Toda la historia desde cómo el régimen monárquico inglés vendió Palestina a los sionistas, su puesta en escena en la ONU hasta hoy, tiene rasgos sobresalientes de lo que se denomina guerra por encargo. Los bandidos financiados y armados se emplean en una revuelta contra un pueblo indefenso y destruyen ciudades enteras, envenenan el agua, y echan de su país a la mayor parte de la población. El organismo que entregó más de la mitad del territorio palestino a los bandidos, no movió un dedo, ¿por qué cree usted?
La Nakba, La Catástrofe, comenzó el 15 de mayo de 1948, fecha de la instalación de los grupos terroristas que se pusieron de nombre estado israelí. La transferencia a éstos fue aprobada por el organismo dominado por Inglaterra, imperio dominante de Palestina, y comenzó la guerra contra la patria de las tres religiones. Los bandidos sionazis destruyeron casi 500 ciudades y pueblos, y los imperialistas no movieron un dedo por el pueblo palestino, en su plan general iban a practicarse todas las inhumanidades de las invasiones anteriores, y las realizarían elementos jóvenes y útiles escogidos por los sionazis en la Alemania nazi, financiaban sus bancos. La operación se proyectaba para la destrucción y ruina de los pueblos de Medio Oriente que habían derrotado a los imperialistas ingleses y franceses consiguiendo su independencia, o estaban en lucha por conseguirla.
Ahora demos un salto en el tiempo: 22 de febrero de 2023, los sionazis asaltan la ciudad de Nablus, o Naplusa, y asesinan a 11 palestinos y dejan 102 heridos. Antes y después de esa fecha, desde el primer día del año han venido matando Palestinos sin que ninguna potencia haga nada, nadie ha destinado una fuerza internacional, y se ha pedido muchas veces, que proteja a la población palestina. La matanza que el ejército neocolonial realizó en Nablus, era una prueba más de que los asesinos sabían que sus patrocinadores no quieren que deje de matar. Ni siquiera ha habido una resolución de la ONU, ¿saben por qué?: porque el padrino más destacado del sionazismo, EEUU, se ha opuesto. A consecuencia de semejante acto condenable en cualquier lugar que mirase por la justicia, como si se pudiese buscar una salida honorable en votaciones y discursos saltando por encima de los crímenes cometidos y las burlas, el representante de la Autoridad Palestina denunció el propósito sionazi de construir 10.000 viviendas ilegales para nuevos colonos. El imperio patrocinador principal del sionazismo se rió, también se negó a que se aprobase la declaración de condena de semejante ilegalidad.
El argumento que dieron quienes defienden a los genocidas, la grandísima burla escupida al pueblo palestino y al mundo del lado de la justicia, fué que una declaración así dificultaría “la solución de los dos estados”, concepción hueca desde el primer día. Nada de lo que se ha firmado sobre Palestina se ha cumplido, ¿ven la realidad? Por si no resultase suficiente con los hechos, que ya es el colmo, a la realidad la acompañan las más crudas palabras de los mismísimos sionazis, cuyos representantes han manifestado que nunca van a dejar paso a un Estado Palestino. Pero no nos detengamos aquí, sigamos, lo trágico es que la ANP aceptó un documento hecho por EEUU … en el que se negaba a pedir a la ONU, a su Consejo de Derechos Humanos y a la Corte Penal Internacional, “acciones” contra la entidad neocolonial, pues de lo contrario le cerrarían el grifo por el que recibe dinero, las 30 monedas, el plato de lentejas. Un proceder tan ¿absurdo? deja los crímenes contra el pueblo palestino en el olvido. ¿Por qué? Tan absurdo como apostar a que el respeto a Palestina va a salir de una conversación con los sionazis, pues el imperio “aconsejó” que se sentasen las “dos partes” a conversar. Todo tan absurdo como que el imperio haga lo contrario de lo que es. Los sionazis pertenecen a la escuela de Pompeo, o más claramente: Pompeo, que es sionazi, aprendió de ellos: “invadimos, bombardeamos, destruimos y matamos”, lo que hacen un día tras otro desde 1948.
Todo esto sucedió entre el 22 y el 26 de febrero, en los 4 días que separan a las dos fechas no se limitaron a Nablus, continuaron asesinando Palestinos en todo el país, pero el día 26 los sionazis colonos, siguiendo el ejemplo de los progromos de los nazis, asaltaron el pueblo de Huwara, próximo a Nablus, y tal y como hacían las SS incendiaron viviendas con sus habitantes en el interior, establecimientos y cientos de vehículos. ¿Ha pasado algo? Durante el Ramadán ha subido aún más la criminalidad sionazi. Los asaltos a Al – Aqsa con centenares de heridos, centenares de detenidos, han terminado, de momento, con el robo de su bandera palestina. Ningún gobernante en el mundo ignora lo sucedido, nadie ignora la primera guerra por encargo imperial. Lleva ya más de 70 años, hay varias generaciones que solo conocen la guerra encargada por los que se dicen defensores de ¿qué? Las alianzas internacionales están cambiando, en alguna parte del horizonte se empieza a ver algo distinto, en otra parte hay una amenaza a todo el mundo. ¿Y a Palestina se la ve liberada? La Resistencia Palestina sigue pase lo que pase. Pero transformar el mundo, hacerlo más justo, debe tener en cuenta que hay que acabar con la primera guerra por encargo, que hay que dar esa fuerza internacional transformadora de verdad a la Resistencia del Pueblo Palestino.
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