Una trabajadora de Médicos Sin Fronteras narra la huida del campo en medio de bombardeos y ataques
El 7 de octubre, las fuerzas israelíes emitieron órdenes de evacuación masiva, desplazando por la fuerza a miles de personas de la zona norte de Gaza. Quienes huyen arriesgan sus vidas en medio de incesantes bombardeos y ataques aéreos.
Miles de personas, entre ellas seis miembros del personal de Médicos Sin Fronteras (MSF), siguen atrapadas en el campo de Jabalia, mientras las fuerzas israelíes rodean y atacan la zona.
Kholoud, asistenta del coordinador de MSF, huyó del campo de refugiados de Jabalia después de que las fuerzas israelíes emitieran órdenes de evacuación. Kholoud explica cómo consiguió huir a la ciudad de Gaza, en medio de los incesantes bombardeos.
Video en árabe con transcripción al inglés de cómo consiguió huir de Jabalia
Esta vez, no hay salida. Quienes se fueron el primer día escaparon, pero para los que no pudieron, es demasiado tarde.
El 6 de octubre, recibimos panfletos ordenando a todos evacuar hacia el sur. Todo el mundo estaba conmocionado. Pasamos todo el día buscando un pequeño autobús o un coche para evacuar, pero no hubo vehículos disponibles en todo el día, y el transporte es extremadamente caro.
Era casi al atardecer, había un dron cuando estábamos en el coche y abrió fuego contra nosotros, el conductor estaba aterrorizado y preguntaba: ‘¿Qué debo hacer?’
Realmente pensé que eran mis últimos momentos. Vi la muerte frente a mí.
Desde la noche hasta la mañana, tanques y aviones rodearon completamente el campo de Jabalia.
Mi padre trató de salir del campo y de repente vio un tanque justo enfrente. [Mi padre] agarró a mi hermano y a su esposa, y corrieron a la calle, se escondieron y tuvieron que volver al campo.
Conseguí salir [de Jabalia a la ciudad de Gaza], oíamos constantemente el ruido de los proyectiles.
«Antes, cuando daban órdenes de evacuación, Jabalia tenía múltiples salidas, por lo que la gente todavía podía salir. Esta vez, desde el momento en que emitieron las órdenes de evacuación, todo el campo estaba sitiado. Incluso lo rodearon antes de emitir las órdenes. La gente no podía evacuar». |
Aquí en la ciudad de Gaza, salí a comprar pan, tenemos una panadería que funciona, pero hay grandes multitudes esperando en la cola.
La gente está poniendo colchones en las calles y duerme al raso.
Aquí no hay tiendas de campaña. La gente está durmiendo en edificios parcialmente derrumbados, sobre todo en las plantas bajas.
Evacué a la ciudad de Gaza, pero el primer día no había comida. En la panadería se acabó el pan. Les dije a los niños: ‘No pasa nada, dormid’. Todos los niños durmieron hambrientos esa noche. Al día siguiente, pudimos conseguir pan.
La única comida que tenemos ahora son lentejas enlatadas, alubias y hummus.
Las cosas son realmente diferentes esta vez.
Antes, cuando daban órdenes de evacuación, Jabalia tenía múltiples salidas, por lo que la gente todavía podía salir.
Esta vez, desde el momento en que emitieron las órdenes de evacuación todo el campo estaba sitiado. Incluso lo rodearon antes de emitir las órdenes.
La gente no podía evacuar.
Gaza, 15 de octubre de 2024.-
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