Estimados amigos de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado Sr. Embajador de Palestina Amigos presentes Estimados compañeros: Quiero aprovechar esta ocasión para la cual he escrito una larga intervención que trata las raíces del problema de los refugiados, afrontando el proyecto colonial israelí desde el mandato británico. Podéis encontrar copias de esta intervención con […]
Estimados amigos de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado Sr. Embajador de Palestina Amigos presentes
Estimados compañeros:
Quiero aprovechar esta ocasión para la cual he escrito una larga intervención que trata las raíces del problema de los refugiados, afrontando el proyecto colonial israelí desde el mandato británico. Podéis encontrar copias de esta intervención con la organización CEAR. Pero en este estimado acto deseo manifestar mi agradecimiento y alta estima para la institución española para los refugiados CEAR, por haberme elegido este año para recibir el galardón del premio Juan Mª Bandrés a la defensa del derecho del asilo y solidaridad con los refugiados, y así veo en este acto un homenaje al pueblo palestino y sus derechos legítimos encabezados por el derecho de retorno de los refugiados a sus hogares, ciudades y aldeas de donde fueron forzosamente expulsados en 1948.
Me honra hoy día recibir este galardón en representación de más de cinco millones de refugiados palestinos dispersados a lo largo y ancho de nuestro mundo, sufriendo de problemas políticos, económicos y sociales y afrontando en muchos países problemas como la marginación y el racismo y la inseguridad.
Este galardón refleja la seriedad de CEAR y su interés en ayuda a los problemas de los refugiados en el mundo, incluyendo la causa de los refugiados palestinos que es el eje principal del conflicto palestino israelí, y no habrá ninguna posibilidad de que se logre la paz en el Medio Oriente sin dar una solución justa a este problema.
Sin duda los refugiados en el mundo sufren de problemas semejantes, y en muchos casos están obligados por asuntos políticos a abandonar sus países en busca de otros lugares seguros y donde muchas veces afrontan peligros que amenazan sus vidas a causa de violencia, guerras y conflictos armados. Se refugian en distintos lugares donde les tratan de diferentes formas y donde los servicios y las facilidades que se les otorgan varían de un lugar a otro. Pero a pesar de todas estas ayudas, la mayoría se enfrentan a la marginación y la humillación y la escasez de servicios para sus necesidades necesarias para su vida cotidiana, especialmente en el marco de la sanidad y educación, y un gran porcentaje de ellos sufren el desempleo y la pobreza. En estas miserables condiciones nace una nueva generación de jóvenes con diferentes tendencias y corrientes y lo más peligroso de estas corrientes es la tendencia rebelde, violenta que les convierte en una victima fácil de la que se aprovechan terroristas y fundamentalistas, y otra corriente desesperada, negativa, marginada, irresponsable, buscando soluciones individuales a su situación que terminan sirviendo a las mafias o contagiados con las enfermedades sociales como la prostitución, la droga y delincuencia.
La situación de los refugiados palestinos en la parte humanitaria según mis informaciones no es diferente de los refugiados de Bosnia, Chechenia, Iraq, Sudán el Sahara y otros. Los refugiados palestinos se diferencian de otros refugiados en lo siguiente:
1 Los refugiados que abandonaron sus países (sea cual sea el número de ellos), cada uno de ellos tomó su decisión individualmente y también puede individualmente tomar la decisión de retornar cuando desee, mientras los refugiados palestinos fueron forzosamente expulsados de su patria porque fue un plan hecho por el movimiento sionista para ocupar Palestina y vaciarla de sus ciudadanos para ocuparla por colonos israelíes, y así, no podrán volver nuestros refugiados palestinos ni por decisión individual ni por decisión colectiva.
2 Los refugiados palestinos abandonaron su patria Palestina a pesar de su tendencia religiosa, sea musulmana, cristiana o judía, o su raza o su color, fueron todos ciudadanos palestinos. Según la decisión de la Sociedad de Naciones con un mandato británico en Palestina, y según los historiadores a través de miles de años confirman que el nombre de esta tierra es Palestina, pero el movimiento sionista cambió su nombre después de 1948 y le puso Israel y transformó las condiciones de tener la ciudadanía en este Estado y está trabajando en transformar su historia, cultura, tradiciones y las normas. Cualquier refugiado en cualquier sitio del mundo cuando vuelve a su país encuentra su historia, su cultura, su civilización de la que él forma parte. Pero el palestino ¿cómo va a compaginar su derecho en el retorno a su Patria Palestina con la nueva realidad que va ha encontrar, con el nuevo nombre de Israel ?
3 Los problemas de los refugiados en el mundo se resolverán o se intentarían resolver a través de poner fin a los conflictos y a la violencia armada entre las partes o a través de una intervención internacional basada en las resoluciones de los foros internacionales. En relación de los refugiados palestinos su problema fue el más complejo y el más largo de la Historia. Han pasado ya 60 años desde que la ocupación de Palestina, lo que generó el problema más peligroso que es el de los refugiados. Se ha tomado desde entonces decenas de resoluciones internacionales exigiendo la indemnización y el retorno de los refugiados palestinos a sus hogares y sus bienes de los que fueron expulsados forzosamente desde 1948, encabezados por la resolución de la Asamblea de las Naciones Unidas nº 194 que fue tomada en 1948 e Israel declaró en 1949 la aceptación de dicha resolución que fue una condición para admitir a Israel como miembro de las Naciones Unidas, en aquel momento se formó un Comisión Internacional para el seguimiento de la ejecución de dicha resolución, pero no se llevó a cabo y siguió la intransigencia Israelí en no ejecutar dicha resolución.
La medida de la justicia en las resoluciones de las Instituciones Internacionales y para que estas resoluciones tengan un valor real para resolver los problemas de los pueblos y para que estas Instituciones Internacionales tengan la confianza y el respeto de los pueblos deben trabajar seriamente en ejecutar sus resoluciones, pero las Naciones Unidas y los medios internacionales y la opinión publica nunca han ejercido ningún tipo de presión contra Israel para ejecutar decenas de resoluciones relacionadas a la causa palestina y reconocer los derechos legítimos del pueblo palestino incluido el derecho de retorno de los refugiados. Por el contrario Israel con el apoyo de EEUU y algunos países europeos han tratado desde principio de los años 50 hasta mediados de los años 60 de ignorar la resolución nº 194 y han tratado de buscar como una solución al tema de los refugiados palestinos, nacionalizarles en los países donde residen o emigrarles a un tercer país.
En los años 80 hubo más de un intento de cancelar la resolución nº 194, y en los años 90, según los acuerdos de Oslo se trató de ignorar las resoluciones de la Naciones Unidas relacionadas con el tema de los refugiados que se aplazó a la fase final que nunca llegará.
Los Estados Unidos han logrado un éxito a través de la Cumbre Árabe del 2002 en poner una fórmula donde no se compromete en el contenido de la resolución nº 194 para la resolución del tema de los refugiados, esta fórmula no exige el retorno de los refugiados como indica esta resolución pero se busca una solución negociada basada en dicha resolución.
Por ello los palestinos y algunos países árabes manifiestan seria desconfianza y miedo por la próxima Cumbre de Paz que va a celebrarse el próximo noviembre, donde pretenden imponer una fórmula para la solución del tema de los refugiados con un apoyo internacional donde se anula el derecho de retorno a estos refugiados y la normalización de las relaciones israelíes con algunos países árabes, y la división interna Palestina, y así las nuevas negociaciones palestinas israelíes comenzarán con nuevas referencias peores de las de la Hoja de Ruta.
Amigos, era niño cuando abandoné Palestina junto con mi familia y miles de refugiados en 1948 hacia el campamento de Ain El Helweh en el Líbano. Y comencé la actividad política de muy joven con otros jóvenes igual que yo en contra de los planes de Kilab, Jhonston, Hemershold y otros que pretendían la solución del tema de los refugiados a través de disolverles económicamente en las sociedades donde residen. Y hemos luchado detenidamente hasta que fracasen dichos planes, y esta fase puso las bases para la formación de la O.L.P. y el inicio de la revolución palestina a mediados de los años 60.
Dicha experiencia puedo resumirla en tres temas:
1 Ninguna solución del tema de los refugiados palestinos tendrá éxito si no garantiza su derecho al retorno a sus hogares de donde fueron expulsados forzosamente en 1948 y los palestinos no renunciarán su derecho al retorno y ninguna parte puede representarles en renunciar a dicho derecho.
2 El tema de los refugiados forma parte del conflicto palestino israelí y no se puede resolver ajeno al resto de los temas como el Estado Independiente Soberano con su capital Jerusalén y el fin de las colonias israelíes en territorios palestinos. Las negociaciones de los temas de la fase final ha llegado a un camino sin salida y en los Acuerdos de Oslo Israel pretendía una rendición Palestina y árabe también, nunca han pensado en la paz. Israel sigue rechazando el retorno de los refugiados y conceder a Jerusalén como capital unificada y eterna para su Estado y rechaza la retirada a las fronteras de 1967 y sigue construyendo el muro racista en Cisjordania y amplía sus colonias, entonces ¿de que va a a negociar el palestino y cómo va a tener éxito el proceso de paz?
3 El tema de los refugiados palestinos está muy intervenido con los países árabes donde residen y estos países forman parte del conflicto con Israel, por ello dichos países deben ser socios en la participación de cualquier solución al tema de los refugiados palestinos.
Por estas razones mencionadas veo que el tema de los refugiados palestinos va a continuar para largo tiempo, por esta razón formé el Foro de la Continuidad Social (Generaciones-Ayal) para cuidar los intereses de los jóvenes y formarlos para que dirijan la futura etapa.
Los refugiados palestinos necesitan una amplia campaña de apoyo y solidaridad internacional y así acabo mi intervención haciendo un llamamiento de esperanza donde espero vuestro apoyo y el apoyo de otras ONGs, instituciones en formar un Comité preparativo que trabaje para formar un Foro Internacional para la solidaridad con los refugiados palestinos y así dicho Foro defenderá los derechos inalienables de nuestros refugiados.
Finalmente reitero mi gran agradecimiento y alta consideración a la institución española CEAR y al Comité de Solidaridad con la Causa Árabe que me eligieron como candidato para el premio de este año de Juan Mª Bandrés. Gracias por vuestra participación y hasta pronto.