayó que él mantendría el control sobre la política exterior.
Agregó que seguía dispuesto a hablar de paz con Netanyahu si Israel detiene la construcción de asentamientos en tierras ocupadas y afirmó que el gobierno provisional no incluiría a activistas de Hamas.
«Serán independientes, tecnócratas, no afiliados a ninguna facción», dijo Abbas a un grupo de empresarios israelíes y jefes de seguridad retirados.
Añadió que la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) que él dirige y a la que Hamas no pertenece, seguiría siendo responsable de la «manejar la política y las negociaciones».
«Aunque no nos guste, en acuerdo o en desacuerdo (con Hamas), son nuestra gente. Ustedes, señor Netanyahu (son) nuestros socios», dijo Abbas expresándose en inglés ante su audiencia israelí.
Con cautela
El enviado de Naciones Unidas a Oriente Próximo, Robert Serry, y la jefa de Política Exterior de la UE, Catherine Ashton, han recibido el acuerdo de unidad con cautela haciendo hincapié en la necesidad de promover la paz.
«Vamos a estudiar los detalles de este acuerdo y discutirlos con los colegas de la UE y de la región», ha dicho Ashton.
Saeb Erekat, el negociador jefe palestino, dijo que la unidad palestina promovería la paz. «Los que quieren la paz y quieren la democracia deben apoyar la reconciliación palestina», dijo.
Las rivalidades entre las dos facciones palestinas comenzaron en 2006 después de que Hamas ganase las elecciones parlamentarias en Gaza y Cisjordania. Un gobierno de unidad de corta duración se derrumbó en una guerra civil el año siguiente y Hamas tomó el poder en Gaza.
Las facciones palestinas se reunirán la próxima semana en Egipto y la ceremonia oficial de firma se llevará a cabo antes del 10 de mayo, dijo Azzam al-Ahmad, jefe de la delegación de Fatah.
Israel ha mantenido conversaciones de paz con el gobierno liderado por Fatah. Pero esas negociaciones están congeladas desde septiembre pues Abbas se niega a negociar mientras Israel expande los asentamientos en Cisjordania.
Husam Zomlot, portavoz de Fatah, Abbas ha declarado que Abbas se está embarcando en una nueva estrategia. «Pero, desde luego, no está librando una guerra contra Israel u Occidente», ha añadido.
Fuente: http://english.aljazeera.net/