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Investigar la redada en el centro de detención Sde Teman y las violaciones de derechos humanos contra los detenidos de Gaza

Fuentes: Rebelión

El 29 de julio de 2024, la policía militar de la ocupación israelí realizó una redada en el centro militar de Sde Teman y detuvo a soldados acusados de agredir sexualmente de forma brutal a un prisionero de Gaza. Según los informes, el detenido presentaba graves signos de haber sido violado con instrumentos de tortura afilados. Los abogados han documentado numerosos casos de tortura y violencia sexual contra detenidos de Gaza, los cuales revelan un sombrío patrón de abusos en el centro militar de Sde Teman.  

A pesar de estos casos bien documentados, el 99% de las investigaciones sobre torturas y abusos de las Fuerzas de Ocupación Israelíes (FOI) contra las personas palestinas detenidas no avanzan, por lo que no hay rendición de cuentas ni consecuencias para los autores. Esta persistente falta de justicia pone de manifiesto la impunidad sistémica en el seno de las FOI, lo que permite que violaciones tan atroces continúen sin control.  

Los abogados han documentado numerosos casos en los que las FOI realizaron cacheos corporales excesivos a detenidos de Gaza. Durante estos cacheos, los detenidos fueron obligados a adoptar posturas humillantes y se usó detectores de metales en sus zonas íntimas, mientras los soldados se burlaban de los detenidos, los maltrataban verbalmente con constantes insultos y los obligaban a insultarse a sí mismos.  

Numerosas organizaciones de derechos humanos, entre ellas Addameer, han estado documentando las torturas, los malos tratos y las violaciones de derechos humanos contra detenidos gazatíes desde el comienzo del genocidio en Gaza. Las organizaciones han registrado meticulosamente casos de abusos físicos y psicológicos, y han aportado pruebas decisivas de los malos tratos y la tortura sistemática que se producen en centros de detención como Sde Teman. Los informes ponen de relieve la gravedad y la magnitud de las violaciones, y subrayan la urgente necesidad de intervención internacional y rendición de cuentas para hacer frente a estos continuos abusos contra los derechos humanos.   

A los detenidos de Gaza se les mantiene en estos centros en dolorosas posturas de estrés y se les somete a tratos degradantes; un número significativo de ellos continuaba en Sde Teiman durante esta inspección. A los detenidos se les ata las manos con precintos y se les venda los ojos, lo que los hace vulnerables a los ataques y les impide defenderse durante la redada y en caso de que la situación se agrave más de lo habitual. Los detenidos son obligados a permanecer durante periodos prolongados arrodillados, con la espalda doblada y la cabeza gacha durante los traslados, mientras esperan su turno con los abogados y en las jaulas o celdas donde se encuentran. Además, durante los recuentos, los detenidos deben permanecer tumbados boca abajo hasta que se completa el recuento de todo el centro. Se les prohíbe mantener contacto visual con los soldados y deben pedir permiso para hablar.  

Las organizaciones palestinas de derechos humanos no tienen forma de confirmar el número exacto de muertes de detenidos debido al acceso restringido y a la falta de transparencia de las autoridades de la ocupación.  

Los colonos israelíes que interfirieron en los esfuerzos de la policía militar de la ocupación por detener a los responsables de las torturas deben ser castigados legalmente y rendir cuentas de sus actos.   

Addameer pide una intervención internacional inmediata para garantizar la rendición de cuentas y el trato humano de todas las personas detenidas. Pedimos urgentemente una investigación internacional clara y exhaustiva por parte del fiscal de la Corte Penal Internacional sobre los abusos sistemáticos y las violaciones de derechos humanos cometidas contra los detenidos de Gaza. Esta investigación debe abordar exhaustivamente los casos documentados de tortura, violencia sexual y trato degradante, y debe garantizar que los responsables rindan cuentas. La incapacidad del sistema de justicia israelí para hacer rendir cuentas a los responsables, puesta de manifiesto por las recientes conclusiones de la Corte Internacional de Justicia sobre el régimen de apartheid, subraya la necesidad de una intervención internacional para defender la justicia y los derechos humanos.