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¿Por qué y contra quienes luchan los pueblos de Palestina, Irak, Venezuela y del mundo?

El antisemitismo a la inversa y sus tentáculos en Venezuela

Fuentes: Rebelión

Desde su fundación, año 1948, El estado de Israel ha mantenido una misma política hostil y expansionista frente a los pueblos árabes que la rodean como también frente al mismo pueblo árabe sobre el cual se erige (Pueblo Palestino). Palestina, se le es borrada del mapa y se le intenta liquidar su historia. Solo es […]

Desde su fundación, año 1948, El estado de Israel ha mantenido una misma política hostil y expansionista frente a los pueblos árabes que la rodean como también frente al mismo pueblo árabe sobre el cual se erige (Pueblo Palestino).

Palestina, se le es borrada del mapa y se le intenta liquidar su historia. Solo es reconocido como una entidad autónoma (Gobernación) aunque las resoluciones emitida por la ONU (ver especialmente la N° 242) del año 1967, hayan impuesto arbitrariamente sin la consulta al pueblo palestino, la partición de Palestina en 2 estados: uno árabe palestino con el 45% del territorio y otro judío con el 55% del territorio. Sin embargo este robo que auspiciaron las potencias triunfantes de la II Guerra Mundial nunca fue respetado por Israel, y es que, como lo diría nuestro pueblo: «Ladrón que roba a ladrón tiene 100 años de perdón».
 
A Palestina y su pueblo (musulmán, cristiano, incluso al hebreo originario), sus árboles de naranjos, sus montes de olivos, a los que el poeta Hibran Kalil Hibran con tanto amor se refería en sus poemas, se les pretende hacer olvidar al resto del mundo. La compra de importantes imprentas internacionales, de empresas cinematográficas como por ejemplo «Hollywood», y grandes empresas noticieras como por ejemplo: CNN, ha sido la mejor estrategia implementadas por el sionismo para así poder modificar la historia y trivializar los problemas del pueblo palestino: calificarlos de terrorista a los mártires luchadores, y de invasores a los invadidos.

Primero hablemos del sionismo

El sionismo surge en el año 1890 como respuesta a las encarnadas contradicciones de la alta burguesía y la pequeña burguesía europea. Ella representó y sigue representando la organización de la elite judía.

Bajo las formas encubiertas «Caballo de Troya» del antisemitismo cristiano y el anticristianismo judío, las clases medias lucharon contra la burguesía judía que se encontraban establecidos en el sector comercial y financiero de Europa. Los judíos fueron vistos como representantes de aquellos aspectos del capitalismo por los cuales las clases medias y bajas son particularmente oprimidas. De esta estrategia, utilizando las diferencias religiosas y «raciales» imaginarias, el capitalismo, principal culpable de la confrontación, se coloca fuera del escenario de batalla.

Así nace el sionismo internacional a la razón de proteger sus intereses con el proyecto de crear un estado judío que llamarían Israel. 1948 es la fecha que marca el triunfo de la burguesía sionista y el inicio de la tragedia del pueblo palestino (también semitas).

De Israel, el sionismo y el antisemitismo

Israel nace de los compromisos adquiridos por Inglaterra (potencia imperialista de la época) con la alta elite financiera judía-sionista, a cambio de ayudas económicas en los momentos decisivos de la II Guerra Mundial. Esa misma elite que había apoyado y financiado a Hitler en sus primeros años de poder, bajo el mismo tratado, «un País para los judíos», que más tarde lo traiciona oportunamente al cambiar la correlación de fuerzas durante la guerra.

Existen actualmente muchas documentaciones que prueban los estrechos vínculos que existían entre la elite judía y el gobierno de Hitler, sus acuerdos y los preparativos para que los judíos-alemanes, obligados por las condiciones adversas, abandonasen Alemania, a la búsqueda de una tierra propia para ellos.

La potencia imperialista inglesa ofreció a la elite judía-sionista varias opciones entre las cuales figuraban: La Guayana Inglesa (territorio en reclamación por Venezuela), las Malvinas (territorio en reclamación por Argentina) y Palestina. Palestina resulto la elegida por el sionismo, ella reunía todas las condiciones apropiadas: Antecedente histórico, ubicación Geoestratégica política y militar para el control de las riquezas del golfo, etc.

A la debacle de los imperios europeos finalizada la II guerra Mundial y el surgimiento del Imperio Norteamericano, la burguesía sionista israelí pasa hacer la hija predilecta y coparticipe del poder imperial junto a la burguesía norteamericana. Es evidente la influencia del poder político-económico sionista en la casa blanca, prueba palpable de esto la encontramos por doquier, su apoyo incondicional a Israel frente a las declaraciones de la ONU que las desfavorecen utilizando el infame veto. La guerra de Irak es otra evidencia de tan descarada influencia sionista sobre las políticas norteamericanas, donde según el sociólogo norteamericano James Petras: «que habiendo el imperio norteamericano logrado negociaciones con el depuesto presidente Saddan Huseim (el amigo poderoso que EE.UU. necesita en el medio oriente; «según del mismo Saddam». -Antes de invadir a Kuwait e iniciarse la guerra-). Fue empujado por el lobby sionista a esta descabellada e innecesaria guerra».

Y por que lucha el pueblo palestino…

Es imprescindible para un buen razonamiento preguntarse uno mismo lo siguiente: ¿Si roban tus tierras, si asesinan a tus familiares, si violan a tus hermanas y madres, si eres discriminado por tu raza, al no permitir un estado que te proteja, al no existir leyes que te amparen, al no existir cortes bien sea nacionales o internacionales que juzgue estos crímenes de lesa humanidad, acaso no estarán concientemente empujando a que busques venganza por tus propias manos?, ¿el luchar e inmolarse como la única forma posible de propinarles bajas al asesino de tu pueblo y familia, como también a sus seguidores, es una locura fanática religiosa o conciencia desesperada?

¿Que papel cumple la religión en todo esto? Mientras que para los luchadores palestinos les sirve solo como colchón para el acto de inmolación, mas no como la causa o el justificativo. Para el sionismo cumple el papel de justificativo patriarcal de las tierras del pueblo escogido por dios y la tierra prometida.

Pero si revisamos un poco la historia resiente descubrimos que el surgimiento y el auge del «Fundamentalismo Islámico» se inicia los momentos de la caída del bloque soviético y con el todos los movimientos progresistas que actuaban en la zona contra el imperialismo norteamericano sionista y genocida. Aunque ellos mismo fueron formados y apoyados desde sus inicios por el imperialismo en su lucha contra los gobiernos pro-soviéticos y los mismos movimientos progresistas antiimperialistas. Hoy desaparecidos estos últimos y agudizada las contradicciones de intereses entre ellos mismos, el fundamentalismos islámico se transforma en el único instrumento de lucha que poseen los pueblos Árabes y Musulmanes en general contra la pretensiones del imperio norteamericano-sionista, cuyas políticas segregacionista y de exterminio racial contra esos pueblos (también semitas) al peor estilo Hitleriano, pretenden perpetuar. De este razonamiento se deduce que: la lucha contra el antisemitismo que eran y siguen siendo las banderas del sionismo, se aplica a la inversa. La doble moral burguesa.

El Sionismo y Venezuela

La comunidad judía en Venezuela -en su mayoría- como en todos los países donde se encuentren, forman parte activa y de influencia política-económica de la elite capitalista.

El golpe de estado frustrado en Venezuela debelo la influencia sionista, que además de estar representada por el imperio norteamericano, tuvo sus propios representantes y los sigue teniendo en el acontecer político diario.

Pedro Carmona Estanca, de ascendencia judío sefardí, presidente de facto por breves 48 horas. Isaac Peres Recao, traficante de armas israelíes y norteamericanas, partícipe del golpe. Enrique Capriles Radonski, de ascendencia judía, figura importante de la oposición. Otro líder que encabeza a este pequeño pero muy influyente grupo económico-político es el rabino Pynchas Brener; quien fuera uno de los distinguidos visitantes de Pedro «El Breve» en su fugaz ocupación del Palacio de Miraflores. Federico Alberto Rabel, de ascendencia judía-sionista y dueño del canal informativo Globovision, ferviente opositor del gobierno revolucionario. El embajador norteamericano en Venezuela Sharles Shapiro, etc.
Es por eso que no nos sorprende ver esas mismas políticas racistas, divisionistas y segregacionistas aplicadas aquí en Venezuela.

Es importante aclarar que es el sionismo y la alta elite (derecha) judía y no el pueblo judío en sí, el problema que divide confronta al judaísmo con el mundo, aunque muchos de ellos estén poseídos por el demonio sionista y la concepción de esta ideología haya logrado arrastrar a la religión.

En fin sabemos que una lucha eficiente contra el racismo y el antisemitismo en todas sus formas y expresiones, no es posible sin una lucha paralela contra el sionismo y el capitalismo, el cual representa la raíz, el talón de Aquiles del demonio Burgués, que la solución a este y todos los problemas que vive la humanidad, radica solo en mantener la resistencia y elevar la conciencia de los pueblos, conciencia que se expresa en reconocer que el enemigo de la humanidad es uno (el capitalismo) que su máxima expresión producto natural del desarrollo histórico del capital es el Imperialismo. El mismo enemigo que mata al pueblo de Palestina, invade, destruye y aniquila al pueblo de Irak, el mismo que mata de hambre y destruye a todos los pueblos de Centro y Sur América, aquel que pretende robarle las esperanza al pueblo Venezolano, y a todos los pueblos del mundo, incluyendo a sus propios pueblos. Debemos de tener claro que la humanidad tiene un enemigo en común y que la solución definitiva a este mal se encuentra solo en el SOCIALISMO.
 
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