Traducido para Rebelión por LB
Un palestino con dificultades de aprendizaje se encontraba anoche en estado crítico en un hospital en Ramallah después de que soldados israelíes le dispararan tres veces con balas [de acero] recubiertas de goma.
Awwad Sroor, de 41 años, recibió los impactos de bala el domingo por la noche en su casa de la aldea de Nilin, en Cisjordania, cuando soldados israelíes se presentaron a detener a su hermano, sospechoso de haber arrojado un bote de gas lacrimógeno contra los soldados durante una protesta realizada recientemente en el pueblo contra la construcción de un nuevo tramo del Muro israelí de Cisjordania.
Sroor recibió un impacto de bala en el pecho y dos en la cabeza, quedando ciego del ojo derecho. Su hijo Mohammad, de 20 años, había dicho a los soldados israelíes que su padre era mentalmente discapacitado y les había pedido que no le dispararan.
«Mi padre les gritaba para detenerlos. Les dije a los soldados que mi padre era mentalmente discapacitado y que no debían hacerle caso», explicó a Reuters el hijo. Su padre se encontraba de pie en un balcón cuando los soldados israelíes le dispararon.
El ejército israelí declaró que Sroor había «atacado a uno de los soldados y que había intentado arrebatarle el fusil mientras gritaba ‘¡Allahu Akbar!’.» Y añadió: «Una primera investigación mostró que la fuerza disparó balas de goma contra el hermano siguiendo las normas de combate del ejército israelí y el procedimiento estándar».
Dos jóvenes palestinos, uno de 10 años de edad y otro de 17 años, fueron asesinados a tiros por las tropas israelíes durante las protestas en Nilin en julio. Secuencias de vídeo de otro incidente posterior muestran a un soldado israelí en Nilin disparando a bocajarro una bala de acero con revestimiento de caucho contra un palestino detenido, maniatado y con los ojos vendados.
El grupo israelí de derechos humanos B’Tselem dijo ayer que las fuerzas de seguridad israelíes habían «adoptado en Cisjordania la práctica de disparar imprudentemente balas de acero recubiertas de goma». También afirmó que 21 palestinos han sido asesinados por balas recubiertas de goma desde el comienzo de la segunda Intifada a fines de 2000.
B’Tselem dijo que había pedido al fiscal general de Israel, Menachem Mazuz, que ponga fin a la práctica de disparar ilegalmente balas de acero recubiertas de goma y que procese a los soldados y agentes de policía implicados en lo que llamó «política de gatillo fácil». El grupo remitió al fiscal detalles de 19 casos que ha investigado en los cuales los soldados israelíes habían disparado a corta distancia balas [de acero] recubiertas de goma en situaciones en las que su vida no corría peligro de muerte.