A la 1:15 de la mañana del jueves, Andrew Macdonald, activista por los Derechos Humanos del MSI (Movimiento de Solidaridad Internacional), rehusó ser deportado desde el Aeropuerto Ben Gurión en Tel Aviv, Israel. El rechazo es una protesta en contra de la política de deportación de activistas por los derechos humanos en los Territorios Ocupados […]
A la 1:15 de la mañana del jueves, Andrew Macdonald, activista por los Derechos Humanos del MSI (Movimiento de Solidaridad Internacional), rehusó ser deportado desde el Aeropuerto Ben Gurión en Tel Aviv, Israel. El rechazo es una protesta en contra de la política de deportación de activistas por los derechos humanos en los Territorios Ocupados de Palestina llevada a cabo por el Estado de Israel.
Después de la negativa, un oficial de la Unidad de Operaciones Especiales amenazó a Andrew, diciéndole que lo drogarían, esposarían y le pondrían grilletes en las piernas para obligarlo a tomar el próximo avión disponible. También lo amenazaron con someterlo a dos meses en prisión si es que no obedecía.
En estos momentos, Andrew se encuentra en el Centro de Detención de Tzohar, en las cercanías del cruce de Rafah en Gaza.
El arresto se produjo en la localidad de Tel Rumeida en Hebrón, a las 3 de la tarde del pasado jueves. Andrew justo había terminado de escoltar a niños palestinos a la escuela. El MSI junto al Proyecto Tel Rumeida proporciona una presencia internacional en la localidad con la finalidad de apoyar la diaria resistencia no violenta palestina contra los ataques de la violenta comunidad de colonos.
El comentario personal de Andrew Macdonald es: «Algo bastante extraño está pasando aquí. Con el fin de expulsar gente de Israel, ellos están sacando personas fuera de Palestina y obligándolos a moverse a Israel. ¿Son los israelíes los que deben decidir quién puede estar en Palestina, o son los palestinos los que deben decidir?»