Las asociaciones de los periodistas han condenado la decisión del gobierno para prohibir difusiones sobre el ataque del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) en Hakkari.
La Asociación Moderna de Periodistas (CGD) y el Sindicato de Periodistas Turcos (TGS) emitieron el miércoles un duro comunicado de condena ante la prohibición a radios y televisiones para difundir los combates entre el ejército y los rebeldes kurdos que están teniendo, o puedan tener, lugar en la provincia de Hakkari, al sudeste del país.
La justificación ofrecida por el portavoz del Gobierno y viceprimer ministro, Cemil Cicek, fue que «la moral de la gente sería afectada negativamente».
Ahmet Abakay, presidente del CGD, calificó la medida como «un mandato nunca visto en una democracia» y «un acto claro y primitivo ejemplo de censura». Precisó que «contra los aspectos del terrorismo que no han podido prevenir, el gobierno esta utilizando medios anti-democráticos» y añadió que «el gobierno desea tener a los medios bajo su control».
En similares términos se expresó el Secretario General del TGS quien acusó al gobierno de «violar la libertad de prensa y el derecho a estar informado de la gente». Y criticó que la incapacidad del gobierno para solucionar el problema kurdo sea ocultada mediante el ejercicio de la censura.
Periodistas arrestados
El mismo día, dos periodistas de la agencia francesa Capa, Estelle Vigoureux y Marc de Banville, fueron detenidos por funcionarios turcos en el puesto de Habur (en la frontera con Iraq) al rechazar que los policías visualizaran el material que habían filmado.
Las autoridades turcas informaron con posterioridad que están investigando a los dos periodistas y a una tercera persona que viajaba con ellos por su posible conexión con la guerrilla del PKK.
Según informó la Agencia independiente Bianet, tras entrevistar al abogado de los detenidos, Selman Saygidar, la fiscalía mantenía abierta la investigación y el consulado francés había sido informado.
Previamente, el lunes 22 de octubre, cuatro periodistas turcos fueron arrestados en Yüksekova, provincia de Hakkari, por tomar fotografías a los convoyes militares.
Los detenidos, Ömer Oguz de Yüksekova News, Nevzat Tas y Kerim Kantarcioglu de la agencia de noticias Ihlas y Müslüm Bayburs del periódico Yeni Safak, fueron puestos en libertad horas después tras habérseles retirado sus acreditaciones.
* Antonio Cuesta es corresponsal de Prensa Latina en Turquía