Traducido para rebelión por J. M. y revisado por Caty R.
Este comentario del funcionario palestino en la negociación, es en respuesta al documento oficial citado por Haaretz, según el cual Israel secretamente canceló la condición de residentes de 140.000 palestinos de Cisjordania entre 1967 y 1994.
El jefe de la negociación palestino, Saeb Erekat, dijo el miércoles que la cancelación por parte de Israel de la condición de residentes de 140.000 palestinos de Cisjordania, según informó Haaretz, constituye un crimen de guerra y representa un intento israelí de afectar a la composición demográfica de Cisjordania.
Los comentarios de Erekat fueron en respuesta a un informe de Haaretz del miércoles donde se cita un documento oficial israelí según el cual Israel ha utilizado un procedimiento encubierto para cancelar el estatus de residencia de los palestinos de Cisjordania entre 1967 y 1994.
El documento fue escrito después de que el Centro para la Defensa de las Personas presentase una solicitud bajo la Ley de Libertad de Información. En el documento se establece que el procedimiento se utilizó con los residentes palestinos de la Ribera Occidental que viajaron al extranjero entre 1967 y 1994.
Desde la ocupación de Cisjordania hasta la firma de los Acuerdos de Oslo, los palestinos que deseaban viajar al exterior a través de Jordania eran obligados a dejar sus tarjetas de identificación en la frontera del Puente Allenby.
En un comunicado enviado más tarde a Haaretz el miércoles, el jefe palestino de la negociación dijo que el informe confirma las afirmaciones palestinas de que Israel está empeñado en una política sistemática de desplazamiento con el fin de ganar tierras para la expansión de más asentamientos y colonias con el fin cambiar la composición demográfica de los territorios palestinos ocupados».
«Esta política no sólo debe verse como un crimen de guerra tal cual es en virtud del derecho internacional, sino que también tiene una dimensión humanitaria ya que estamos hablando de personas que salieron de Palestina para estudiar o trabajar temporalmente, y a las que no se les permitió volver a reanudar su vida en su país con sus familias «, agregó Erekat.
El alto funcionario de la Autoridad Palestina también señaló que el documento revelado al diario Haaretz demostró que «las acciones de Israel violan la Declaración Universal de los Derechos Humanos, donde se establece que «todas las personas tienen derecho a salir de cualquier país, incluido el propio, y a regresar a su país».
A la luz de lo revelado en el informe del periódico Haaretz, Erekat hace «un llamamiento a los Estados de la comunidad internacional que todavía tienen que reconocer el Estado palestino en la frontera de 1967 para que se unan a los que ya lo han hecho.»
«Nuestro derecho a la libre determinación no debe ser objeto de negociaciones, incluido el derecho de nuestras familias a vivir en su tierra natal. Es hora de poner fin al dolor y la humillación causados por la ocupación israelí», dijo Erekat.