El puesto fronterizo de Rafah está situado al sur de Gaza en la frontera con Egipto. En él se dan cita las autoridades Egipcias, Palestinas, y Europeas e interactúan conjuntamente para que el puesto esté abierto y operativo. Se entiende que en una frontera están representadas las partes implicadas, es decir, Egipto y Palestina. Dado […]
El puesto fronterizo de Rafah está situado al sur de Gaza en la frontera con Egipto. En él se dan cita las autoridades Egipcias, Palestinas, y Europeas e interactúan conjuntamente para que el puesto esté abierto y operativo.
Se entiende que en una frontera están representadas las partes implicadas, es decir, Egipto y Palestina. Dado que Israel necesita de una mayor seguridad, se plantea la posibilidad de crear una fuerza «inter alia» Europea que actúe para asegurar que se cumplen los requisitos exigidos por Israel, en concepto de razones de seguridad. Se aprueba esta misión el 15 de Noviembre de 2005.
Según dice el documento original [1] del Boletín Europeo, la misión Europea se establece para «Proporcionar una presencia de Parte Tercera en el puesto fronterizo de Rafah para contribuir, en cooperación con los esfuerzos de construcción de instituciones de la Comunidad, a abrir el puerto de Rafah y crear confianza entre los gobiernos de Israel y la Autoridad Palestina«.
Oficialmente la misión terminaba en mayo de 2007, pero se ha extendido hasta Mayo de 2008, por lo que continua vigente. Desde su inicio en Mayo de 2006 su capacidad operativa ha sido intermitente y esporádica, pero desde el 14 de Junio de 2007, su capacidad operativa es cero, simplemente no está.
Podríamos pensar que este cese total de presencia europea en Rafah, implica un incumplimiento del acuerdo para que el puesto estuviese abierto y operativo. Si leemos detenidamente el objetivo de la misión son dos (1) «abrir el puesto de Rafah», y (2) «crear confianza entre los Gobiernos de Israel y la Autoridad Palestina». El objetivo dos parece que se ha logrado, puesto que ya hay confianza entre la Autoridad Palestina representada por Abbas, y el Gobierno de Israel de Olmert; igual han entendido que «misión cumplida», por esa razón no están en Rafah.
Sin embargo, en las bases de este documento, en el punto (5) explicita que «el puesto de Rafah será abierto por sus implicaciones económicas, de seguridad y humanitarias«, por lo que su apertura se entiende prevalece ante todo. Es decir, el objetivo principal es la apertura de Rafah, y no la seguridad de Israel, sino encontrar las soluciones posibles por razones humanas y humanitarias, si bien en un marco de confianza.
No hemos escuchado declaraciones del Representante de la UE, Javier Solana, responsable último de esta misión, explicando la ausencia de esta fuerza «inter alia» especialmente en estos momentos tan delicados, cuando es precisamente una fuerza interlocutora entre las partes, la que puede tener un papel primordial para que el puesto se abra. Mientras, desde la ONU, Oxfam, Derechos Humanos, y muchas ONG se está implorando la apertura de todos los puestos fronterizos ante la inminente crisis humana que se avecina, con carencia de todo, los puestos cerrados, y con desplazamientos de refugiados internos.
Desde el 14 de Junio, 6000 personas se apilan entre la miseria y carencia de todo, en el puesto fronterizo de Rafah, sin posibilidad de entrar ni de regresar, en tierra de nadie, y sin tener acceso a Gaza porque Rafah está cerrado, y lo está por «razones de seguridad», entendemos. 29 de ellas han muerto ya.
¿Quién es el responsable de estas victimas civiles?
Los responsables podrían ser los palestinos, puesto que la fuerza de la «Autoridad Palestina», tampoco está. Desde que Hamas se hizo del control de la Franja, las fuerzas de la Autoridad Palestina se fueron. En su reemplazo el Gobierno de Hamas envió un grupo de 200 personas afines a Hamas y Fatah, pero suponemos no fueron aceptados, por no ser reconocidos por la Autoridad Palestina.
En este contexto cabe también preguntarse qué es la «Autoridad Palestina». Hace un mes el Presidente de la Autoridad Palestina, había destituido al Primer Ministro, Haniye, y organizado un Gobierno de Emergencia. Transcurridos los 30 días el Gobierno de emergencia no puede continuar sin ser aprobado en el Parlamento, y las sesiones no se han podido constituir por falta de quórum. Así que el Gobierno de la Autoridad Palestina actualmente reconocido por la UE es inconstitucional, y así lo confirman fuentes de reconocido prestigio como Mustafá Bargouthi [2] , ex ministro de información.
Luego la responsabilidad podría ser de los palestinos si ellos tuvieran capacidad de decisión y ejecución, pero no la tienen, de hecho no tienen ni Autoridad, ni Gobierno, ni presupuestos, ni tierras, ni nada. La Autoridad Palestina es una entelequia, para distraer.
También está la presencia de Egipto, que estos sí están en el puesto y dejan pasar a los palestinos, pero después no asumen responsabilidades de retorno; es decir, nos les dejan regresar a Egipto, por lo que quedan en un territorio de nadie, privados de todos y cada uno de sus derechos. Egipto denuncia, pero su silencio fue comprado por el «cheque egipcio» que todos los años USA paga religiosamente a Mubarak para mantenerlo en el poder.
Puede ser la Unión Europea, ya que no está físicamente en Rafah; se mantienen 18 puestos en Askelton (Israel), y puede incurrir en un incumplimiento de sus funciones poniendo en situación de grave crisis humanitaria a miles de personas, que no pueden utilizarlo.
Sigamos con los responsables, puede ser Israel, pero dado que es una frontera entre Egipto y Gaza (libre de la ocupación Israelí desde Agosto de 2005), ¿qué pinta en todo esto Israel?. En el documento se cita que la misión contribuirá a los vínculos entre autoridades palestinas, israelíes y egipcias, en todos los aspectos de la gestión del puesto de Rafah, pero seguimos sin entender qué tiene Israel que ver en todo esto; aunque como vemos mucho, pues son quienes realmente controlan el puesto y quienes deciden cuando está abierto o cerrado.
Son las fuerzas de ocupación, y también están en Rafah, y en el aeropuerto que destruyeron, y hacen incursiones diarias en la Franja; y la fuerza «Inter alia» Europea está al servicio de Israel, no de los civiles -sean palestinos o no-. Egipto no tiene mucho que decir, y los palestinos con obedecer tienen suficiente, ya que ninguna iniciativa les será aceptada.
¿Quién tiene las llaves de Rafah?
Israel tiene las llaves de Rafah, y controla la Franja por aire, tierra y mar (y tienen los tanques y las armas para destruirla); es quién impone sus condiciones, quién antepone sus principios al derecho fundamental de la vida de los demás, y quién impone reglas (que por ser inhumanas) nunca se aplicaría a sí mismo. Este tipo de actuaciones se confirman día tras día, año tras año, y así seguiremos. En el panorama político internacional todo está maniatado y manipulado, y Europa y Naciones Unidas están para apoyar y ayudar, y no precisamente a los palestinos.
Israel no tiene ningún derecho a establecer ningún control en la frontera entre Gaza y Egipto, si la normativa internacional se aplicase, Israel no solamente es el único Estado del planeta con 46 resoluciones de la ONU sin cumplir, sino que le sumamos el incumplimiento sistemático y continuado del Pacto de Derechos Civiles y Políticos, la III y la IV Convención de Ginebra, así como la construcción de un muro declarado ilegal por la Corte Internacional. Y podríamos seguir, pero ya sabemos que la justicia no se aplica a Israel, por ello ejerce el control que quiere y cuando quiere en Gaza y Cisjordania. Europa le proporciona la ayuda legal y estratégica necesaria, y es cómplice de esta ocupación ilegal e inhumana, y del genocidio que en Gaza está teniendo lugar. Y en estos momentos, culpables de incumplimiento del acuerdo del 15 de Noviembre de 2005, para que Rafah esté abierto por razones humanitarias.
Mientras nos debatimos las victimas siguen muriendo (y esta es otra estrategia del agresor, distraer y confundir, así no se actúa), y estas 6000 personas permanecen hacinadas en condiciones mortales. Una de ellas es una madre que por visitar a su hijo mayor a la Universidad del Cairo, ha quedado atrapada; mientras sus otros ocho hijos la esperan en Gaza, y desde hace unos días atendidos en su escuela, por las maestras que les dan afecto, comida y cobijo. Los dos hijos de Sanaa no han podido volver a ver a su madre, ha muerto esta noche en el puesto, padecía cáncer. O ese señor de negocios, que no pudo predecir que el día 15 de Junio era el último, y aún espera para regresar a casa; o tantos pacientes en periodo de recuperación que regresan del hospital del Cairo, que les proporciona los cuidados que los desvalidos y desérticos hospitales de Gaza no pueden ofrecer. Y otros tantos que desean salir, con los visados conseguidos para visitar a sus familiares, o impartir una conferencia, o ir a trabajar; todos están sitiados, unos en el corredor y otros dentro, todos son prisioneros de la mayor prisión del mundo, porque eso es Gaza, e Israel el carcelero.
¿Quiénes son los culpables?
¿Quiénes son los culpables de la muerte de 29 personas en Rafah, de miles en Gaza, de millones en Palestina, que diariamente en las noticias nos imploran ayuda y dignidad, y que resisten ante un genocidio que no respeta ni uno solo de los 30 Derechos Humanos de la Declaración Universal?.
Todos somos culpables: Israel-USA planifican y ejecutan, Europa y la ONU ayudan y el genocidio continua, los demás callamos ante un sufrimiento que nos acompaña día a día, durante décadas y lustros. «Unos por agredir, otros por ayudar, y otros por silenciar».
Mientras los palestinos resisten y nuestros representantes políticos les culpan de hacerlo, pues resistir es ilegal. Ocupar, confiscar, asesinar… y planificar intencionadamente la clausura de un puesto fronterizo del que dependen la vida de miles de personas es legal, si lo hace Israel.
No puedo sentir más que vergüenza por los políticos que nos representan: la falsedad de la ONU, del Cuarteto, de Europa, de Solana, de Moratinos, de ese patético Tony Blair, por no mencionar al resto. Esto es Europa, reina de la democracia y los Derechos Humanos, del cumplimiento de las leyes, del consenso y la paz; esa Europa que ayuda y refuerza los convenios de colaboración con Israel, que no le exige el cumplimiento de ninguna normativa internacional en cuestiones de Derechos Humanos, quien subvenciona y paga desde las maquinas que construyen el Muro hasta las excavadoras que destruyen olivos y hogares palestinos. Esta es Europa, que condecora la resistencia palestina inscribiendo su nombre en la lista negra del terrorismo, y que subvenciona empresas israelíes y les premia comprando todo tipo de material bélico previamente «probado» con los palestinos.
Esta hipocresía, es algo más: es un acto planificado e intencionado de distraer y dar cierto carácter legal a un genocidio; lo cual hace más difícil su denuncia, pero no exime de su culpabilidad a quienes lo hacen.
Afortunadamente existen otros países, que no siendo europeos si hacen lo que pueden por el respeto a los Derechos Humanos. Noruega no ha dejado de asistir sus proyectos en Gaza, ha mantenido relaciones fluidas con el Gobierno de Hamas, y gracias a ello se han reconstruido centrales eléctricas, puentes, e infraestructura básica. Suecia está en la misma línea, y ha sido quien ha reestablecido el servicio eléctrico en la Franja.
Parece ser que hay posibilidades que colaboren en la formación de una nueva Fuerza no europea, con la presencia de cuatro países y conseguir que el puesto de Rafah se abra, en coordinación con las partes implicadas, es decir, Egipto y Palestina. Plan que seguramente sea rechazado por Israel, con el apoyo de USA y de Europa, claro.
Mientras seguimos sin noticias de Rafah, y en la reunión que precisamente hoy han tenido Abbas y Solana, ha sido este justamente el punto del que no han hablado.