Recomiendo:
0

Nada nuevo en la renuncia de Abbas y de la OLP a los derechos de los refugiados

Fuentes: Electronic Intifada

Traducción para Rebelión de Loles Oliván.

El dirigente de la Autoridad Palestina respaldado por Israel y Estados Unidos y presidente nominal de la OLP, Mahmud Abbas ha causado la semana pasada una nueva consternación entre los palestinos por su renuncia ante la TV israelí al derecho de los refugiados palestinos a regresar a sus hogares de los que fueron limpiados étnicamente por bandas sionistas durante y después de 1948, y por su redefinición de Palestina, que incluye únicamente Cisjordania y la Franja de Gaza.

En «aclaración» al canal de televisión egipcio Al-Hayyat, Abbas recurrió a su habitual táctica de culpar a los medios de comunicación por haber distorsionado de alguna manera las palabras que todo el mundo pudo oír saliendo de su boca , y mantuvo que sus palabras habían sido malinterpretadas y que únicamente hablaba a título personal y no en representación política.

Per miente. Las palabras de Abbas representan la posición política mantenida desde hace tiempo de renuncia a los derechos de los refugiados.

 

Abbas «aclara»

De Haaretz:

En una entrevista considerada como conciliadora con Israel, el presidente palestino había dicho que aunque él es refugiado de Safed, no tiene intención de volver a la ciudad en tanto que residente; en todo caso, la visitaría como turista.

«Para mí, Palestina es las fronteras de 1967 con Jerusalén Oriental como capital, eso es Palestina; yo soy refugiado, vivo en Ramala, y Cisjordania y Gaza es Palestina, todo lo demás es Israel».

Pero en una entrevista sobre el tema con el canal de comunicación egipcio Al-Hayyat realizada el sábado, Abbas subrayó que esas declaraciones reflejan su opinión personal y no deben ser tomadas políticamente:
«Lo que dije sobre Safed es mi postura personal. No tiene nada que ver con renunciar al derecho al retorno», afirmó. «Nadie renunciaría a su derecho al retorno. Pero todas esas fórmulas internacionales, en especial la de [la Resolución de la ONU] 194, hablan de una solución justa y acordada a la cuestión de los refugiados, y ‘acordada’ significa por parte de Israel».

(Otra nota sobre la «aclaración» de Abbas puede verse en la Agencia de Noticias Kuwaití ).

Un esfuerzo decidido para renunciar a los derechos de los refugiados

Es cierto que el lugar y la forma en que Abbas hizo estas declaraciones era particularmente desagradable pero es importante saber que no hay nada nuevo en su decidido esfuerzo por liquidar los derechos de los palestinos refugiados.

Esta «dirección» palestina ha intentado entregar estos derechos a Israel durante años. Una de las revelaciones importantes de los Papeles de Palestina -el registro del proceso de paz de la Autoridad Palestina y de la OLP publicado a principios de 2011- es que, en esencia, los «negociadores» de Abbas ya habían renunciado al derecho al retorno en las negociaciones con Israel patrocinadas por Estados Unidos. Como informaba Laila al- Arian, de Al-Yasira:

Los Papeles de Palestina demuestran que los negociadores de la Autoridad Palestina (AP) estaban dispuestos a hacer concesiones importantes sobre el derecho al retorno de los refugiados: sobre la cantidad a la que potencialmente se permitiría volver a sus hogares en lo que hoy es Israel, sobre si los refugiados podrían votar cualquier acuerdo de paz, y sobre cuántos podrían establecerse en un futuro Estado palestino.

En un correo electrónico Ziyad Clot, asesor legal de los negociadores palestinos para el dossier de los refugiados, escribe: «El presidente [Mahmud] Abbas ofreció una propuesta extremadamente baja para el número de retornados a Israel sólo unas semanas después del inicio del proceso».

Los Papeles revelan asimismo que el entonces primer ministro israelí, Ehud Olmert propuso que se permitiera el retorno a Israel a 1.000 refugiados palestinos anualmente durante un período de cinco años; un total de sólo 5.000, una fracción minúscula de los desplazados tras la creación de Israel.

El 15 de enero de 2010, [el negociador palestino Saeb] Erekat comunicó al diplomático estadounidense David Hale que los palestinos ofrecieron a Israel el regreso de «un número simbólico» de refugiados.

Según los documentos, los funcionarios palestinos no solo ofrecieron una cifra baja de retornados: el jefe negociador de la OLP, Saeb Erekat, dijo que los refugiados no tendrían derecho de voto en un posible acuerdo de paz con Israel.

Colusión constante contra derechos de los refugiados

Lo que revelaron los Papeles de Palestina concordaba con las posiciones de Abbas que se habían revelado anteriormente. En un documento de posición de diciembre 2009 escrito por Erekat y distribuido a diplomáticos, Erekat resumió la posición de los refugiados. Véase mi informe al respecto de marzo de 2010:

Abbas había ofrecido (e Israel había rechazado) que únicamente 15.000 refugiados regresaran anualmente a las tierras de las que fueron limpiados étnicamente en lo que hoy es Israel y durante un período de diez años. Ello cancela efectivamente el derecho al retorno y actúa como un reconocimiento de facto del «derecho de Israel a existir como Estado judío» al reconocer que su exclusión racista de los palestinos no judíos triunfa sobre el derecho humano de los refugiados a volver a casa.

Por otra parte, el papel de Erekat no hace mención alguna al «derecho al retorno» -una exigencia de consenso mesdular para los palestinos en el interior del país y en la diáspora- sino que se refiere vagamente a una solución «justa y acordada de conformidad con la [Resolución de la Asamblea General de Naciones Unidas] 194». No reclama la aplicación de la resolución -que exige que cualquier refugiado que así lo desee pueda regresar al hogar «lo antes posible». Huelga mencionar que aquello que Israel considera «justo» y con lo que estaría de acuerdo entra totalmente en colisión con los derechos palestinos y con el Derecho Internacional. De hecho, Olmert había ofrecido el retorno de 1.000 refugiados al año durante cinco años -o alrededor de una décima parte del uno por ciento de todos los refugiados.

Se inició con Arafat

También es importante tener en cuenta que la disposición de la OLP a abandonar los derechos de los refugiados no arranca con Abbas. En un artículo de opinión en The New York Times de 3 de febrero de 2002, el entonces líder de la OLP, Yasser Arafat, escribió:

Además, buscamos una solución justa y equitativa al problema de los refugiados palestinos a los que durante 54 años no se les ha permitido regresar a sus hogares. Entendemos las preocupaciones demográficas de Israel y entendemos que el derecho al retorno de los refugiados palestinos, un derecho garantizado por la legislación internacional y por la Resolución 194 de las Naciones Unidas, debe aplicarse de una manera que tenga en cuenta estas preocupaciones.

Las «preocupaciones demográficas» se refieren, por supuesto, al velado código racista de Israel por no querer que demasiados no-judíos mancillen la anhelada pureza etno-religiosa del «Estado judío».

En otras palabras, Arafat señaló su aquiescencia con la posición racista sionista de que a los palestinos nacidos en Palestina y violentamente expulsados ​​ por los sionistas simplemente por no ser judíos, se les debe impedir el regreso también simplemente porque no son judíos.

En la práctica, Arafat estaba dispuesto a subordinar los derechos humanos fundamentales de los palestinos al crudo racismo de Israel en nombre de la «paz».

¿Una nueva interpretación de la [Resolución] 194?

Lo que reveló la entrevista a Abbas en la televisión israelí fue una nueva interpretación de los derechos de los refugiados palestinos que subraya su determinación de liquidarlos a toda costa. Miremos de nuevo la «aclaración» de Abbas:

Lo que dije sobre Safed es mi postura personal. No tiene nada que ver con renunciar al derecho al retorno», afirmó. «Nadie renunciaría a su derecho al retorno. Pero todas esas fórmulas internacionales, en especial la de [la Resolución de la ONU] 194, hablan de una solución justa y acordada a la cuestión de los refugiados, y ‘acordada’ significa por parte de Israel.

La Resolución 194 de la ONU no condiciona los derechos de los refugiados palestinos -o cualquier derecho humano básico palestino- a que Israel esté de acuerdo en concedérselos. Los derechos humanos palestinos existen independientemente de que un régimen racista de asentamiento colonial esté o no de acuerdo con ellos.

Y en ningún caso en la historia moderna han estado los derechos de los refugiados condicionados por la voluntad de un régimen para que se acepten. En la antigua Yugoslavia, para dar un ejemplo actual, el derecho de los cientos de miles de refugiados a regresar a sus hogares -ahora en áreas donde predominan regímenes dominados por un grupo étnico diferente al de los refugiados que regresan- se ha aplicado y practicado con pleno apoyo internacional, independientemente de si el régimen local preferiría o no mantener una realidad demográfica etno-racial diferente.

En su intento de «aclarar», Abbas, al parecer, no ha hecho más que confirmar su implacable hostilidad hacia los refugiados palestinos y a sus derechos.

Fuente: http://electronicintifada.net/blogs/ali-abunimah/theres-nothing-new-mahmoud-abbas-and-plos-renunciation-palestinian-refugee-rights?utm_source=EI+readers&utm_campaign=10e573c2c8-RSS_EMAIL_CAMPAIGN&utm_medium=email