Traducido para Rebelión por Ricardo García Pérez
El informe del Congreso de Estados Unidos (cuyo enlace aparece más abajo) ofrece una panorámica general de la ayuda exterior estadounidense a Israel. Incluye un repaso de los programas de ayuda anteriores, datos sobre la cooperación anual y un análisis de los asuntos en curso.
Israel es el mayor receptor de ayuda exterior estadounidense acumulada desde la Segunda Guerra Mundial. Desde el periodo comprendido entre 1976 y 2004, Israel ha sido el mayor destinatario anual de ayuda exterior estadounidense, desbancado a partir de 2004 por Iraq. Desde 1985 Estados Unidos ha suministrado a Israel casi 3.000 millones de dólares anuales en ayudas.
Casi toda la ayuda bilateral estadounidense adopta la forma de apoyo militar. Antes, Israel también había recibido una ayuda económica muy significativa. El firme apoyo del Congreso estadounidense a Israel se ha traducido en que la posibilidad de que goce de unas ventajas que no estaban a disposición de otros países. Por ejemplo, Israel puede hacer uso de cierta ayuda militar estadounidense tanto para la investigación y desarrollo en Estados Unidos como para la adquisición de equipamiento militar de fabricantes israelíes. Además, toda la ayuda exterior estadounidense destinada a Israel se entrega en los treinta primeros días del año fiscal. Casi todos los demás receptores suelen recibirla en plazos. El Congreso estadounidense también asigna fondos para programas conjuntos entre Estados Unidos e Israel de misiles defensivos.
En agosto de 2007 el gobierno de Bush anunció que incrementaría la ayuda militar estadounidense a Israel en 6.000 millones de dólares durante la década siguiente. El acuerdo exige un incremento de la escala anual a Israel mediante el Programa de Financiación Militar en el Exterior (FMF, Foreign Military Financing) que asciende a los 3.000 millones anuales durante el año fiscal 2001. Para el año fiscal 2011, el gobierno de Obama ha solicitado para Israel 3.000 millones de ayuda del FMF.
Según la justificación para el año fiscal 2011 del presupuesto de Operaciones en el Exterior del Departamento de Estado, «la ayuda estadounidense contribuirá a garantizar que Israel mantenga su ventaja militar cualitativa frente a amenazas potenciales y a impedir alteraciones en el equilibrio de seguridad de la región. La ayuda estadounidense también tiene por objetivo garantizar a Israel la seguridad que necesita para hacer las necesarias concesiones para una paz global en la zona».
Después de años de negociaciones, Estados Unidos e Israel anunciaron en agosto de 2010 que Israel va a adquirir 20 aviones F-35 por un coste total de 2.750 millones de dólares, que se pagarán en su totalidad con ayudas del FMF. Está previsto que los primeros aparatos se entreguen en el año 2015, aunque el acuerdo sigue pendiente de la aprobación final del gabinete israelí.
Jeremy M. Sharp es especialista en Asuntos de Oriente Próximo, Servicio de Investigación del Congreso de Estados Unidos
El informe completo está disponible en http://www.fas.org/sgp/crs/
Fuente: http://www.globalresearch.ca/index.php?context=viewArticle&code=SHA20101121&articleId=22026