DIAGONAL: Se confirma el envenenamiento de Yasir Arafat. ¿Este hecho era algo que ya se sabía? TERESA ARANGUREN: Sobre la muerte de Yasir Arafat (noviembre 2004) enseguida se planteó la sospecha del envenenamiento. La enfermedad se desarrolló muy rápidamente. Yo entrevisté a Arafat en Palestina en junio de ese año y lo vi muy bien […]
DIAGONAL: Se confirma el envenenamiento de Yasir Arafat. ¿Este hecho era algo que ya se sabía?
TERESA ARANGUREN: Sobre la muerte de Yasir Arafat (noviembre 2004) enseguida se planteó la sospecha del envenenamiento. La enfermedad se desarrolló muy rápidamente. Yo entrevisté a Arafat en Palestina en junio de ese año y lo vi muy bien de salud, cuatro meses después murió. Entonces la Mukata, sede de la Autoridad Nacional Palestina, sufría desde hacía dos años el cerco del Ejército israelí que la bombardeó y destruyó parcialmente.
Dos años después, en 2006, se publicó en Francia el libro «Ariel Sharon, retrato íntimo», del periodista Uri Dan, que fue íntimo colaborador y portavoz durante dos años del primer ministro Sharon. Uri Dan da por sentado que el Gobierno de Sharon tuvo luz verde de Washington para asesinar a Arafat. Además, hay que tener en cuenta que en esos años, hablar abiertamente de liquidar a Arafat era habitual enlos círculos políticos de Israel. Dan explica que Sharon le dijo que había hablado con George Bush para consultarle si tenían permiso para liquidar ya a Arafat. Al parecer hasta esa fecha Washington les había dicho que no.
En el verano de 2004, es cuando Bush da el visto bueno, pero siempre que no se detectase. En esa conversación entre el entonces primer ministro y el periodista, éste pregunta: «¿Entonces, lo hicisteis?», y Sharon le responde: «Bueno, es mejor no hablar de eso…». Uri Dan interpreta, y así lo plasma en su libro, que esa frase es la confirmación de que sí envenenaron a Arafat.
De esa información se hizo eco la prensa israelí, especialmente el periodista Uri Avnery, muy conocido en los círculos contrarios a la ocupación, o Anon Capeliu, periodista israelí que escribía para Le Monde.
Por eso, resulta más irritante el cinismo del Gobierno israelí, diciendo ahora que no tienen nada que ver con el envenamiento [al cierre de esta edición, se confirma que Arafat murió envenenado con polonio. El envenenamiento de Arafat siempre se ha manejado como un hecho.
D.: ¿Qué se ha conseguido tras la huelga demás de unmillar de presos palestinos en cárceles de Israel?
T.A.: Unos 1.500 presos palestinos estuvieron en huelga de hambre durante casi dos meses. Pusieron fin a la huelga en mayo tras lograr el compromiso israelí de mejorar sus condiciones. Pero eso no se ha cumplido y algunos presos retomaron el ayuno.
El caso más conocido es el de un joven futbolista, Mahud Sarsak, que se mantuvo en huelga de hambre casi 90 días. Este futbolista fue detenido cuando salía de Gaza y se dirigía a Cisjordania donde le había fichado un equipo de fútbol. Al pasar normalmente por el puesto de control israelí fue retenido y encarcelado. Ha estado tres años en prisión bajo lo que denominan detención administrativa, encarcelamientos que se van prolongando de seis en seis meses, en los que no existe una causa acreditada.
El preso no sabe de qué se le acusa. El futbolista, muy reconocido en Palestina, fue puesto en libertad hace menos de un mes, ya en condiciones de salud muy precarias, gracias a las presiones de instituciones deportivas, como la Federación Internacional de Fútbol (FIFA).
La pregunta que yo me hago es: ¿si algo así, 1.500 presos en huelga de hambre durante dos meses, se hubiera producido en otro lugar del mundo…? El movimiento político internacional de condena que se habría producido sería otro. Sin embargo, tratándose de Israel, todo se ha mantenido semioculto. No ha tenido una dimensión política internacional, como todas las atrocidades que suceden en Palestina diariamente.
La huelga de hambre ha puesto en evidencia las condiciones de aislamiento que sufren los presos palestinos, que tienen prohibido recibir visitas de la familia y que son encarcelados sin cargos.
D.: Israel también hace prisioneros a menores palestinos.
T.A.: Sí. Existe un porcentaje importante de menores encarcelados en esas circunstancias: sin saber de qué se les acusa. Según la legislación israelí, los palestinos son mayores de edad con 16 años y existe un número elevado de menores encarcelados, de entre 13 y 14 años. Las asociaciones tienen todos los datos pero no se mueve a la opinión pública porque la información está oculta. Es una constante en el sufrimiento de la población palestina bajo la ocupación.
D.: Los asentamientos en Cisjordania avanzan de forma paulatina.
T.A.: Todas las colonias judías en Cisjordania, incluido Jerusalén, son ilegales según las tratados internacionales. Sin embargo, muchas veces la prensa se contagia del lenguaje del ocupante y se habla de asentamientos ilegales como si hubiera otros legales. Cada cierto tiempo, llega la noticia de que el Ejército israelí desmantela un asentamiento israelí en Cisjordania. Eso es una falacia. Lo que se ha desmontado es una serie de caravanas que el movimiento de colonos ha instalado en una colina y a eso lo llaman asentamiento. Mientras, se están construyendo edificios en territorio palestino que según las leyes israelíes son legales, pero que la legislación internacional condena.
La situación es especialmente grave en Jerusalén oriental, donde se está llevando a cabo un proceso de judeización (campaña así denominada por Israel) que consiste en expulsar a los palestinos de su vivienda en Jerusalén e instalar allí a colonos judíos. En otros casos se deniegan los permisos de construcción para familias palestinas y si hacen cualquier obra en alguna zona de la casa, se declara ilegal toda la vivienda y se les expulsa y se entrega su residencia a los colonos. Los cónsules europeos en Jerusalén llevan a cabo informes que en los últimos dos años hablan literalmente de «limpieza étnica». Además, multinacionales europeas colaboran en la construcción de urbanizaciones para colonos judíos en territorio palestino.
D.: ¿La producción agraria de Israel también se hace entierras ocupadas?
T.A.: Sí. La UE permite la comercialización de productos agrarios cultivados en territorio palestino y se venden en Europa bajo la marca de «productos israelíes», aunque existen acuerdos que no permiten comercializar productos de países que violan los derechos humanos. Pero además, se exportan bajo acuerdos preferenciales. Es un auténtico escándalo.
D.: Por otro lado, el bloqueo a la población de Gaza continúa.
T.A.: Sí, y se impide llevar ayuda internacional. Dentro de unos años Gaza figurará dentro de los grandes crímenes y vergüenzas de Occidente. ¿Cómo es posible que se siga consintiendo el bloqueo, que dura ya seis años, contra la población de Gaza? Esto supone, no sólo el estrangulamiento económico, también vivir al arbitrio de lo que decida Israel. El bloqueo ha tenido momentos tan absurdos como que la UNRA (agencia de la ONU para los refugiados) no podía llevar algunos productos a Gaza porque se consideraban productos de lujo, por ejemplo, sopa de tomate, caramelos, fideos, productos de aseo o papel higiénico…
D.: ¿Los medios de comunicación están reflejando todo esto?
T.A.: Hay una dinámica que oculta la realidad de Palestina. Por ejemplo, rara vez aparece el término ocupación en los medios, o se hablaba de operación de represalia, como si tuviera que ver con la defensa de Israel. Se repite el lenguaje del ocupante. Por otro lado, la presencia de los lobbies proisraelíes en los medios cobra cada vez más fuerza en el Estado español y sorprende ver como colaborador habitual en El País a Bernard-Henri Lévy, con artículos cargados de mentiras constatables, en representación del Ejército y el Gobierno israelí.
Fuente original: http://www.diagonalperiodico.net/En-los-circulos-politicos-de.html