Los recientes acontecimientos en Palestina no se pueden explicar sin tener en cuenta la política de ocupación israelí y el consentimiento o indiferencia de los gobiernos occidentales. El drama de los enfrentamientos interpalestinos provienen de los efectos de una implacable ocupación que somete y castiga a la población palestina. El embargo decretado por el Cuarteto […]
Los recientes acontecimientos en Palestina no se pueden explicar sin tener en cuenta la política de ocupación israelí y el consentimiento o indiferencia de los gobiernos occidentales. El drama de los enfrentamientos interpalestinos provienen de los efectos de una implacable ocupación que somete y castiga a la población palestina. El embargo decretado por el Cuarteto ha castigado a las victimas y apoya al agresor israelí obviando en todo momento la legalidad internacional.
Desde las diferentes intervenciones efectuadas a lo largo del Curso se ha llegado a la conclusión de que se debe considerar el fin de la ocupación como el elemento central para vislumbrar un camino hacia una paz justa en la zona. Todos los Planes, Hojas de Ruta, Conferencias, etc. que no partan de este principio y que no traten de revertir la situación aplicando el derecho internacional, estarán abocados al fracaso.
La ocupación forma parte de una estrategia israelí muy planificada y presenta diferentes formas y maneras: anexión de territorios, expulsión de millones de refugiados palestinos, encerrar a la población en auténticos ghettos que hacen inviable un estado propio, la apropiación de recursos naturales como el agua, etc. Esta situación se ha agravado tras la Conferencia de Madrid y los Acuerdos de Oslo celebrados bajo la tutela internacional. Se han creado nuevas colonias en Cisjordania, se acelera la judaización de Jerusalén, se ha realizado la construcción de un Muro que alcanzará 850 Km y consumado el aislamiento o encierro de más de 1’5 millones de palestinos en la cárcel de Gaza, sin que estos hechos consumados hayan sido criticados ni sancionados internacionalmente.
Tomando como base el derecho internacional del que Israel no puede permanecer al margen, en este curso impartido entre el 16 y 20 de julio y organizado por asociaciones de la Red Solidaria contra la Ocupación de Palestina[1], se han llegado a las siguientes conclusiones:
– La necesidad de trabajar en actividades de sensibilización e información destacando que es la ocupación la que determina la imposibilidad de que pueda existir una paz justa en la zona y convivencia entre sus habitantes.
– La imperiosa obligación moral de evitar más sufrimiento. Para ello hay que movilizar a la opinión pública para que los gobiernos revisen su postura lamentablemente acomodada a la política colonial y de apartheid que impone Israel.
– Que el Derecho Internacional y los medios de comunicación pueden ser instrumentos que faciliten el cambio de voluntad política que traspase las palabras equidistantes o cómplices de nuestros gobiernos a las acciones de presión a Israel hasta que se logre el cumplimiento de la Legalidad Internacional. Entre las medidas que se han citado están:
Suspensión del Acuerdo de Asociación entre Israel y la Unión Europea
No realizar intercambios militares con Israel
No financiar infraestructuras asociadas al Muro y a la política del Apartheid.
[1] Asociación Hispano Palestina Jerusalén, Asociación Paz con Dignidad,
Comité de Solidaridad con la Causa Árabe y Sodepaz