Hoy al amanecer, 12 de enero del 2022, las excavadoras israelíes y soldados preparados para combatir invadieron la aldea palestina de Al-Atrash en el desierto del Naqab al sur de la Palestina de 1948 [hoy Israel]. Por tercer día consecutivo las excavadoras israelíes han estado arrasando grandes fajas de tierra pertenecientes a los palestinos de la aldea.
La escalada de limpieza étnica de palestinos en Al-Atrash es parte de un esquema que está siendo aplicado conjuntamente por el Fondo Nacional Judío (JNF por sus siglas en inglés)) y la Autoridad de la Tierra Israelí.
Como respuesta a esto, los palestinos de Al-Atrash y de las zonas circundantes han estado manifestándose durante tres días en un intento de detener la incautación de su tierra.
Apenas sorprende que las fuerzas coloniales israelíes suprimieron brutalmente las protestas. Mientras escribimos este artículo, las fuerzas israelíes arrestaron a nueve manifestantes después de atacarlos violentamente.
Ayer, martes, 11 de enero, los palestinos residentes en Al-Atrash instalaron una sentada con una tienda en el lugar que Israel procura demoler y apoderarse. Además de esto, los palestinos llevaron a cabo una huelga en diferentes zonas del Naqab, incluidas las aldeas de Al-Atrash, Sa’wah, BeirHadaj, Al-Zarnouq, Al-Rwayyis y Khirbet Al-Watan.
Para detener a los palestinos que intentan frustrar este esquema de limpieza étnica, los soldados israelíes asaltaron la tienda, la destrozaron y atacaron a los manifestantes. Dieciocho personas fueron arrestadas en el día de ayer. Otras resultaron heridas y los soldados lanzaron latas de gas lacrimógeno y granadas aturdidoras a los manifestantes.
Aún así, la brutalidad israelí intensificada solo alienta a los palestinos a manifestarse más. Los líderes de la comunidad y los organizadores en el Naqab están haciendo llamamientos por una protesta masiva y una huelga que tendrá lugar mañana.
La existencia palestina no reconocida en el Naqab
La aldea de Al-Atrash es una de las 35 aldeas no reconocidas en el Naqab por parte de las autoridades coloniales israelíes. Aproximadamente 100.000 palestinos con ciudadanía israelí de tercera viven en esas aldeas.
Al no reconocerlas, Israel le niega a los palestinos que viven allí los servicios básicos, como centros de salud, escuelas, agua, electricidad e infraestructuras de aguas residuales. Israel también niega a los residentes de las aldeas permisos de construcción, en lugares donde sus hogares son demolidos constantemente o están bajo la amenaza de demolición en cada momento.
Además de Al-Atrash, la aldea de Al-Araqeeb es otro ejemplo perfecto de las prácticas malévolas de Israel y sus políticas contra las llamadas aldeas no reconocidas. Hasta ahora, las autoridades israelíes han demolido Al-Araqeeb más de 190 veces.
Este ambiente coercitivo en el que los palestinos están obligados a vivir sirve a los planes israelíes para expandir los asentamientos judíos en el Naqab.
Sobre las ruinas de esas aldeas las autoridades israelíes, a través del FNJ (JNF por sus siglas en inglés), buscan plantar árboles de injusticia, apartheid y colonización. 45, 000 dunams de tierra limpiada étnicamente serán reforestados por el FNJ.
El FNJ llama a esta campaña de limpieza étnica el Disdeño del Negev. A través de la Campaña del Diseño del Negev, el FNJ promociona falsamente una imagen del Naqab como una tierra vacía y estéril que necesita revitalización para ser habitada por gente, principalmente judíos.
La intención de este proyecto es reemplazar a los dueños palestinos de la tierra del Naqab con 500. 000 nuevos colonos judíos y árboles del FNJ.
Los palestinos, independientemente del marco legal que los subyuga se están enfrentando actualmente a los mismos desplazamientos forzosos practicados por las autoridades de ocupación israelí en diferentes partes de la Palestina Histórica. Además del Naqab, la existencia de los palestinos está criminalizado y amenazado en el Sur de las Colinas de Hebron (SHH por sus siglas en inglés) y en el Valle del Jordán.
Hoy las excavadoras israelíes invadieron Al-Fakheet en el SHH y demolieron cinco tiendas residenciales, un pozo de agua y dos refugios para animales.
En la comunidad beduina de Ibziq en el Valle del Jordán, más de 40 personas quedaron sin hogar ahora después de que las fuerzas de ocupación israelí demolieran sus hogares el 28 de diciembre.