JERUSALEN.- En la Franja de Gaza ayer estaban de luto los niños de un colegio por la muerte de una compañera de 13 años, Iman al Hamas, a quien soldados israelíes acribillaron a balazos porque sospecharon que en la cartera con libros y cuadernos que llevaba había una carga explosiva. La muerte tuvo lugar junto […]
JERUSALEN.- En la Franja de Gaza ayer estaban de luto los niños de un colegio por la muerte de una compañera de 13 años, Iman al Hamas, a quien soldados israelíes acribillaron a balazos porque sospecharon que en la cartera con libros y cuadernos que llevaba había una carga explosiva.
La muerte tuvo lugar junto a un puesto militar israelí en la localidad palestina de Rafah, en el sur de la Franja de Gaza. Fuentes hospitalarias palestinas dijeron que la niña recibió al menos 20 impactos de bala que le dispararon los soldados.
Los hechos se produjeron ayer al alba. Poco después, el Ejército mató a otros dos palestinos en la zona de Yabalia del norte de la franja: uno de Hamas y el segundo del grupo también integrista Yihad Islámica.
Antes, un miembro de las Brigadas de los Mártires de al Aqsa, el brazo armado del oficialista Al Fatah, se inmoló al hacer estallar una carga explosiva que llevaba encima, pero no causó bajas. Un quinto palestino de la Franja de Gaza, militante del Hamas, murió por las heridas que le habían causado soldados israelíes en días anteriores.
Otros dos palestinos de la Yihad Islámica perdieron la vida a última hora de la tarde de ayer al ser alcanzados en un «asesinato selectivo» por un cohete del Ejército israelí, en las proximidades del campo de refugiados de Shati.
Al octavo palestino, en este caso miembro de Hamas, lo mataron a bocajarro soldados y policías israelíes pasada la medianoche del lunes en la ciudad cisjordana de Hebrón, 15 kilómetros al sur de Jerusalén.
Desde la invasión militar israelí al norte de la Franja de Gaza han muerto ya 90 palestinos civiles, de los cuales 19 eran menores de 17 años.
En medio de esta barbarie, ayer informaba la prensa israelí que había contactos entre representantes de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), que preside Yasir Arafat, y el Ejército de Israel para poner fin a la violencia.
Según esa información, representantes de la ANP habrían comunicado a altos oficiales israelíes la existencia de un acuerdo con dirigentes de Hamás según el cual éstos dejarían de disparar cohetes ‘Qasam’.
A cambio, el Ejército israelí deberá retirarse de las zonas desde las que se disparan los ‘Qasam’, sobre todo Yabalia, y sus tropas serían sustituidas por policías palestinos.