Traducido del inglés para Rebelión por Sinfo Fernández.
Los combatientes rebeldes de Alepo llevan adheridos cinturones explosivos y están dispuestos a luchar si las fuerzas progubernamentales les detienen al salir del este de Alepo, según el último periodista que aún permanece en el bastión rebelde.
El video descargado ayer martes por Bilal Abdul Karim, un periodista estadounidense que lleva semanas atrapado en el este de Alepo, mostraba a un combatiente enmascarado con un fusil Kalashnikov y lo que parecía ser un cinturón explosivo bajo la chaqueta.
Karim dijo que los combatientes estaban preparándose para dejar Alepo tras la evacuación ya efectuada de alrededor de 25.000 personas de la zona este de la mayor ciudad siria anteriormente bajo control rebelde.
«Esto es un cinturón explosivo. Y lo llevan puesto muchos de los combatientes porque sienten que no pueden confiar en que el régimen mantenga su palabra de que dispondrán de un corredor seguro para marcharse», dijo Karim. «Si les paran, están preparados para luchar».
Por las imágenes no quedaba clara la afiliación del combatiente ni si el cinturón contenía realmente explosivos.
Karim contó a MEE que había representantes de unos 22 grupos combatientes atrapados aún en el este de Alepo. Que había una fila de coches de un kilómetro de largo con los combatientes y sus familias.
La mayor parte de los civiles han sido ya evacuados, aunque algunos residentes heridos y un grupo de doctores y enfermeras siguen allí.
«Se suponía que, según el acuerdo con la otra parte, tenían que haber salido todos esta mañana», dijo Karim.
«Sin embargo, ven que las fuerzas del gobierno sirio y sus aliados quieren volver a negociar su salida y esto les llena de frustración.»
Al preguntarle si pretendían provocar a las fuerzas progubernamentales, Karim dijo que los combatientes rebeldes tenía «mucha experiencia en cómo funcionan los acuerdos con el régimen y, sencillamente, no confiaban en él».
«Creen que es muy posible que en los puestos de control o en algún otro lugar se produzca alguna clase de problema y están preparados para ello.»
A pesar de esto, Karim dijo que los rebeldes estaban dispuestos a marcharse y entregar el este de Alepo a las fuerzas del gobierno sirio.
«Sienten que hay potencial para cualquier problema. Al mismo tiempo están muy dispuestos a decir que no quieren ningún problema. Sencillamente, pretenden cumplir el acuerdo y entregar la ciudad a las fuerzas de Asad y después marcharse.»
En función del acuerdo alcanzado entre los rebeldes y el gobierno sirio y sus aliados, tanto los combatientes como los civiles tienen garantizado el paso seguro hasta las zonas bajo control rebelde en la provincia de Idlib, al oeste.
Territorios que están aún bajo control rebelde en Siria
(Situación a fecha 15 de diciembre)
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Alepo, los rebeldes conservan aún una zona al oeste de la ciudad de Alepo, así como cuatro ciudades al norte de la provincia.
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Idlib, casi en su totalidad bajo control rebelde, excepto dos ciudades chiíes: Fue y Kefraya.
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Raqqa está en manos del Estado Islámico.
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Homs, los rebeldes controlan un puñado de ciudades en el norte: Rastan, Talbiseh y Hula.
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Ghuta oriental, los rebeldes controlan alrededor del 40-50% del esta zona oriental de Damasco. Algunas partes están bajo asedio de las fuerzas del régimen.
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Daraa y Qunitra, la mayor parte bajo control rebelde, aparte de la ciudad de Daraa, casi en su totalidad en manos de las fuerzas pro-Asad.
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La operación de evacuación está siendo observada por el Comité Internacional de la Cruz Roja, aunque el Consejo de Seguridad de la ONU votó el lunes a favor de enviar al terreno observadores de la Organización.
Las evacuaciones continuaban en Alepo ayer martes, aunque se cree que aún quedan miles de personas esperando salir.
Un oficial rebelde en Turquía declaró a la agencia Reuters que aunque el lunes habían salido varios miles de personas, se cree que sólo la mitad de los civiles que querían marcharse han podido hacerlo hasta ahora.
Sin embargo, el ejército sirio trasmitió mensajes al este de Alepo en el día de ayer, advirtiendo que se disponía a entrar en la zona durante el día, instando a los combatientes de la oposición a acelerar su evacuación.
Las evacuaciones se iniciaron, se interrumpieron y empezaron de nuevo en diversas ocasiones a lo largo de los últimos días debido a la mutua desconfianza, en medio de los temores del bando rebelde de que el ejército sirio y sus aliados no permitan que los combatientes se marchen.
Una operación paralela para evacuar a los residentes de los dos pueblos de mayoría chií sitiados por los rebeldes en Idlib quedó interrumpida después de que un grupo de combatientes, al parecer pertenecientes a Yabhat Fatah al-Sham, antiguo Frente Nusra, incendiara los autobuses enviados a recogerlos.
El colaborador de Middle East Eye, Zouhir al-Shimale, evacuado el lunes, dijo que el autobús en el que él viajaba estaba atravesando puestos de control vigilados por fuerzas rusas e iraníes y por las milicias libanesas de Hizbollah.
Informó que soldados rusos habían subido a los autobuses para inspeccionar si los evacuados llevaban armas con ellos.
«Estaban diciéndonos que podíamos volver a la zona del régimen y que nadie nos iba a acosar ni arrestar pero nadie les escuchaba. La gente guardaba silencio, nos trasladamos a la zona rural occidental y nadie resultó herido ni arrestado.»
Mientras tanto, una situación desalentadora espera a los civiles que llegan a Idlib desde el este de Alepo; los trabajadores de la ayuda humanitaria están advirtiendo que no hay suficientes refugios, alimentos ni suministros médicos para el flujo de recién llegados.
Destrucción en Alepo
Según la ONU, hay al menos 35.722 edificios dañados, de los cuales 4.773 han quedado totalmente destruidos (Intensidad del daño de mayor a menor: de naranja a azul)
Fuente: http://www.middleeasteye.net/news/fighters-set-leave-east-aleppo-wearing-explosive-belts-1328938419
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