Tras la reciente huelga de hambre de los y las internas del CIE de Aluche (Madrid), entrevistamos a una de las componentes de la Comisión que permitió darla a conocer. DIAGONAL : ¿Cómo nace la Comisión? HANNAN D. : Nuestro objetivo, el cierre de los CIE (Centro de Internamiento de Extranjeros), será el resultado de un trabajo […]
Tras la reciente huelga de hambre de los y las internas del CIE de Aluche (Madrid), entrevistamos a una de las componentes de la Comisión que permitió darla a conocer.
DIAGONAL : ¿Cómo nace la Comisión?
HANNAN D. : Nuestro objetivo, el cierre de los CIE (Centro de Internamiento de Extranjeros), será el resultado de un trabajo de años. Hace dos años hicimos una manifestación contra el CIE de Aluche, de 400 personas. En ella, la gente decía que no luchaba por ello, y yo erre que erre, diciendo que no, que a por los CIE. Era una frontera tan brutal que no teníamos manera de conectar con ella. Al tener unas Oficinas de Derechos Sociales con asesoría jurídica para que la gente venga y que le diga al abogado «tengo a mi marido, a mi hijo allí», al conocer casos, cambia la situación. Se ponen en marcha un dispositivo de visitas a los y las internas, de interlocución con abogados, con la Administración… Eso nos impulsó a pensar una campaña contra los CIE poniendo especial acento en el de Aluche. La comisión en sí nace hacia octubre, y lo primero fue ampliar el espacio porque esto requería de mayor implicación por parte de actores sociales de la ciudad. A través de un manifiesto con la excusa de la marcha del 12 de abril, invitamos a otras asociaciones.
D. : ¿Por qué te metes en esta lucha?
H.D. : Es parte de la lucha diaria por la conquista de los derechos sociales. Para mí los CIE son los verdaderos Guantánamos, tienen que desaparecer. Es la frontera, con todo su dolor y sufrimiento, de Madrid. Son la cara oculta del Ministerio de Exteriores y de la política de inmigración del Estado español y de la UE. Es el espacio de la extrema manifestación de cómo se vulneran impunemente los derechos de las personas migrantes.
D. : ¿Cómo valoráis el resultado de vuestro trabajo?
H.D. : Para nosotros fue un éxito. Lo más importante que se ha conseguido es visibilizar fuertemente la situación de la gente que vive en este tipo de centros. Con el inicio de la huelga de hambre y posteriormente la manifestación, los vecinos de a pie que no sabían que estos centros existían, que creían que eran sitios donde ayudaban a los inmigrantes a integrarse, ya saben lo que son realmente. Resulta que no, que son una serie de cárceles y espacios de tortura, sitios de privación de derechos de los y las sin papeles. Al ponerlos en cuestión, se abre un debate público e incluso institucional.
D. : ¿Cuáles son los siguientes pasos?
H.D. : Extender esta lucha a todo el Estado, tener la capacidad de tener una interlocución con el resto de las ciudades donde hay CIE y organizaciones que trabajan en torno a esta temática. Para tener una fuerza mayor a nivel estatal. Como la cuestión se debate en el Parlamento Europeo, también extender la coordinación a nivel europeo. A corto plazo, en Madrid seguiremos trabajando : seguir contactando con las familias, recibir información. Si tenemos su compromiso y permiso, ayudarlas a denunciar. Nuestro objetivo es elaborar un dossier de casos y poder denunciarlos jurídicamente en la fiscalía de Estado, en el Parlamento Europeo o donde haga falta. También hemos empezado, a raíz de la huelga, a llamar a las puertas de diferentes organizaciones como Amnistía Internacional, SOS Racismo, Médicos sin Fronteras, para que se hagan eco de la situación y que, como organizaciones que tienen margen de maniobra, intervengan : que soliciten entrar en los CIE y que denuncien la situación de estos centros.