“Después de 15 meses de implacable derramamiento de sangre y de devastación inimaginable en Gaza, se ha alcanzado un alto al fuego”, el cual “está lejos de ser el fin de nuestra lucha”, aseguró la embajadora de Palestina en México, Nadya Rasheed, luego del acuerdo entre Israel y Hamás anunciado este 15 de enero.
“La justicia y la rendición de cuentas siguen siendo críticas. La comunidad internacional debe garantizar que Israel cumpla plenamente con los términos del alto al fuego, detenga sus asesinatos indiscriminados y tome medidas inmediatas para poner fin a su agresión, colonización y ocupación ilegal e inhumana en todo el territorio palestino”, añadió Rasheed en un comunicado tras el alto al fuego, que entrará en vigor este domingo después de 15 meses de ofensiva israelí que ha dejado más de 46 mil 700 palestinos muertos.
El acuerdo entre Israel y Hamás fue celebrado por la población palestina en la franja, que festejó en lugares como Deir Balah y frente al hospital Mártires de Al Aqsa. Sin embargo, los bombardeos de Israel contra Gaza continúan, y al menos 71 personas fueron asesinadas por los ataques unas horas después de anunciado el cese al fuego.
“Desde que se anunció el acuerdo de alto el fuego en la Franja de Gaza, las fuerzas de ocupación israelíes han matado a 71 mártires. Sólo en la Ciudad de Gaza hay 61 mártires, (incluidos) más de 19 niños y 24 mujeres, además de unos 200 heridos”, declaró un portavoz de la Defensa Civil gazatí, encargada de recuperar cuerpos y víctimas tras los ataques.
La embajadora de Palestina en México señaló que el acuerdo “marca el comienzo de un largo y arduo camino hacia la sanación”, cuyo proceso debe iniciar “honrando a las miles de vidas arrebatadas por Israel, brindando atención a los heridos, restaurando los servicios esenciales y reconstruyendo los medios de vida desde las ruinas”.
“El mundo debe estar a la altura de este desafío y garantizar que la justicia y la rendición de cuentas allanen el camino hacia un futuro más justo y pacífico”, concluyó Rasheed.