Traducido para Rebelión por Christine Lewis Carroll
Joe Fallisi: Querida Greta, querida Mary, sois dos de los fundadores más implicados de Liberad a Gaza. Creo que el movimiento constituye una de las pocas realidades del nuevo mundo en la lucha a favor de los derechos humanos. Hace posible un cambio útil, positivo, nuevo y definido – además de radical. Un cambio que de otra manera y con toda probabilidad no se habría producido. La iniciativa surge desde la sociedad civil y no tiene nada que ver con las formas convencionales de hacer política. ¿Cómo, dónde y cuándo empezó el Movimiento, y cuál es vuestro papel dentro de él?
Greta Berlin (*): El Movimiento Liberad a Gaza fue fundado hace dos años por cinco personas en dos continentes. Paul, Mary y yo trabajábamos desde California, y Eliza y Bella trabajaban de forma paralela desde Reino Unido. Decidimos unirnos y pensamos que navegar en un barco a Gaza sería buena idea. Originalmente, se le ocurrió a Michael Shaik en Australia: ¿Por qué no navegar en un barco desde los Estados Unidos a Gaza?
Fue el comienzo de un proceso de dos años que culminó con la navegación de dos barcos pequeños por parte de 44 personas con el fin de romper el bloqueo draconiano de Gaza ejercido por Israel. He sido responsable del trabajo con los medios de comunicación, sobre todo en los últimos dos viajes.
Mary Hughes-Thompson (**): Cuando trabajé de documentalista de televisión en Hollywood, investigué y escribí sobre la creación de Israel y los numerosos conflictos que éste provocó entre sus vecinos. Al principio, apoyé a Israel, pero me di cuenta que no fue la víctima como alegaba, sino el azote del pueblo cuya tierra y recursos naturales codiciaba.
«Cuando me jubilé y al iniciarse ‘la segunda intifada’, decidí ir a Palestina en 2002 con una delegación cristiana de paz. Los horrores que presencié me convencieron de que en el nombre del sionismo, la intención de Israel fue la limpieza étnica de los palestinos, echándoles de la tierra de sus antepasados. Para mí, la suerte estaba echada, y me apasioné por Palestina.»
Joe Fallisi: ¿Cómo está organizado Liberad a Gaza? ¿Cómo se financian las acciones del Movimiento?
Mary Hughes-Thompson: Al principio, no fue fácil convencer a la gente, incluso a nuestros amigos, de que no estábamos locos. Greta y yo abrimos una cuenta aportando $100 cada una. Empezaron a llegar pequeños donativos, sobre todo después de publicar un artículo sobre nosotros la periodista suizo-italiana Silvia Cattori (1).
Se unieron a nosotros más voluntarios, entre ellos nuestro maravilloso especialista en Internet Anis Hamadeh en Alemania.
Simplemente creo que la gente estaba intrigada por la audacia de nuestro plan, y aunque tardamos un año más de lo que habíamos previsto, al final tuvimos suficiente dinero para comprar un barco de pesca usado. Fue entonces cuando la gente que había dudado de nosotros, aunque nos apoyaban, vio que íbamos en serio y llegaron más donativos .
Greta Berlin: Gracias a Dios no fuimos demasiado ambiciosos. Pedimos donativos en nuestro sitio de Internet, y Paul, Bella, Eliza, Mary y yo empezamos a hablar con grupos sobre nuestro proyecto, pidiendo donativos. Cuando un miembro del Movimiento solicitó en los EE.UU. la concesión de organización benéfica, recibimos más donativos, sobre todo dentro de Estados Unidos. Pero los hemos recibido desde todas partes del mundo, desde algunos de $1.50 y otros de más de $25.000.
Joe Fallisi: Hasta ahora, y frente a todos los bloqueos de carretera impuestos por Israel, Liberad a Gaza consiguió romper el sitio sionista en tres ocasiones. ¿Cuáles son vuestros planes para el futuro?
Mary Hughes-Thompson: Estamos luchando por los derechos humanos y civiles del pueblo de Gaza que lleva años padeciendo la ocupación y el bloqueo de Israel.
Nuestra meta fue simplemente navegar nuestros dos pequeños barcos desde Chipre a Gaza y casi no lo pudimos creer cuando entramos en el puerto en medio de 40.000 palestinos saludando y vitoreando el barco que había tardado 41 años en llegar.
Queremos continuar con nuestros viajes y llevar a personas relevantes como periodistas y parlamentarios, con el fin de que cuenten lo que han presenciado de regreso a sus países.
Otros pasajeros serán observadores de derechos humanos que pasarán semanas o meses en Gaza haciendo lo que puedan; esto incluye acompañar a los pescadores a los que la marina israelí ataca sistemáticamente, y a veces mata.
Los agricultores agradecen nuestra ayuda en las zonas intermedias establecidas por Israel en el lado de Gaza de la frontera, donde los agricultores palestinos se arriesgan a que los israelíes les hieran o maten cuando trabajan la tierra.
Además, queremos animar a otros grupos con más recursos que nosotros a romper el bloqueo mediante la navegación, con el fin de llevar ayuda humanitaria – comida y medicinas – sistemáticamente bloqueada en cada trayecto desde Israel a Gaza.
Greta Berlin: Tenemos tantas solicitudes de parlamentarios, civiles, activistas y periodistas que seguramente podríamos navegar dos o tres veces al mes. Lo único que nos lo impide es que la ida y vuelta a Gaza cuesta por lo menos €20.000. Nos gustaría que se incrementasen los donativos para poder continuar con los viajes y empezar un servicio de transbordador entre Chipre y Gaza.
Joe Fallisi: Estoy orgulloso de haber participado en el segundo viaje, cuya salida era la más incierta de todas. El tercero ha representado la confirmación que no dejarán de salir los barcos. Pero el primero fue un acontecimiento maravilloso, audaz y disparatado – tanto un riesgo como un desafío. ¿Nos lo podéis recordar? ¿Quién creó en vosotros además de vosotros mismos?
Greta Berlin: Creo que nadie. Luego, poco a poco, la gente empezó a creer en nosotros. Cuando salimos de Chipre, había 44 personas que querían viajar con nosotros. La mayoría de nosotros era activista, y algunos como Hedy Epstein, Jeff Halper y Lauren Booth, muy significativos. Percibimos que su presencia impediría que la marina israelí nos parara. Y así fue.
Mary Hughes-Thompson: Mucha gente creía que perseguíamos un sueño imposible; yo también a veces. Pero Greta era la roca en que me apoyaba. Su determinación no se podía ignorar.
Joe Fallisi: Entre los fundadores de Liberad a Gaza, hay mujeres maduras, gente normal… ¿Nos podéis contar algo sobre esto? Creo que es algo nuevo, algo que ha ocurrido en Italia con los fundadores y organizadores de los nuevos movimientos fuertes en contra de la construcción de la nueva base militar estadounidense en Vicenza. Ciudadanos corrientes de familias corrientes; madres y padres – sobre todo madres – que fruto de la frustración han decidido asumir su propia vida y destino, y adoptan formas libertarias de auto-organización.
Greta Berlin: De los primeros cinco organizadores, cuatro somos mujeres entre 30 y 74 años. Las dos más mayores procedemos de la revolución de los años 60 en Estados Unidos. Luchamos por los derechos de las mujeres y los derechos civiles de los afro-americanos. Esto también es verdad con respecto al hombre fundador.
Basamos nuestro proyecto en la premisa simple de que no es ayuda humanitaria lo que necesitan los palestinos, sino derechos civiles. Son perfectamente capaces de cuidarse de si mismos si se les da la oportunidad de ejercer los derechos reconocidos a todo el mundo en las leyes internacionales.
A medida de que se fuera extendiendo el Movimiento, fuimos orgullosos de que se unieran a nosotros gente de todas las edades, el más joven en el primer viaje de 22 años y el más mayor de 81. Las 44 personas que hicieron el primer viaje representaban a 17 países. Y en el segundo viaje, 23 pasajeros representaron a 13 países.
Mary Hughes-Thompson: Pienso – espero – que cada vez más gente reconoce el valor de los mayores. Demasiada gente joven nos ve como ancianos, jubilados, anticuados, canosos, en baja forma. Deben saber que todos nosotros hemos alcanzado metas en nuestra vida y eso es lo que aportamos ahora. En general, la gente joven que participaba en el proyecto no tuvo problema con el hecho de que yo podía ser su abuela. (Y espero que la persona que me llamó antigua sólo estuviera bromeando.)
Joe Fallisi: ¿Cómo creéis que vuestras acciones se vayan a desarrollar en el futuro? ¿Cuáles son vuestros proyectos para combatir el sitio de Gaza y la opresión sionista hacia la libertad final de Palestina?
Greta Berlin: Seguiremos yendo a Gaza cuantas veces podamos costear. Hemos discutido la posibilidad de ir en un pequeño avión al aeropuerto de Gaza o de que un dirigible planee por encima de Gaza, de forma que denunciemos que Israel todavía ocupa el espacio aéreo además de la tierra y el mar.
Mary Hughes-Thompson: Haremos todo lo que podamos para mantener abiertas las rutas marítimas y finalizar el sitio aéreo. Nos gustaría ver la apertura de una ruta comercial en Gaza para el tránsito de bienes y personas. Nos uniremos a las personas que combaten el sitio inhumano por parte de Israel y a los Estados Unidos que lo financian anualmente con billones de dólares.
Joe Fallisi: ¿Continuaréis siendo un movimiento libre o imagináis la conversión de Liberad a Gaza en un partido formal?
Greta Berlin: Dudo que lleguemos a ser nunca un partido. Somos demasiado diversos y dispersos (por el globo). Queremos que otros naveguen hacia Gaza también. Queremos iniciar nuestro propio servicio de transbordador y que otros también lo hagan.
Mary Hughes-Thompson: El pueblo de Gaza ha sido aislado demasiado tiempo. Quiero que sepa que tiene apoyo en todo el mundo y que la gente conoce su causa. Cuando salimos de Gaza, le dijimos al pueblo que no lo olvidaríamos y que no lo abandonaríamos.
Es una promesa que todos cumpliremos.
Joe Fallisi: ¿Tenéis algún mensaje para los lectores italianos?
Mary Hughes-Thompson: Italia estuvo bien representado por sus compatriotas Vik y Joe. Nuestro último pasajero italiano fue Fernando Rossi a bordo del DIGNITY (Dignidad) en el tercer viaje. Nos enorgullece ondear la bandera italiana y esperamos llevar a más de sus compatriotas a Gaza. Los acogeremos con amor y los brazos abiertos, como nos acogieron a nosotros.
Greta Berlin: Queridos lectores italianos. Hemos estado encantados de tener a bordo a Vik y Joe. Son dos activistas maravillosos con un corazón muy grande. Vik se quedó en Gaza para acompañar a los pescadores y ser testigo del acoso que sufren. Joe dio un concierto fantástico que nos llevó a las lágrimas. Fue un honor para nosotros conocerlos. Y luego está el parlamentario italiano del tercer viaje. Nos gustaría que hubiera sitio para un barco lleno de italianos.
Joe Fallisi: Os deseo sinceramente lo mejor, queridas Greta y Mary. ¡Adelante!
Joe Fallisi
Larnaca 9/11/2008
(*) Greta Berlin (USA)
Uno de los fundadores del Movimiento Liberad a Gaza lleva desde los años 60 como defensora del pueblo palestino. Sus dos hijos son palestino/estadounidenses, cuyo padre nació y creció en Safad, Palestina, y fue expulsado en 1948. Como defensora de los derechos de los palestinos, ha relatado lo que presenció en sus tres viajes a la Cisjordania ocupada. Greta trabajó 32 años enseñando a ingenieros y científicos a diseñar y hacer las presentaciones de sus trabajos. Fue herida de bala por los israelíes en julio 2003 mientras intentaba derribar una valla en Anin, a las afueras de Jenin.
(**) Mary Hughes-Thompson (Canadá)
Mary nació en Bolton, Inglaterrra, y emigró a Canadá y luego a los Estados Unidos. Es miembro del gremio de escritores de EE.UU, piloto con licencia de vuelo y abuela orgullosa. Ha viajado a la Cisjordania ocupada seis veces, y su viaje a bordo del Liberad a Gaza fue el séptimo a Cisjordania y primero a Gaza. En 2002, fue agredida y robada por colonos judíos ilegales en Yanoun mientras ayudaba a agricultores palestinos a recoger aceitunas. Mary es unos de los fundadores originales del Movimiento Liberad a Gaza.
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