Las noticias: «Carmena (alcaldesa de Madrid) propone a Madrid como ciudad de acogida en la conmemoración del Día de la Tierra Palestina/ San Sebastián de los Reyes inaugurará una rotonda con el nombre de Palestina/ Valdemorillo celebra por primera vez el Día de la Tierra Palestina» Palestina aunque para algunos políticos y diplomáticos es un […]
Las noticias: «Carmena (alcaldesa de Madrid) propone a Madrid como ciudad de acogida en la conmemoración del Día de la Tierra Palestina/ San Sebastián de los Reyes inaugurará una rotonda con el nombre de Palestina/ Valdemorillo celebra por primera vez el Día de la Tierra Palestina»
Palestina aunque para algunos políticos y diplomáticos es un territorio de negociaciones para tratar debajo de las mesas, sigue siendo una tierra viva a la luz del día y su legado histórico contagia a propios y ajenos. Su causa hace que vibren los corazones, transmitiendo energías de grandes sensaciones por las aureolas de seres libres recorriendo el globo al grito de Viva Palestina.
La semana pasada se celebró el 40 aniversario del Día de la Tierra Palestina en todo el mundo. Eventos que se desarrollaron en un ambiente de reivindicación y de recuerdo por las personas que dieron su vida en protestas por las confiscaciones de tierras cometidas por el Estado sionista, dentro de lo que ha venido llamándose «la línea verde» es decir, el actual «Israel». El 30 de marzo de 1976, la sociedad palestina convocó una huelga general en protesta por el continuo robo de sus tierras por parte del sionismo israelí. El Ejército asesinó a seis jóvenes palestinos con «ciudadanía israelí», en las manifestaciones que acompañaron esa huelga. Desde entonces, el 30 de marzo ha quedado marcado como una jornada de reivindicación de los derechos legítimos del pueblo palestino.
En España asistimos a esta conmemoración con cierto entusiasmo, debido a los cambios que se produjeron en los equipos de gobiernos de los ayuntamientos más importantes del país. Con claro apoyo a la causa palestina y el pueblo palestino en sus legítimos derechos de libertad e independencia, se firmaron manifiestos y declaraciones institucionales con decretos para dedicar el nombre a algunas plazas y calles, como también la implantación de olivos (símbolo nacional palestino) en parques públicos.
En la comunidad de Madrid estos eventos tuvieron lugar entre el día 30 y 31 de marzo; en los municipios por orden cronológico: Valdemorillo donde se plantó un olivo en presencia de la alcaldesa del municipio y su gobierno. En San Sebastián de los Reyes, el evento consistía en la plantación de un olivo en la ya llamada Glorieta de Palestina, con la asistencia del alcalde y el equipo municipal. En Madrid también se plantó un olivo y la inauguración de un monolito, conmemorando el día, que fue descubierto por la alcaldesa de la capital de España. Un acto que fue recogido en los medios de información de la capital a través de las crónicas de muchos periodistas de medios locales, nacionales e internacionales; fue algo insólito y de gran alegría para la comunidad palestina y árabe.
Palestina aunque para algunos políticos y diplomáticos es un territorio de negociaciones para tratar debajo de las mesas, sigue siendo una tierra viva a la luz del día y su legado histórico contagia a propios y ajenos. Su causa hace que vibren los corazones, transmitiendo energías de grandes sensaciones por las aureolas de seres libres recorriendo el globo al grito de Viva Palestina.
Así recordando un acontecimiento de gran trascendencia sociopolítica, el pueblo palestino alza la voz a través de millones de gargantas de solidarios con su causa, dejando claro que aunque en Casa Blanca solo les quedarán París y Bruselas, en el mundo entero siempre nos quedará Palestina.
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