El palestino Suhail el-Amoudi observa de pie, desde un muelle de Gaza, cómo los vetustos barcos de pesca se inclinan peligrosamente ante las olas desatadas por una torrencial tormenta invernal en el mar Mediterráneo. Pero a El-Amoudi, un pescador con 30 años de oficio, no le preocupan las olas, el viento ni la pesada lluvia […]
El palestino Suhail el-Amoudi observa de pie, desde un muelle de Gaza, cómo los vetustos barcos de pesca se inclinan peligrosamente ante las olas desatadas por una torrencial tormenta invernal en el mar Mediterráneo.
Pero a El-Amoudi, un pescador con 30 años de oficio, no le preocupan las olas, el viento ni la pesada lluvia que cae sobre él, sino los buques israelíes que distingue con claridad en el horizonte, a pesar de la tormenta.
El-Amoudi ha presenciado muchos cambios a lo largo de su vida en Gaza, pero un factor es constante. «Los israelíes son la clave. Siempre se siente su presencia», señaló.
Israel endureció su hostigamiento contra los pescadores de Gaza con la segunda intifada (insurrección palestina contra la ocupación), iniciada en septiembre de 2000.
Las relaciones entre las Fuerzas de Defensa de Israel y los pescadores nunca fueron buenas, «pero tampoco tan malas» como ahora, explicó a IPS.
Por ello, casi nadie sale a pescar desde el puerto y los mercados carecen totalmente de pescado.
El puerto de Gaza es ahora un museo de esquifes de pesca en ruinas, cuyo costo de reparación supera ampliamente los recursos de sus propietarios.
«Necesito 20.000 dólares para reparar mi barco», apuntó El-Amoudi. El pescador sacó dos monedas de 50 centavos y dijo, con una sonrisa irónica, «esto no alcanza». El conflicto lo condenó a la pobreza.
Hay 433 barcos en el puerto de Gaza, pero apenas un puñado de ellos están en condiciones de navegar. De todos modos, Israel no autoriza la pesca en las aguas de la zona.
Al menos durante 40 por ciento de las jornadas transcurridas desde octubre de 2003, Israel impuso la prohibición total de pescar en aguas de Gaza, según la Oficina de Coordinación de los Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA).
Desde junio, la prohibición ha sido total.
La captura de pescado cayó de 823 toneladas mensuales en junio de 2000 a apenas 50 a fines de 2006.
La cantidad de pescadores registrados también decayó, de 5.000 en los años 80 a menos de 3.000 en la actualidad, según la ONU (Organización de las Naciones Unidas).
Al menos 35.000 personas obtienen su ingreso en torno del sector pesquero, en un contexto de pobreza, que según la ONU alcanza a 80 por ciento de la población de esta ciudad.
En 2000, la Oficina Central de Estadísticas palestina evaluó la producción del sector en 10 millones de dólares anuales. Pero hoy es una sombra de lo que era entonces.
El Departamento de Pesquerías de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) pronosticó que el sector se habrá venido abajo para fines de este año si no hay un cambio drástico en la política de Israel hacia los pescadores de Gaza.
Las agencias de la ONU presentes en la zona reafirmaron la funesta previsión hecha por la ANP en un informe publicado a fines de 2006.
Un informe de Procedimiento de Apelación Global (CAP) de la OCHA sostiene que si siguen «los factores desencadenantes» de la crisis, «la inseguridad alimentaria alcanzará proporciones agudas con un impacto adverso sobre los sectores más vulnerables» de la población.
El CAP es un instrumento creado para que la comunidad internacional proteja y asista a poblaciones que padecen situaciones extremas en el menor tiempo posible.
La escasez motivó un aumento exponencial de los precios del pescado, que ahora se ubican muy por encima de las posibilidades de los 1,5 millones de habitantes de Gaza.
El Programa Mundial de Alimentos (PMA), que atiende a alrededor de 25.000 indigentes, denunció la grave situación de desnutrición que vive la población por falta de pescado y otras proteínas animales en su dieta.
El pescado aportaba al menos un tercio de la proteína ingerida por la mayoría de los refugiados de Gaza, según el PMA.
El Banco Mundial afirmó que el derrumbe de la economía palestina es «uno de los peores de la historia contemporánea», en un informe general aprobado por el PMA y el gobierno israelí en los meses anteriores a la retirada de los colonos de esta zona en 2005.
Esta institución multilateral de crédito atribuyó la crisis económica al severo régimen de control ejercido por Israel.
De acuerdo con los términos del documento del Banco Mundial, Israel violaría el artículo 52 de la Cuarta Convención de Ginebra, de 1949, referida a la protección de la población civil en tiempos de guerra, de la que ese país es signatario.
El artículo 52 ordena: «Ningún contrato, acuerdo o reglamento podrá atentar contra el derecho de cada trabajador, sea o no voluntario, dondequiera que esté, a dirigirse a los representantes de la Potencia protectora para solicitar su intervención.»
«Se prohíbe toda medida que tienda a provocar desempleo o a restringir las posibilidades laborales de los trabajadores de un país ocupado con miras a inducirlos a trabajar para la Potencia ocupante», agrega.
Desde fines de junio, cuando un soldado israelí fue secuestrado por insurgentes palestinos en la frontera de Gaza, ese país impuso una prohibición total de pesca.
El ejército israelí afirmó que la prohibición fue dispuesta para evitar que combatientes palestinos trasladaran al soldado hacia Egipto, por mar.
Un estudio somero de los barcos inutilizados y acribillados a balazos encallados en el puerto de Gaza deja en evidencia que muchos pescadores desafiaron la prohibición y pagaron un alto precio por eso.
«¿Qué otra cosa podemos hacer?», preguntó El-Amoudi, mientras sopesaba el hambre de su familia respecto del peligro que representa pescar en la diminuta franja costera de Gaza.
El Centro de Derechos Humanos de Gaza controla la situación y sus informes semanales incluyen invariablemente ataques de las fuerzas israelíes a los pescadores.
Los pescadores palestinos son permanentemente detenidos y baleados por la armada israelí.
El año pasado, cuatro de ellos fueron asesinados y una docena arrestados.
Entre el 11 de enero y el 17, al menos unos 14 más fueron detenidos cuando se encontraban claramente en áreas jurisdiccionales de pesca de la ANP.
Tres de esos 14 pescadores permanecen detenidos y no se sabe sobre ellos nada desde entonces, según ese Centro palestino.
Los acuerdos de paz firmados por Israel y la Organización para la Liberación de Palestina en Washington en agosto de 1993 establecen que a los pescadores palestinos les corresponden 20 millas náuticas desde la costa de Gaza.
Pero El-Amoudi aseguró que nunca se les respetó ese derecho. «Una vez que te alejas del muelle estás en aguas judías. No hacen ninguna diferencia», sostuvo.
***** + Oficina de Coordinación de los Asuntos Humanitarios de la ONU, en inglés (http://ochaonline.un.org/) + Cuarta Convención de Ginebra, (http://www.icrc.org/Web/spa/sitespa0.nsf/iwpList103/ AB1C1C7C1F0BA414C1256DE10053D111) +PALESTINA: EEUU, chispa que enciende llamarada (http://ipsnoticias.net/nota.asp?idnews=40026)