Los campos de refugiados son una fuente inagotable de historias, pequeñas grandes historias de gente anodina que consiguen aunar lo mejor y lo peor del ser humano en un combate desigual de 60 años de duracion entre la barbarie y la civilizacion, representada la primera por el estado de Israel y la segunda por el […]
Los campos de refugiados son una fuente inagotable de historias, pequeñas grandes historias de gente anodina que consiguen aunar lo mejor y lo peor del ser humano en un combate desigual de 60 años de duracion entre la barbarie y la civilizacion, representada la primera por el estado de Israel y la segunda por el pueblo palestino. Aun sin buscarlo, en cada casa, en cada esquina, en cada estrecha callejuela de los campos de refugiados te asaltan historias, historias de lucha, historias de dolor, historias de valor, historias de sufrimiento, historias de resistencia, historias de grandezas contadas desde la pequenyez de las personas sencillas, contadas con tal naturalidad que las convierten en algo incomensurable. Historias de muerte contadas desde la vida para ser eternas, historias en definitiva sobre la dignidad.
Hemos estado estos dias con destacadas figuras de la politica palestina, viceministros, parlamentarios, portavoces de los diferentes partidos tanto en Cisjordania, como en Gaza, nos hemos entrevistado con gente de organizaciones sociales tanto en los territorios del 67 como en los territorios del 48, y despues de todo el periplo cubriendo todo el territorio de la Palestina historica y contactando con los diferentes estratos y ambitos sociales, una vez mas descubro con una mezcla de carinyo y admiración que es la gente de los campos de refugiados la que mas sigue poniendo en la balanza de la causa palestina, la que mas fuerte sigue apostando, tan fuerte que lo apuesta todo. Y no es que el resto de gente no luche o resista, por supuesto que si, cada uno a su forma y manera, cada uno en su lugar, pero lo de los campos de refugiados es algo increible, totalmente inexplicable e incomprensible para nuestras mentes occidentales, por occidentales y por materialistas.
Un mensaje queda claro y se repite constantemente como una cantinela en todas nuestras visitas a las casas de los campos de refugiados: «mientras quede una mujer que siga teniendo hijos, el pueblo palestino continuara luchando»
Desde diciembre de 1947 a Enero de 1949 el sionismo desposeyo al pueblo palestino de su tierra, de sus casas, de sus granjas, de sus olivos, el 78% del territorio de la Palestina historica fue arrebatado a sus legitimos dueños. Les desestructuraron su vida, les convirtieron en nuevos parias, les arrancaron de raiz, 437 pueblos de un total de 550 fueron total o parcialmente destruidos. El 80% de los y las palestinas fueron convertidos en refugiados en solo 14 meses. De un dia para otro la gente paso de tener su casa,su campo, su mar a ser un sin techo, un expulsado, un problema. Se lo quitaron todo , pero no pudieron arrebatarles su memoria, su derecho inalienable a vivir en su tierra, ni la fuerza necesaria para luchar por ella y eso queda patente en muchas personas, pero especialmente entre los refugiados.
Probablemente debido a que ellos han sido los que mas han sufrido, los mas empobrecidos y los que «menos» tienen que perder, son tambien los que mas fuerte apuestan, ordago a la grande en cada una de sus decisiones, de sus palabras y de sus actos.
Hemos estado con varias familias, pero solo voy a contar dos casos, uno el de la familia Al Mabruq y otro el de la familia Harb.
En 1948 el señor Abu Nasser que en aquel entonces tenia tan solo dos años de edad fue expulsado junto a su familia, la familia AL Mabruq de un pueblecito cerca de Nazaret, donde la familia vivia y se ganaba la vida con los futros que le daba la madre tierra, tierra heredada a sus padres y a los padres de sus padres y asi hasta donde la memoria alcanza. En los alrededores de Nablus Naciones Unidas les ubico, junto a unas quinientas personas mas en un pequenyo espacio de terreno equivalente a 7 campos de futbol (0.045 Km.) denominandole Campo n 1 o AL Ain en donde acondicionaron unas tiendas de campaña para resolver el «problema temporal» consecuencia del exodo palestino provocado por los grupos militares y paramilitares sionistas que sembraron el terror entre la población civil durante los 14 meses desde la aprobación de la resolucion 181 en noviembre de 1947 al armisticio de enero de 1949. El 11 de diciembre de 1948 las Naciones Unidas aprobaron la Resolucion 194 que reconocia el Derecho al Retorno de los Refugiados o su derecho a recibir indemnizaciones por los danyos causados, sin embargo Israel ignoro la resolucion , en lo que seria el inicio de una larga lista de incumplimientos impunes, y el problema temporal se fue agravando convirtiendose en un problema cronico y en una vergüenza para la humanidad, que dura ya 60 años.
Al principio el campo n 1, como el resto de campos carecia de toda infraestructura basica y con el paso de los años la gente empezo a construir alcantarillados, edificios de cemento mas solidos pero muy basicos, les construyeron escuelas y centro de salud y les suministraban los alimentos basicos. La población fue creciendo en los campos, (no en vano el pueblo palestino ostenta un alto indice de natalidad (6.7)) pero estos al ser territorio de naciones unidas tienen limites inextensiles con lo que la densidad demografica alcanza a dia de hoy cifras desorbitadas. Las estructuras se han ido volviendo obsoletas, la gente construye casas una encima de otra sin orden ni concierto para dar un techo a la nueva familia de sus hijos y el espacio ha ido menguando hasta convertir algunas calles en pequeños pasillos por los que tienes que pasar de lado si quieres llegar al otro lado de la calle, la salubridad es insuficiente y la intimidad inexistente. Como me decia un compañero del campo:»aquí no se puede hacer el amor a determinadas horas y aunque lo hagas en silencio los vecinos se acaban enterando»y terminaba bromeando:»este es el gran problema de los campos de refugiados y no otro».Bendito humor palestino que les ayuda a sobrevivir y a nosotros a admirarles mas y mas.
Abu Nasser y su mujer Fatina, a pesar del «problema de los campos» tuvieron 5 hijos y 2 hijas, y aunque no tenian recuerdos nitidos de su puelo, sus padres se encargaron de que no se olvidaran de el. Les contaban historias, sacaban la llave de la casa y dibujaban con un palo sobre la tierra que tanto aman, mapas con la ubicacion de la mezquita, de la casa de Abu Majed, de la familia Khader, la calle principal, el horno,…..Sus hijos e hijas recibieron la misma herencia, la desposesion de una tierra y la posesion de un suenyo, de un sueño y de un derecho.
Uno de sus hijos, Emad, con el paso delos años se convirtió en el lider de las brigadas de Abu ALi Mustafa , el brazo armado del Frente Popular para la Liberacion de Palestina y es que el campo n1 esta poblado mayoritariamente por gente de izquierdas, aunque con mentalidad tradicional, algo que a nosotros con nuestra predisposición a clasificar y a unificar, nos rompe moldes y se nos hace difícil de entender.
Cuando el ejercito israeli va a entrar en el campo o durante una incursión son los hijos de los que llegaron al campo en su tierna infancia los que defienden a sus familias, son ellos los que luchan contra las fuerzas de ocupación, fuerzas de ocupación ilegales e inhumanas, son ellos los que luchan por la libertad de su pueblo.
Un dia lluvioso del invierno de 2005 el ejercito rodeo la casa de Abu Nasser buscaban a su hijo Emad. Entraron en la casa y sacaron a toda la familia de sus habitaciones, como no le encontraron les sacaron a la calle en pijama teniendoles de pie bajo la lluvia mientras les preguntaban por su paradero. En un momento dado cogieron a Abu Nasser y lo metieron en el cuarto de banyo, le apuntaron el M16 a la cabeza mientras le exigian que delatara a su propio hijo. De repente se escucho una ráfaga de disparos, UN SOLDADO APARECIO EN EL BAÑO Y tras decirle algo al oido a su oficial se marcho, entonces el oficial le dijo a Abu Nasser : quieres saber donde esta Emad? Le subieron al tejado de su casa y alli vio como su hijo todavía en pijama y cubierto con una gruesa chaqueta verde agujereada por 72 balas yacia en un charco de sangre.
Hace cuatro dias el ejercito volvio a su casa, se llevo detenidos a todos los hombres, les pusieron una venda en los ojos, las esposas de plastico en las munyecas y estas cruzadas en la espalda, al padre debido a su edad accedieron a atarle las manos por delante del tronco y se los llevaron al centro de detencion de una colonia proxima..A los dos dias todos menos uno de los hijos, Jihad, eran puestos en libertad. Al tercer dia Ayman, el hijo que llevaba cuatro años y medio preso era liberado. La razon de esta maquiavelica sinrazon: que esta familia no pueda disfrutar de una minima tranquilidad, les liberan a un hijo y le meten casi el mismo dia a otro en prision.
Maldad, no se me ocurre otra palabra.
La otra historia es mas antigua pero a mi no deja de impresionarme, quiza sea por la fuerza y expresividad que posee el padre cuando habla que te tiene anonadada mirandole a sus arrugados ojos azules comprendiendo todo, sin entender una palabra. Este año no nos conto su historia familiar, se dedico a decirnos lo cansado que esta del mundo, lo hipócrita de la politica internacional y nuestra ineficacia a la hora de actuar, algo que puede dolernos pero que no le podemos rebatir. Un discurso inteligente que denotaba, comprensible y compartidamente, hastio, descredito y asco hacia la politica mundial.
Esta es la historia de la familia Harb: La familia Harb llego a Nablus en 1948 huyendo de la destrucción de su pueblo Misqi, en los alrededores de Tel Aviv, por las tropas sionistas. En 1950 Naciones Unidas por medio de su agencia para los refugiados les asento en el campo de Balata. El campo de refugiados de Balata es una extensión de terreno de un cuarto de Kilometro cuadrado aproximadamente (0.252 Km2) en el que comenzaron viviendo unos centenares de personas y en donde a dia de hoy se hacinan unas 22.000 personas en condiciones infrahumanas similares a las descritas para el campo de Al Ain. Aquí, Mohamed Harb se caso y tuvieron 9 hijos y 4 hijas. En el peor periodo de las incursiones de la II intifada, en 2002, su hijo Khalil fue asesinado de un disparo por la espalda del ejercito israeli cuando estaba labrando las tierras de un vecino, su hermano Iad, estaba delante y nada pudo hacer por detener la hemorragia y evitar que muriera. Desde ese dia, según cuenta su padre, Iad, no fue el mismo, no solia sonreir y ya no queria estudiar, ni estar en la calle con sus amigos, todo le daba igual. Una tarde de la primavera de 2003 Iad salio de casa para, como cada manyana, ir a clase, pero esta vez sus pasos se dirigian a Tel Aviv. Tenia 17 años.
El contacto que tenia que recogerle en la frontera del 67 no aparecio y después de un rato de espera decidio volver a su casa. Al llegar al checkpoint entre Qalqilia y Nablus, los soldados le pararon y le obligaron a levantarse la camisa, el pregunto la razon asegurando que no llevaba nada, ante los gritos mas soldados se acercaron y en ese momento una fuerte explosion descuartizo el cuerpo de Iad que llevaba un anyo muerto llevandose por delante a cuatro soldados e hiriendo a otros dos.
No se que porcentaje hay de venganza en estas acciones, supongo que solo la persona que lo lleva a cabo lo sabe, lo que cada vez tengo mas claro es que es la desesperanza mas absoluta y aniquiladora la que esta detrás de cada una de estas acciones, desde la de Iad a la de la abuela de Gaza Fatima Najar, que con 9 hijos y 41 nietos, una verdadera hacedora de vida, no quiso seguir viviendo otra masacre como la de Beit Hanoun, poniendo fin a su vida de una forma que, soy consciente de que la mayoría de las personas occidentales y acomodados jamas van a entender. Otra impresión ya convertida en certeza tras estudiar algunos de estos casos, es que la razon primera y ultima que empuja a estas personas a la inmolacion es la ocupación.
Mohamed Harb nos dijo que sus hijos no eran mas importantes que los hijos de otros vecinos o amigos asesinados también por Israel, nos dijo que las persona van y vienen, pero que la tierra permanece. Supongo que para nosotros, personas desarraigadas y alejadas de ama lurra, de pacha mama, de la madre tierra, este concepto resulta tambien incomprensible, pero para esta gente la tierra es una prolongación de sus vidas, es mucho mas que el suelo que pisan, y su confiscación, expropiación, robo, supone una enorme tragedia, porque les arrebatan una parte de su esencia, una parte de su ser.