Recomiendo:
0

El comercio exterior

Pesca en aguas revueltas

Fuentes: Bohemia

Con presiones financieras agravadas por la crisis mundial, y las permanentes trampas del bloqueo norteamericano, Cuba ha apostado a multiplicar exportaciones y a ahorrar a cuenta de la sustitución de importaciones. De acuerdo con un cuestionario presentado a protagonistas directos de ambas políticas, el capital humano es la principal fortaleza del país para alcanzar tales […]

Con presiones financieras agravadas por la crisis mundial, y las permanentes trampas del bloqueo norteamericano, Cuba ha apostado a multiplicar exportaciones y a ahorrar a cuenta de la sustitución de importaciones. De acuerdo con un cuestionario presentado a protagonistas directos de ambas políticas, el capital humano es la principal fortaleza del país para alcanzar tales propósitos, pero las producciones insulares carecen de la competitividad necesaria para abrirse espacio en mercados externos o para rivalizar con la competencia extranjera, incluso dentro de la Isla. Tres economistas perciben obstáculos en la baja productividad y en los desequilibrios del sistema financiero cubano

Dos obreros portuarios supervisan la descarga de un contenedor

¿Cómo pescar un dólar en las aguas revueltas de la crisis económica mundial? Ante la aguda contracción de la actividad crediticia y del comercio internacional, las empresas combinan fórmulas antiquísimas con algún expediente moderno: tienden trampas con los precios, corren a Singapur o Beijing en busca de compradores solventes, elucubran nuevos servicios de postventa, reorientan hacia Internet las campañas de publicidad y dejan a los periódicos colgados de la brocha, recurren a fusiones para monopolizar mercados, bombardean a los consumidores con encuestas, ofrecen dádivas a los clientes fieles, aderezan la carnada en venta, despliegan todas las artes del marketing…

En esos mares encrespados y muy competitivos, las firmas cubanas tratan de lanzar su anzuelo, espoleadas por las urgencias del momento y la política económica. El Gobierno ha reclamado mayor prioridad este año para producciones y servicios destinados a la exportación o a la sustitución de importaciones. Apura equilibrar las cuentas en divisas de la nación, desangradas por la crisis, el bloqueo estadounidense y la vieja propensión del país a gastar más que lo que ingresa.

Pocas entidades, sin embargo, logran el éxito, a pesar de las novedades que asoman, junto con la oferta tradicional, en la carta de exportaciones del país. Los obstáculos son empinados y acechan no solo en el extranjero, según reveló una encuesta periodística de BOHEMIA entre dirigentes de 35 firmas vinculadas con el comercio exterior.

Seleccionados al azar entre los expositores de la pasada Feria Internacional de La Habana, estos empresarios indicaron tanto fortalezas como dificultades cuando intentan desarrollar exportaciones; e hicieron similar análisis ante el propósito de sustituir importaciones. Las experiencias de los entrevistados no siempre coinciden. Pero los puntos más reiterados indican aquellos factores de consenso a la hora de entender qué frena y qué favorece a la economía cubana frente al mundo.

Agresiva pelea comercial

Un camión rastra cargado de sacos de viandas en un terreno agrícolaPara conquistar mercados latinoamericanos, europeos o asiáticos, Caribex pesca langostas, Labiofam caza mosquitos; Cubaexport combina café, miel, semen bovino y animales vivos; el Grupo Empresarial Frutícola prueba con pulpas de mango y guayaba, Heberbiotec apuesta a la ingeniería genética, FarmaCuba receta hemoderivados y antibióticos, la Unión de Bebidas y Refrescos descorcha los rones Arecha y Legendario para seguirle los pasos a Havana Club, y Combiomed estudia con el monitor de parámetros fisiológicos Doctus VI el exclusivo mercado de la tecnología electrónica médica.

El abanico de ofertas de la Isla se ha transformado en los últimos años. Los fármacos y equipos médicos han saltado al segundo escalón de los bienes que más ingresos reportan al país, detrás del níquel y por delante de productos tradicionales como los habanos, el azúcar, los rones y la pesca.

Sin embargo, continúan escaseando los rubros que logran un espacio firme fuera del mercado insular. «No todos nuestros productos tienen condiciones para ser exportados, ni todas las empresas están preparadas para hacerlo», dice el director comercial de Geocuba, Víctor Alvija Urgell.

Al analizar los factores desfavorables para la actividad exportadora, el más señalado por los encuestados fue el déficit de calidad de los productos cubanos, ante un mercado externo de elevada, casi agresiva, competitividad.

El director comercial de la Empresa de Pinturas Vitral, Rafael Durán, reconoce que sus productos carecen de calidad para enfrentar en el área la fuerte competencia de Estados Unidos y México. «Es un mercado muy cerrado y competitivo», estima. Por el contrario, el director del Grupo Empresarial Frutícola comenta que sus pulpas y jugos de cítricos y mango tienen calidad certificada, pero no puede en la brega comercial regional ante los mayores productores de cítricos en América: Brasil, Estados Unidos, Costa Rica y México.Pelotero cubano bateando

Con esa valla tropiezan incluso fabricantes con bien ganada fama entre los consumidores del patio. «En mis productos -dice la representante de Suchel Import Export, Isabel Cristina Valdespino- hay una altísima competencia en el exterior y tenemos dificultades porque no son renglones tradicionales de nuestro país.»

El prestigio internacional lo acapara un grupo reducido de productos cubanos, se lamentan muchos entrevistados, pero no siempre de brazos cruzados. Suchel ha acudido a la estratagema de emplear la imagen Cuba para intentar penetrar mercados externos con perfumes y cosméticos que no constituyen un renglón distintivo de la Isla. Así, ha incorporado marcas como Montecristo, con siglos de tradición a cuenta de los habanos.
Las grietas del embalaje y el envase, séptimo problema más mencionado por los entrevistados, agravan el déficit de calidad ante los mercados externos. «En Cuba no existe cultura del embalaje», señala el director comercial de la Empresa de Equipos Médicos de Ciudad de La Habana (ICEM), Guillermo Almeida.

Lo acredita también la Empresa Comercializadora Agropecuaria (Comagro). «Tuvimos dificultades con los envases y el etiquetado de producción nacional, que generalmente eran más caros y de menor calidad que los importados. Ahora adquirimos una máquina de envasado y estampado, que lo hace con calidad, es muy productiva y nos ahorra las etiquetas», cuenta la directora de Comagro, Ana Luisa Pérez Rodríguez.

Reservas dormidas y capital humano

Trabajadoras de la industria farmacéutica colocan el producto de sus envases El deterioro del equipamiento industrial y la tecnología obsoleta es otro obstáculo que influye en la pobre calidad y productividad, y frustra, por tanto, intenciones exportadoras. Ocupa el octavo lugar entre las trabas detectadas por el sondeo, que ubica asimismo entre los seis primeros a los limitados volúmenes de producción.

«Los bajos niveles productivos no alcanzan para cubrir la demanda interna y a la vez garantizar oferta para la exportación», argumenta Damián González, director general de Gema, empresa productora y comercializadora del Ministerio de la Industria Azucarera (Minaz). Esto hace que muchas empresas no se vean apuradas por buscar clientes en otros países «porque tenemos una demanda bien definida en el mercado interno en divisas, que no alcanzamos a satisfacer», confirma el director de negocios de la Industria Láctea (UNILAC), Jorge Luis Leal Cordero.

A pesar de esos lastres, varios entrevistados concuerdan en que el país posee capacidades productivas subutilizadas, que con un pequeño nivel de inversión podrían extenderse y diversificarse. En dicha reserva, la directora general de Metalcuba, Lissette Pardo, percibe una virtud de la economía, de cara a los propósitos de ampliar la presencia en otros mercados. La encuesta ubica ese potencial entre los siete factores favorables más mencionados.

Sin embargo, la ejecutiva de esa firma comercializadora coincide con un número mayor de directivos de empresas cuando alaba el capital humano del país. La preparación del personal técnico e intelectual es, de hecho, la fortaleza más citada por los entrevistados. «Ese factor le otorga a Cuba una ventaja competitiva sobre el área, para desarrollar producciones y servicios, y exportarlos», opina Pardo.

Mecánico ajustando una pieza
 Lo ratifican otros expertos desde experiencias sectoriales muy diversas, incluida unas de las áreas de la economía que, junto con el turismo, ha exhibido mayor desarrollo desde los años 90, la industria médico-farmacéutica.

En el prestigio internacional que han ganado los técnicos cubanos por esa causa, tiene también Labiofam una carta de triunfo, afirma Yisel González Marrero, directora de esa firma productora de bioplaguicidas y medicamentos veterinarios, que para compensar la limitada capacidad industrial de la nación ha instalado plantas industriales, de propiedad mixta, en Argentina y China; en Vietnam posee una ciento por ciento cubana.

La segunda fortaleza más comentada por los entrevistados se resume en voluntad política. El programa gubernamental de desarrollo de las exportaciones los empresarios lo perciben en acciones concretas de sus organismos y en apoyos de la Cámara de Comercio y del Centro de Promoción del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera de Cuba (CEPEC). Los ministerios chequean sistemáticamente los planes de exportación y de sustitución de importaciones, y priorizan los escasos recursos disponibles en función de los mismos, ante la comprensión de que el dinero no caerá del cielo como lluvia milagrosa de café.

En frecuencia con este criterio, numerosos interrogados consideran las urgencias de capital de Cuba, agravadas por la actual crisis económica mundial, como un elemento favorable, en tanto factor objetivo que obliga a desperezarse a la industria y la agricultura nacionales, para desatar fuerzas y reservas dormidas.

El director general de la Unión de Bebidas y Refrescos, Gerardo Rodríguez, salió de la pasada Feria Internacional de La Habana con el ron Arecha premiado y con la declaración a BOHEMIA de que la economía «está tomando un nivel de organización que aprecio en el respeto a los presupuestos y en el apoyo al proceso de exportaciones».

«Desde ese punto de vista, la crisis nos ha beneficiado», dijo Gerardo, sin dejar por eso de advertir un obstáculo en las limitaciones financieras causadas por la recesión económica global. Constituyen, de hecho, uno de los cuatro factores más nocivos para el comercio exterior de acuerdo con las respuestas.

La Unión de Bebidas y Refrescos es una de las tantas empresas que ha visto mutiladas posibles ventas en el exterior, debido a las dificultades para costear producciones o invertir en un mundo donde la competitividad depende de un desarrollo tecnológico veloz.

Conflicto en las entrañas del sistema

Obrero de la industria del petróleo revisa un equipoLa sociedad cubana acuna un conflicto en sus entrañas. Su organización y estructuras le ofrecen una oportunidad especial para definir prioridades económicas e integrar fuerzas de organismos y empresas en función de las mismas. Aunque tienden a ver en esta característica una fortaleza para las exportaciones, los propios entrevistados señalan una debilidad en el exceso de centralización y en la carga burocrática de trámites y regulaciones para salir a mercados externos.

Así lo valora Susana García Pérez, directora de negocios del Centro Internacional de La Habana, entidad especializada en la venta de servicios como consultorías. «El exceso de documentación en el ambiente regulatorio cubano demora los procesos para tomar decisiones y autorizar una exportación. La consecuencia puede ser oportunidades de negocio perdidas.»

Como prueba, el Grupo Empresarial de la Construcción (Geca) lamenta haber visto esfumarse una alternativa para exportar áridos debido, entre otros factores, a la rigidez del mecanismo del objeto social que regula la actividad de cada empresa, según explica la directora general de esa firma, Lourdes Castellanos.

En línea con lo anterior, abundan pifias en la planificación que castran las posibilidades de cooperación entre las empresas y que los encuestados colocan en el segundo lugar de los factores retardatarios de las exportaciones.

La directora general de Metalcuba, Lissette Pardo, y el director comercial de ICEM, Guillermo Almeida, observan fallas entre los eslabones de las cadenas de producción, desde el suministro de materias primas hasta la comercialización, pasando por la producción y el embalaje. Por falta de previsión, por ejemplo, la agricultura no dispuso de los envases necesarios para conservar y aprovechar la abundante cosecha de tomate del actual año.

Las manos de una mujer colocan el sello a un tabaco cubano marca Cohiba«Hay muchos niveles de aprobación interna que ponen en riesgo una decisión. Sumado a la mala planificación, se convierte en un serio obstáculo para producir y exportar», opina Pardo.

La dificultad se agrava por la débil preparación de las empresas sobre los mercados externos, recursos exploratorios de los mismos, y los mecanismos insulares de comercio exterior. El sondeo periodístico muestra dicho desconocimiento como el tercer mayor obstáculo.

A los enredos domésticos, se agregan las barreras exteriores. El bloqueo económico de Estados Unidos le ha pasmado las intenciones exportadoras a más de una firma encuestada. Dujo Copo Flex perdió «la posibilidad de poner en Bahamas nuestros colchones Konfort porque los rubios del Norte nos lo impidieron», afirma el director general de esa firma mixta, Lázaro Llera.

Los europeos, en tanto, se especializan en levantar barreras arancelarias y de otro tipo que tornan más embarazoso colocar productos cubanos en ese mercado, aun cuando alcancen parámetros de costos y calidad competitivos, comenta Sergio López, director de Combiomed, la firma comercial del Instituto Cubano de Investigaciones Digitales (ICID), productora de equipos médicos.

Como contrapeso, los encuestados señalan las ventajas que ofrece la integración regional. Las posibilidades de un intercambio estable y justo en el marco del ALBA, y el comercio mediante convenios gubernamentales con otros países, como China y Brasil, posibilitan el acceso a mercados más seguros. Es el cuarto factor más destacado, detrás de la presencia en la oferta cubana de productos nuevos y de calidad que se abren paso gradualmente, diversifican y oxigenan las alternativas de venta que debe garantizar Cuba, antes de comprarle algo al resto del mundo.

Fotos:

1- Randy Rodríguez Pagués,

2  La posibilidad de ampliar el rendimiento agrícola es una fortaleza de Cuba, tanto para sustituir importaciones como para aumentar la exportación en un mundo donde los precios de los alimentos siguen muy altos (FOTO:Randy Rodríguez Pagués)

3. Los bates de béisbol, importados hoy a más de cien dólares cada uno,  comenzarán a producirse en el país
a un costo de 29 CUC la unidad,  asegura la Productora y  Comercializadora de Artículos Deportivos (FOTO: RAFAEL
TORRES ESCOBAR)

4. En relativamente poco tiempo, la industria médico- farmacéutica y biotecnológica ha alcanzado uno de los primeros puestos en la exportación (FOTO: RANDY RODRÍGUEZ PAGÉS)

5. La experiencia, el conocimiento técnico y el espíritu innovador de  la fuerza laboral es el factor favorable más reconocido para sustituir importaciones y exportar más y mejor  (FOTO: RANDY RODRÍGUEZ PAGÉS)

6. Pese al bloqueo y aun en medio de la crisis internacional, el país defiende su desarrollo con inversiones como las
del sector petrolero (FOTO: GILBERTO RABASSA)

7. Tabaco, icono de los productos exportables cubanos, a los que urge seguir sumando otros no tradicionales para
aumentar los ingresos en moneda libremente convertible (FOTO: GILBERTO RABASSA)

Fuente:http://www.bohemia.cu/2009/11/28/encuba/encuba-exportaciones.html