Recomiendo:
3

Entrevista a Leila Khaled

«El 7 de octubre demostró la importancia que tiene esta lucha para el mundo»

Fuentes: Rebelión [Foto: Leila Khaled en casa en Amman, Jordania (Bayan Abu Ta’ema)]

Traducido del inglés para Rebelión por Jesica Safa

Leila Khaled reflexiona sobre su vida de resistencia, el significado que tiene el 7 de octubre para el movimiento de solidaridad global y el camino hacia la liberación de Palestina.

Leila Khaled, de 80 años, ha luchado por la liberación de Palestina desde que tenía 14 años. Creció como refugiada en Líbano y se unió a la resistencia a temprana edad. Es una reconocida luchadora por la libertad en el movimiento palestino, especialmente conocida por ser la primera mujer en secuestrar un avión en 1969. Khaled realizó la mayoría de su trabajo de resistencia con el Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) y se trasladó por diferentes países para continuar con su causa hasta establecerse en Jordania luego de casarse en 1992. Cuando Mondoweiss se reunió con ella en Amman, acababa de regresar de Venezuela donde había asistido a una conferencia sobre Palestina. Su trabajo por la liberación aún continúa.

Cuando tenía 14 años se unió al Movimiento Nacionalista Árabe, de donde luego derivaría el Frente Popular para la Liberación Palestina (FPLP). ¿Por qué decidió unirse?

El sentimiento de privación e injusticia te lleva a adoptar una postura: o aceptas o rechazas, y yo lo rechacé. Desde muy pequeños fuimos privados de cosas de las que alguna vez dispusimos en Palestina. Cuando llegamos a Líbano vimos a personas que habían sido desplazadas y caminaban desde Palestina hasta Líbano, cada una cargando con sus hijos o sus pertenencias, todas estaban llorando, los hombres, las mujeres y mi madre también lloraba como nosotros. Llegamos a casa de mi tío y en los alrededores había naranjos, queríamos comer las naranjas, pero mi madre dijo que no: ”Esto no es de ustedes, lo que es de ustedes está en Haifa, en Palestina. Aquí no tenemos nada”.

Esto me generó aversión por las naranjas durante años, no era nuestro, todo lo que teníamos estaba en Palestina. No comí una naranja hasta 1970. Era una situación muy deprimente, [aunque] las personas en Líbano empatizaban con nosotros, nos abrían sus hogares. Los niños y niñas continuamente preguntábamos por qué no estábamos en Palestina. Cuando creces empiezas a entender más. Lo que sufrimos habría afectado a cualquier ser humano. Si entendemos un poco, haremos preguntas y ellos tienen respuestas. Gracias a todo esto empecé a pensar en cómo podíamos volver a casa. Empiezas a preguntarte a ti misma y a aquellos que están a tu alrededor “¿qué podemos hacer nosotros?». Tenía 14 años cuando decidí unirme al FPLP, llamado entonces Movimiento Nacionalista Árabe (ANM). Mis hermanos se unieron primero y yo después de ellos.

El año pasado miles de personas en todo el mundo tomaron las calles para protestar por la ocupación de Palestina y el genocidio estadounidense-israelí en curso. Como alguien que se ha dedicado toda su vida a la causa Palestina ¿qué piensa del aumento del movimiento a favor de la causa Palestina durante el último año?

Me he dando cuenta de que el mundo ha comenzado a despertar. La lucha Palestina lleva más de 75 años y ahora las personas están empezando a conocerla. Ya hemos atravesado tantas fases de la revolución y luego la Intifada (levantamiento) que aumentó la conciencia en todo el mundo sobre nuestra causa. Sin embargo, Israel todavía se niega a comprometerse a nada y Estados Unidos los protege con el VETO. Biden declaró recientemente que no es necesario ser judío para ser sionista y que él mismo se considera sionista. También dijo que “si Israel no existiera, él lo hubiera creado”, lo que nos demuestra claramente su apoyo al genocidio. Destacó en repetidas ocasiones que Estados Unidos continuará apoyando a Israel con toda clase de ayuda. Efectivamente, han proporcionado a Israel armas de tecnología avanzada para probarlas en Gaza, como, por ejemplo, el fenómeno de los cuerpos vaporizados al ser bombardeados, ¿dónde más ha ocurrido esto antes? Están usando las armas más horribles y brutales de la historia para exterminar al pueblo palestino. Lo que está sucediendo ahora es un genocidio, y la gente se ha manifestado contra el genocidio y el apartheid.

Esta generación se ha vuelto más consciente de la situación y de la causa palestina. En parte se debe a las redes sociales, me refiero a que la nueva generación debe buscar la verdad sobre la lucha. Las miles de personas que han salido a las calles y los movimientos estudiantiles son la prueba de que han comprendido la causa. Es también la prueba de que dejaron de creer en la mentira más grande: que Palestina era una tierra sin pueblo y que el pueblo palestino es un pueblo sin tierra. La realidad es que es nuestro deber trabajar para construir redes de información, tenemos que luchar con el mundo para informarles sobre la lucha. Los medios occidentales tienen su política, que se construye sobre su propia opinión, eso está claro, no están con el movimiento popular. Este año fui a Malasia, Nicaragua y Venezuela para asistir a conferencias sobre Palestina.

¿Qué piensa sobre el 7 de octubre y de los antecedentes históricos de la [Operación] Tormenta de Al Aqsa?

El 7 de octubre fue inevitable, tenía que ocurrir porque la historia de la lucha entre nosotros y el enemigo es larga. ¿Hasta cuándo se supone que debemos permanecer así, viviendo bajo ocupación? Es una pregunta fundamental. ¿Hasta cuándo? No fue una operación militar, fue una operación histórica. Mostró nuestra lucha, nuestras víctimas, la ocupación y todas las políticas que la ocupación impone a nuestro pueblo, ya sea en Cisjordania, en Gaza o incluso fuera (de Palestina). Demostró que debíamos hacer un cambio drástico.

Se demostró ante el mundo la importancia de la lucha palestina. La ocupación ha durado más de 75 años, ¿por qué la gente comenzó a manifestarse ahora? Gente de lugares lejanos, incluso en Australia e Islandia, ha estado manifestándose, pero no es una cuestión de distancia: se trata de cómo la gente ha tomado conciencia de la verdad de la lucha y la verdad está en los hechos. Ahora estamos en la era de las redes sociales, la gente ve las imágenes, y aunque los partidarios de Israel bloqueen lo que se publica en las redes, no pueden silenciar el movimiento en las calles. La gente comenzó a manifestarse y el movimiento estudiantil ha sido asombroso.

La operación ocurrió, y el mundo entendió por qué. Estados Unidos e Israel intentaron distorsionar la verdad y decir que son terroristas, pero ¿quién es el verdadero terrorista? Hasta ahora Estados Unidos ha impedido que se celebre cualquier conferencia para definir el terrorismo. Ellos (Estados Unidos e Israel) no quieren determinar qué es el terrorismo, porque ellos mismos son terroristas. ¿Qué es el ocupante? Quien ocupa es un terrorista.

Se han cometido masacres en todo el mundo, pero ¿ha ocurrido algo parecido a lo que está sucediendo en Gaza? No, no ha sucedido. Ha quedado claro que Israel es un Estado de ocupación racista, y esto ha llevado a la gente a esgrimir consignas contra el apartheid y el racismo. Estos términos ahora se utilizan mucho en las calles.

Los países occidentales trabajan unos contra otros, pero consideran al movimiento sionista un punto de referencia, lo que significa que Israel cuenta con un fuerte apoyo porque fue fundado por el movimiento sionista. Todas estas cuestiones están interconectadas, y ahora vemos que Israel es un Estado que no cumple las leyes internacionales o humanitarias, y, sin embargo, está protegido por Occidente, que está formado por los antiguos colonizadores de nuestra región, lo que significa que todavía no pueden admitir que hay que aislar a esta entidad.

En 1969 participó en el secuestro del vuelo con el FPLP. ¿Puede decirnos algo más acerca de por qué decidió participar en él?

Yo no tuve la idea, yo fui quien llevó a cabo la tarea en aquel momento. Estaba estudiando en Kuwait y regresé a Líbano en 1968 para visitar al Dr. Wadie Haddad, líder del FPLP. Le dije que quería ir a Jordania para adiestrarme, pero dijo que no. Le dije que había estado esperando el comienzo de la revolución para poder participar, quería llevar un arma, resistir, luchar y liberar a Palestina, ese era mi sueño.

Mi madre no quería que me fuera, pero mi padre le dijo: «Cuando huimos de Palestina, las mujeres se fueron primero, cuando queramos regresar, las mujeres también serán las primeras». Así que agarré a mis hermanos y fuimos a los campamentos de adiestramiento militar.

Cuando se estableció el FPLP, se pusieron dos consignas. La primera era que las mujeres y los hombres están juntos en la lucha por la liberación, lo que significa que las mujeres deben participar en los campamentos de adiestramiento militar. La segunda era: «Detrás del enemigo en todas partes». ¿Por qué? Porque el FPLP cree que el enemigo no es solo Israel, sino el movimiento sionista, que ha trabajado y sigue trabajando para apoderarse de esta tierra y expulsarnos de ella. El FPLP cree en atacar los intereses del enemigo donde quiera que se encuentren en el mundo, ya que esta es una parte fundamental de la batalla principal que incluye utilizar armas contra el enemigo en Palestina.

En 1969 Wadie Haddad me preguntó si estaba dispuesta a morir y dije que sí, luego me preguntó si estaba dispuesta a ser encarcelada, a lo que respondí que hemos emprendido este camino conscientes del riesgo y que ya hay muchas compañeras y compañeros palestinos en las prisiones debido a operaciones militares. Entendí lo que significaba estar encarcelada por la ocupación.

Luego me preguntó si estaba dispuesta a secuestrar un avión, me sorprendió, no había oído hablar de secuestro antes, y tenía 24 años. Así que me tomé un tiempo para considerarlo, pensando en por qué íbamos a hacerlo. El objetivo era liberar a todos los prisioneros palestinos encarcelados por Israel, estaba muy feliz porque iba a hacer algo por Palestina. Tomamos el avión desde Roma, que venía de América, se suponía que iba a ir a Atenas, luego a Tel Aviv, pero al ser árabes, no podíamos ir a Tel Aviv, así que pedimos boletos para Atenas.

Sabíamos que el avión era estadounidense y que llevaba armas que iban a Israel, cambiamos el código del avión a «El Frente Popular para la Liberación de Palestina, Palestina es Libre y Árabe», y cualquiera que quisiera comunicarse con nosotros tenía que usar este código. Le dije al capitán que nos diera una vuelta para ver Palestina, fue la primera vez que vi Palestina desde que había huido. Pensé en mi padre, que había fallecido. El piloto me dijo que yo tenía que ponerme el brazo sobre el hombro, tenía miedo porque yo llevaba una bomba abierta en la mano. Le dije «no tengas miedo, me he adiestrado para esto.»

Foto: La imagen de Leila Khaled se refleja en una icónica foto suya tomada tras regresar a Jordania tras el secuestro del vuelo 840 de TWA en 1969 (Bayan Abu Ta’ema).

Le di un nuevo mapa que nos llevaba a Damasco y fuimos allí. Volamos la cabina cuando los pasajeros se habían ido, queríamos destrozar el avión. Estábamos felices porque cuando llegó la policía, pensaron que éramos algunos de los pasajeros. Le dije a la policía: «Miren a los israelíes, huyeron». Estuvimos en Siria un mes y medio, primero con la policía secreta, pero luego nos dejaron ir, nos dieron una casa donde alojarnos y nos sacaban por la noche para mostrarnos Damasco y nos llevaban a restaurantes.

¿Qué camino cree que hay que seguir para lograr una Palestina libre?

Estamos de acuerdo (como la resistencia Palestina, no solo Hamas, sino todos los combatientes que llevan armas) que no tenemos opciones ni el lujo de elegir, tenemos un camino, y lleva a Palestina: la resistencia armada. Por supuesto, la política, los movimientos populares y el trabajo diplomático ayudan. Pero lo más importante son las armas, y lo esencial es golpear al enemigo directamente en la tierra que ocupa. Como pueblo que vive bajo ocupación tenemos derecho a resistir con armas, esto está inscrito en el derecho internacional. Siempre hay esperanza de lograr la liberación, si no hubiera esperanza, no habríamos luchado.

El mensaje que quiero transmitir al mundo es que los palestinos y las palestinas somos parte de este mundo, y estamos siendo oprimidos. Esta guerra que está teniendo lugar ahora es un ataque genocida, ¿hasta cuándo continuará? En la Franja de Gaza viven 2.5 millones de personas, ¿quieren matalos a todos?

La Corte Internacional dice ser la corte de justicia, ¿cuándo decidirá que esto es realmente un genocidio? ¿Cuántos palestinos y palestinas tienen que ser asesinados antes de que tomen una decisión?

Todos los países, junto con las Naciones Unidas, deben presionar a sus gobiernos para que corten lazos con Israel. Israel es un Estado de apartheid. Todos, no solo los pueblos, sino también los Estados, deben boicotear a la ocupación. La nueva generación está desempeñando un papel muy importante en la lucha por la liberación, y quiero decirles que no se detengan, que sigan por este camino.

Bayan Abu Ta’ema es un narradora y cineasta palestina independiente establecida en Jordania. Produce películas documentales y de periodismo, tanto visuales como sonoras, a menudo relacionadas con los derechos humanos.

Synne Furnes Bjerkestrand es una periodista independiente establecida en Amman, Jordania. Ha escrito para medios noruegos, Al Jazeera y Middle East Eye, y actualmente está terminando su maestría en periodismo acerca del tratamiento que se da al genocidio en Gaza en los medios occidentales.

Texto original: https://mondoweiss.net/2024/12/october-7-proved-the-importance-of-the-struggle-to-the-world-an-interview-with-palestinian-icon-leila-khaled/

Esta traducción se puede reproducir libremente a condición de respetar su integridad y mencionar a las autoras, a la traductora y Rebelión como fuente de la traducción.