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La estrategia colonial española en el Sáhara Occidental

Fuentes: Rebelión

«Sabemos que para defender determinados intereses se hace necesario repetir con insistencia algunas ideas clave para sostenerlos -los intereses- hasta convertirlas en verdad aparentemente objetiva, aun a sabiendas de que pueda darse la posibilidad de demostrar que son una falacia -las ideas-, así como los argumentos que las sustentan» 2. Comprobamos con estupor como determinados […]

«Sabemos que para defender determinados intereses se hace necesario repetir con insistencia algunas ideas clave para sostenerlos -los intereses- hasta convertirlas en verdad aparentemente objetiva, aun a sabiendas de que pueda darse la posibilidad de demostrar que son una falacia -las ideas-, así como los argumentos que las sustentan» 2.

Comprobamos con estupor como determinados medios de información están dando pábulo y sostén a toda una sarta de tergiversaciones, acusaciones y mentiras sobre el Sahara occidental y el pueblo saharaui que hace sentir vergüenza ajena por la catadura ética de quienes escriben bajo el dictado del crisol donde se siguen fraguando los intereses económicos de la más rancia política colonial española, esta vez con el mismo tóxico barniz ideológico usado para justificar, por ejemplo, lo que está pasando en Guantánamo.

Nos parece de extrema gravedad que el Estado español entre al trapo tan torpemente en una serie de acciones sobre política exterior que, por los datos y las informaciones de que disponemos en estos momentos, pueda situarnos frente a un futuro de tensiones y conflictos en África como protagonistas directos.

Con todo lujo de detalles el seis de febrero pasado el periódico El País nos informaba de la venta al reino de Marruecos de 1200 blindados, -que pueden equiparse con ametralladoras, misiles anticarro o lanzagranadas- 800 camiones militares y 10 embarcaciones patrulleras. Es decir, recibiremos 200 millones de euros para que el ejército y la policía marroquí pueda defender a su estado de los enemigos. Pero, ¿Quiénes son esos enemigos? Parece ser que el pueblo saharaui como vemos que intentan burdamente demostrar; porque además Rabat siempre ha sido un buen cliente y no debemos quedar mal con la monarquía vecina, no estaría comercialmente bien visto negarles la venta, digamos, de ‘material militar’, sería política e internacionalmente incorrecto.

Pero como los saharauis saben recordar muy bien a todo el mundo que ellos son las víctimas de la ilegalidad internacional, por eso hay que justificar a través todos los medios posibles que la transacción comercial-político-militar- es adecuada y correcta: esa es la tarea polito-lógica encomendada a algunos expertos en el mundo árabe y periodistas a los cuales parece no preocuparles, pongamos por caso, que más de setenta periodistas hayan muerto ya en suelo iraquí; porque claro, el mundo árabe debe seguir siendo para el imaginario occidental ese ‘otro’ desconocido y temible, ha de seguir estando fuera de nuestras fronteras físicas y mentales para que nosotros podamos seguir manteniendo esa falsa identidad de europeos clónicos sin historia ni pasado… colonial en la propia Europa, África, Asia y América.

A nuestros gobiernos se les hace necesario seguir manteniéndonos aquí dominados por el ‘miedo al árabe’ para que el común de las gentes se vaya convenciendo poco a poco de que el pueblo saharaui es el ‘enemigo natural’ del marroquí, porque si bien hasta ahora ha demostrado no ser ‘terrorista’, ‘sospechamos’ pueda llegar a serlo, como es árabe… pues mejor es tener aliados -marroquíes de momento- en la zona y si es bajo la dependencia de nuestro mercado exterior de armamento, mucho mejor. Y este caldo gordo lo hacen personas de supuesto prestigio en este momento tan sensible y tan doloroso, sobre todo para los familiares de las víctimas del atentado del 11 de marzo a cuyos supuestos culpables se está procediendo a juzgar.

En este globalizado mundo donde parece que sólo habita el ‘terror islámico’, -idea a la que nosotros oponemos la de terrorismo imperialista de alta intensidad contra los pueblos de la Tierra- según ‘un experto’ parece ser que ya no quedan legítimos representantes de ningún pueblo, luego el Frente POLISARIO si no es legítimo es… terrorista. Es el mismo argumento utilizado por los thinks tanks estadounidenses ‘expertos’ en hacer real la mentira de la existencia de armamento nuclear en Iraq. Así los thinks tanks de ‘expertos’ españoles en todo tipo de africanismos lanzan mentiras fundamentadas en la ocultación de sus intereses, es decir, estos ‘tanques del pensamiento’ que saliendo de los cuarteles, perdón, las universidades, los consejos de administración de los periódicos, las fundaciones sin ánimo de lucro o con ánimo de él y todo un sin fin de organismos cuyas acciones debiendo ser a-partidistas y neutrales acaban siendo partidarias directa o indirectamente de la guerra, defensoras de la parte de los euros invertidos en estudios, investigaciones, publicaciones que, en definitiva, esperan ver recompensada su inversión en la suficiente cantidad de miedo que cosechen de nosotros y nosotras. Eso dicen ahora que dicen las encuestas: nuestra mayor preocupación es el terrorismo.

Siguiendo con el argumento empleado para intentar robarle al pueblo saharaui toda posibilidad de representatividad y de existencia, se nos ocurre que dada la incontestable vulneración de los derechos humanos en el Estado marroquí, especialmente en los territorios ocupados del Sahara occidental, y que a los campamentos de refugiados, sí, de refugiados, no les llega la ayuda humanitaria, se pretenda realmente una extensión de la ofensiva imperial-colonialista europea en territorio africano con el fin de poner orden allí donde parece que las estrategias políticas locales favorecen la desintegración de los estados y la masiva inmigración a causa de la miseria y el empobrecimiento humanos más grande que ha visto nuestra especie hasta la fecha.

El argumento de la superioridad étnica occidental frente a las demás, lejos de irse transformado hacia una mejor comprensión de la pluralidad de las sociedades y las culturas, parece revolverse en su agónica enfermedad de etnocentrismo depredador buscando solución en el pasado a sus males, y porque no es capaz de ver su rostro proyectado en el futuro se ve obligada a verse nuevamente reflejada en el rostro del colonialismo, del neo-colonialismo. Por eso incomoda tanto a tantos que se dé una lucha popular cuyo elemento central sea su cohesión ideológica, nacional, junto a un sentido propio de identidad en construcción permanente y una lucha sostenida en el tiempo durante tanto tiempo. La apuesta por armar y apoyar al Estado marroquí no tiene más significación que esta. El intento de legitimación del abuso por la puerta falsa e ilegítima de convertir al Sahara occidental en una autonomía de Marruecos es una clara constatación de no permitir que ningún pueblo, que el saharaui, pueda demostrar a las claras que puede gobernarse a sí mismo. Esa es la lucha saharaui, esa es, o debería ser, también nuestra lucha.

Propuestas del Gobierno de la República Árabe Saharaui Democrática para la solución pacífica no faltan. Lo que sí echamos en falta son propuestas y acciones reales por parte del Gobierno español para intentar, al menos, empujar la historia de nuestros pueblos hacia donde debería: la paz. Nuestra herencia colonial en África, herencia franquista, ha de quedar en el pasado, pero correctamente escrita para bien de toda la humanidad. En este veintisiete de febrero de 2007 estamos convencidos que los pueblos del Estado español se sentirían muy felices si vieran publicado en la prensa y en el Boletín Oficial del Estado el siguiente texto:

DECLARACIÓN DE PRINCIPIOS ENTRE ESPAÑA Y LA REPÚBLICA ÁRABE SAHARAUI DEMOCRÁTICA 3

«Acuerdo de Tifariti» En Tifariti, a 27 de febrero de 2007 y reunidas las delegaciones que legítimamente representan a los Gobiernos de España y de la República Árabe Saharaui Democrática, se manifiestan de acuerdo en orden a los siguientes principios: 1º) España ratifica su resolución de descolonizar conforme a Ley el territorio del Sahara occidental poniendo término a las responsabilidades y poderes que tiene sobre dicho territorio como Potencia Administradora. 2º) Invalidar a todos los efectos los acuerdos de Madrid de 14 de noviembre de 1975 firmados por el Gobierno español con Marruecos y Mauritania, contrarios a la legalidad internacional en materia de autodeterminación de los pueblos. 3º) De conformidad con la anterior determinación y de acuerdo con las negociaciones propugnadas por las Naciones Unidas con las partes afectadas, España procederá al cumplimiento de la Resolución 1514 de Naciones Unidas conforme establece el artículo 93 del capítulo III De los Tratados Internacionales de la Constitución Española, correspondiendo al Gobierno la garantía del cumplimiento de dicha Resolución en los términos y procedimientos establecidos en la legalidad internacional. 4º) Ambos países informarán al Secretario General de las Naciones Unidas de lo establecido en esta declaración de principios con el fin de remover todos los obstáculos que impiden la celebración del Referéndum en el Sahara occidental. 5º) España y la República Árabe Saharaui Democrática declaran haber llegado a las anteriores conclusiones con el mejor espíritu de comprensión, hermandad y respeto a los principios de la Carta de las Naciones Unidas, y como la mejor contribución al mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales. Lamentamos profundamente la ausencia de representante del Gobierno español en la conmemoración del 31 aniversario de la proclamación de la RADS. Es una lástima que el ninguneo hacia el pueblo saharaui se haya convertido en la norma de los asuntos exteriores en nuestro país. Es doloroso, un año más, seguir viendo cómo la desmemoria histórica y los espurios intereses comerciales nos alejan del futuro y nos acercan a un pasado de horrible faz: aquel que nos asoló durante cuarenta años costándole la vida a tantas y tantos trabajadores que lucharon por la libertad, el pan, contra la opresión y el fascismo. Sin embargo también nos sentimos muy alegres porque allí si que estuvo representado una parte de nosotros a través de las Asociaciones solidarias con el Sahara. Allí estuvimos también quienes sabemos a ciencia cierta que

Un beso solamente un beso separa la boca de África de los labios de Europa.4

1. La autora es miembro del Club de Amigos de la UNESCO de Madrid.

2.Del artículo: «Las argucias del colonialismo español en el Sahara occidental». Fuente http://www.rebelion.org/noticia.php?id=45475

3 Esta declaración se ha inspirado en la siguiente: DECLARACIÓN DE PRINCIPIOS ENTRE ESPAÑA, MARRUECOS Y MAURITANIA SOBRE EL SAHARA OCCIDENTAL [Fuente: «United Nations Treaty Series» ] Inoficialmente «Acuerdo tripartito de Madrid» o «Acuerdo de Madrid» En Madrid, a 14 de noviembre de 1975 y reunidas las delegaciones que legítimamente representan a los Gobiernos de España, Marruecos y Mauritania, se manifiestan de acuerdo en orden a los siguientes principios:

1º) España ratifica su resolución -reiteradamente manifestada ante la ONU- de descolonizar el territorio del Sahara occidental poniendo término a las responsabilidades y poderes que tiene sobre dicho territorio como Potencia Administradora.

2º) De conformidad con la anterior determinación y de acuerdo con las negociaciones propugnadas por las Naciones Unidas con las partes afectadas, España procederá de inmediato a instituir una Administración temporal en el territorio en la que participarán Marruecos y Mauritania en colaboración con la Yemaá y a la cual serán transmitidas las responsabilidades y poderes a que se refiere el párrafo anterior. En su consecuencia, se acuerda designar a dos Gobernadores Adjuntos, a propuesta de Marruecos y Mauritania, a fin de que auxilien en sus funciones al Gobernador General del territorio. La terminación de la presencia española en el territorio se llevará a efecto definitivamente, antes del 28 de febrero de 1976.

3º) Será respetada la opinión de la población saharaui, expresada a través de la Yemaá.

4º) Los tres países informarán al Secretario General de las Naciones Unidas de lo establecido en el presente documento como resultado de las negociaciones celebradas de conformidad con el artículo 33 de la Carta de las Naciones Unidas.

5º) Los tres países intervinientes declaran haber llegado a las anteriores conclusiones con el mejor espíritu de comprensión, hermandad y respeto a los principios de la Carta de las Naciones Unidas, y como la mejor contribución al mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales.

6º) Este documento entrará en vigor el mismo día en que se publique en el Boletín Oficial del Estado la «Ley de Descolonización del Sahara», que autoriza al Gobierno español para adquirir los compromisos que condicionalmente se contienen en este documento.