Traducido para Rebelión por J. M. y revisado por Caty R.
¿Se niega Israel a conceder derechos igualitarios a los ciudadanos palestinos del Estado porque se basa en una ideología racista respecto a las personas que no son judíos? ¿O es que Israel se niega a conceder los mismos derechos a los ciudadanos palestinos porque que algunos de ellos se oponen a la naturaleza judía del Estado sectario y se da prioridad a la seguridad del Estado sobre la igualdad racial?
Aunque este debate se ha prolongado durante décadas, la nueva evidencia sacó a la luz lo que parece sugerir que el primer argumento es el más acertado. Porque si los israelíes judíos solo son antagónicos de los ciudadanos palestinos porque supuestamente representan riesgos de seguridad, entonces ¿por qué también desprecian a los africanos subsaharianos, con los que nunca han tenido ningún conflicto?
Alrededor de 60.000 personas procedentes de países subsaharianos africanos han emigrado a Israel en los últimos años huyendo de la persecución y solicitaron asilo . En lugar de prestarles ayuda o trabajo que les permita ganarse la vida, el gobierno israelí se niega a conceder ningún derecho, les obliga a la pobreza extrema y trata de deportar a gran cantidad de ellos.
Aunque Israel es una superpotencia regional, tiene la segunda tasa de pobreza más alta de los países desarrollados. Después de los levantamientos de la primavera árabe del año pasado, cientos de miles de israelíes salieron a las calles para exigir un mejor nivel de vida. En respuesta, los funcionarios públicos tomaron a los africanos como chivos expiatorios de los problemas económicos de Israel y puso en marcha una campaña racista para expulsarlos.
Si ha de haber justicia, estos líderes deben ser llevados a juicio para que respondan por sus crímenes. Tal vez los israelíes entren en razón, cancelen todas las leyes que discriminan a los solicitantes de asilo africanos y exijan una comisión de verdad y reconciliación. Lamentablemente, esto es poco probable que suceda en un futuro próximo, porque el odio a los africanos solicitantes de asilo se ha extendido demasiado en Israel.
Tal vez los pueblos de Eritrea y Sudán eventualmente derroquen sus regímenes represivos, instalen gobiernos democráticos y denuncien a dichos funcionarios israelíes ante un tribunal internacional de justicia.
Hasta que ese día llegue -si llega- es importante documentar la evidencia del crimen De hecho, esta es una tarea fácil. Dado que estos funcionarios no se avergüenzan de su racismo, todo es un asunto de interés público. De los más responsables, esta es la sucia docena de Israel, su eje de racismo:
12. Chaim Avitan
En julio de 2007, sólo había un puñado de africanos que buscaban asilo en el país. En ese momento, un grupo de aproximadamente 20 sobrevivientes del genocidio de Darfur, en el oeste de Sudán, estaban legalmente viviendo y trabajando en un huerto perteneciente a un moshav, un pequeño asentamiento agrícola, cerca de los límites de la ciudad de Hadera.
Una propuesta del ayuntamiento de Hadera de abrir un centro de absorción en esa ciudad para estos migrantes fue abatida por el alcalde Chaim Avitan. Avitan entonces forjó una orden de desalojo y envió un equipo de seguridad en medio de la noche para agredir a los refugiados de Darfur, destruir sus documentos, empujarlos a los autobuses y echarlos fuera de la ciudad (Queja presentada contra el alcalde Hadera para expulsar a los refugiados, Ynet, 7 de agosto de 2007).
Avitan anunció que la ciudad no era «el tacho de basura del país «, exhortó al gobierno a no conceder el estatuto de refugiado a alguien que no es judío y destacó que «Hadera no permitirá la entrada de un solo sudanés». Hadera está hermanada con Big Spring, Texas (5% por ciento afroestadounidenses), Saint Paul, Minnesota (14% afroestadounidenses) y Charlotte, en Carolina del Norte (35% afroestadounidenses).
11. Benjamín Babayof
En julio de 2010, decenas de rabinos en Tel Aviv emitieron un edicto religioso prohibiendo a los judíos de alquilar apartamentos a los solicitantes de asilo africanos. El lenguaje de la carta incluía advertencias contra de los matrimonios interraciales y referencias a pasajes bíblicos que piden la limpieza étnica de todos los no judíos de la «tierra de Israel».
Esta iniciativa fue un éxito tan grande que antes de que terminara el año cientos de rabinos líderes de todo Israel (que también cobran sus sueldos de las arcas públicas) emitieron un edicto similar aplicable a todo el país. El cerebro detrás del edicto, el hombre que fue de rabino en rabino recolectando firmas, argumentando que la presencia de africanos en Israel es una «abominación», fue el concejal de la ciudad de Tel Aviv en representación del partido Shas, Benjamín Babayof (corredores de bienes raíces del sur de Tel Aviv: no queremos alquilar a «infiltrados «, The Jerusalem Post , 4 de agosto de 2010).
Ese mismo año, los editores de viajes de Lonely Planet calificaron Tel Aviv la tercera mejor ciudad en el mundo.
Babayof continuó su cruzada antiafricana en febrero de 2012, apelando al Ministerio de Transporte para crear líneas de autobuses segregados para los africanos o, en última instancia, prevenirles de que suban a las líneas regulares de autobuses durante las horas pico, porque «huelen mal».
10. Yaakov Asher
Semanas después de que se emitiera el original edicto de los rabinos, la guerra santa contra los solicitantes de asilo africanos se expandió desde Tel Aviv a sus alrededores.
En agosto de 2010, el Rabino Yaakov Asher, alcalde Bnei Brak, ciudad satélite de Tel Aviv, se reunió con el ministro de Seguridad Pública y el comandante de la policía regional para discutir la expulsión de la población africana.
Cuando explicaron a Asher que no había base legal para evitar que los solicitantes de asilo africanos se desplacen a Bnei Brak, el portavoz de Asher anunció que el municipio usaría el código de infracciones de las propiedades como excusa para enviar a los africanos fuera de la ciudad.
Cuando llegó el invierno, el municipio cumplió su promesa, informando a los solicitantes de asilo de que tendrían que abandonar sus viviendas inmediatamente. Cuando un hombre africano llevó su contrato de alquiler legal al ayuntamiento y quiso saber sobre qué base le iban a desalojar, le dijeron que porque no era judío.
Muchos solicitantes de asilo africanos ni siquiera recibieron por cortesía un aviso de desalojo antes de que les cortaran el agua y la electricidad de forma sumaria. Sin alguna forma de mantener las casas caldeadas, los solicitantes de asilo se congelaron y los echaron de sus viviendas a las calles en medio del invierno ( eritreos dicen que hay una campaña en Bnei Brak campaña para echarlos fuera de la ciudad , The Jerusalem Post , 1 de diciembre de 2010).
Mientras este funcionario todavía sirve como alcalde en Bnei Brak, Asher también está en el séptimo lugar de la lista del partido United Torah Judaism para las próximas elecciones al parlamento israelí, la Knesset . El partido tiene cinco escaños en la Knesset actual.
9. Meir Itzjak Halevy
En 2007, los solicitantes de asilo africanos empezaron a trasladarse a Eila, a invitación del ente de hospitalidad local. Encontraron trabajo lavando platos y realizando otras tareas menores por bajos salarios. Dado que los hoteleros expresaron su satisfacción por este nuevo acuerdo, y como el turismo es la única industria importante en Eilat, muchos más africanos solicitantes de asilo se mudaron a la ciudad. Ahora suman alrededor de 10.000 habitantes, aproximadamente el 12% de la población de Eilat.
En enero de 2011, Meir Yitzhak Halevi, alcalde de Eilat, dijo que los solicitantes de asilo africanos venían a conquistar Eilat y anunció que la ciudad estaba en guerra con ellos. El municipio pagó pancartas con consignas contra los africanos que se pegaron en la ciudad y banderas rojas para colgar en toda la ciudad ( Eilat exige una acción gubernamental contra los trabajadores migrantes , The Jerusalem Post , 13 de enero de 2011). En abril de 2012, Halevi dijo que todos los africanos se habrán ido en dos años.
Durante años, Halevi se negó a permitir que los hijos de los solicitantes de asilo africanos asistieran a escuelas locales, por lo que languidecían en un improvisado centro de actividades a cargo de voluntarios simpatizantes. Fue sólo después de que interviniera el Tribunal Supremo israelí y declarase ilegal la política de segregación de Eilat cuando permitieron a los hijos de los solicitantes de asilo matricularse en septiembre de 2012. Eilat está hermanada con Los Angeles , California (10% afroestadounidenses).
8. Amnón Yitzhak
Un predicador muy popular, Amnon Yitzhak, viaja por todo Israel transformando a judíos seculares y tradicionales al judaísmo fundamentalista. Eilat está considerada un bastión secular, pero Yitzhak atravesó su cultura dividiéndola mediante la infusión de su mensaje religioso con rabioso antirracismo africano.
En febrero de 2012 dijo en una audiencia en Eilat que la piel oscura del pueblo sudanés es un castigo de Yahvé, el dios del judaísmo . Además les compara con monos, diciendo que si una mujer judía sale con un hombre sudanés acabará en África «trepada a los árboles y comiendo plátanos» ( El cáncer en nuestro cuerpo: en la incitación al racismo, la discriminació n y el odio cri minal contra africanos solicitantes de asilo en Israel , Hotline for Migrant Workers , enero-junio de 2012 [PDF]).
Durante las últimas semanas, Yitzhak fundó un nuevo partido político, Poder para Influenciar, y ahora es candidato a la Knesset. Es demasiado pronto para estimar cuántas bancas puede acumular, pero ya sea dentro de la Knesset o fuera, ejerce una influencia tremenda.
7. Ben-Dror Yemini
En lugar de utilizar un léxico neutro para describir a los solicitantes de asilo africanos, la mayoría de los medios de comunicación israelíes han adoptado acríticamente el lenguaje peyorativo que utilizan los funcionarios del gobierno hostiles a su presencia para describirlos.
Pero el principal periodista que difundió más mentiras sobre los solicitantes de asilo africanos con el fin de avivar los temores e incitar al odio hacia ellos es el editor de la página de opinión del diario popular Maariv , Ben-Dror Yemini.
Algunos países occidentales conceden el estatuto de refugiado al 80% o 90% de los solicitantes de asilo de África Occidental. Pero en diciembre de 2011, justo antes de que esta Knesset dominada por la derecha votara a favor de criminalizar a los solicitantes de asilo, Yemini proporcionó la munición ideológica para hacerlo imprimiendo la vil mentira de que no son refugiados, sino migrantes laborales.
Un informe oficial de la Knesset de mayo de 2012 declaró que la proporción de solicitantes de asilo de toda la población de Israel es baja en comparación con los países occidentales. Pero unos días después Yemini publicó una columna diciendo que Israel pronto tendría la mayor parte de los solicitantes de asilo de cualquier país del mundo.
Tzipi Livni , exministra de Relaciones Exteriores de Israel, ofreció recientemente a Yemini un lugar prominente en la lista del Movimiento Partidario para las elecciones a la Knneset. Acepte la oferta o no, el simple hecho de que le invitaran es un testimonio de su amplia influencia.
6. Michael Ben-Ari
Aunque vive en un asentamiento israelí en Cisjordania, Michael Ben-Ari abrió una oficina parlamentaria en el sur de Tel Aviv, donde viven más de la mitad de los africanos en Israel, con el fin de movilizar a los residentes que se oponen a su presencia.
Mientras otros políticos presentan quejas sólo por visitar la zona y se rodean de guardaespaldas cuando finalmente llegan, el carismático Ben-Ari confiadamente conduce a la comunidad en la lucha contra africanos efectuando marchas callejeras . También ha establecido un barrio antiafricano con una guardia de custodia allí, ganándose la admiración de los habitantes.
Ben-Ari también ha pedido a los soldados israelíes que maten a sangre fría a cualquier persona africana que se acerque a la frontera para pedir asilo político. Irónicamente, cuando lo entrevisté en el verano de 2010, admitió que Israel fue responsable de la masacre masiva en África, ya que exporta armas a África con fines de lucro.
A Ben-Ari le negaron la entrada en Estados Unidos en febrero de 2012, porque era un miembro de la organización del difunto rabino Meir Kahane, Kach, considerado un grupo terrorista judío por el Departamento de Estado .
En la Knesset actual, pertenece a la Unión Nacional, el único partido que era considerado demasiado derechista por la coalición gobernante. Para las próximas elecciones ha creado nuevo partido llamado Fuerza Para Israel que se espera pase el umbral mínimo de representación en la Knesset. Ben-Ari puede ser un extraño por no vivir en el lugar, pero está arrastrando a todo el espectro político de la derecha.
5. Miri Regev
El 23 de mayo de 2012, unos 1.000 judíos israelíes montaron durante horas un mitin descontrolado lo largo de Tel Aviv, atacando a cualquier persona de piel oscura que encontraron y sus propiedades. Iniciaron su campaña de terror tras ser arrastrados en un frenesí por los miembros de la Knesset.
Uno de esos parlamentarios cuyos comentarios fueron más incendiarios fue Miri Regev , una diputada del partido de gobierno principal, el Likud . Dijo a la multitud reunida que los solicitantes de asilo africanos eran «un cáncer en el cuerpo» de la nación. Tras la noticia de sus comentarios racistas y el pogromo que siguió, publicado al día siguiente, recurrió a YouTube para hacer una disculpa pública -pero no a los africanos por haberlos calificado de cáncer- sino más bien a las víctimas israelíes del cáncer por minimizar su sufrimiento comparándolo con los africanos ( MK israelí: Yo no tenía la intención de deshonrar el Holocausto calificando de cáncer a los inmigrantes africanos , Haaretz , 27 de mayo de 2012).
Una encuesta profesional realizada apenas unos días después del pogromo confirmó que el 52% ciento de los israelíes judíos se identificaron con el argumento de que los africanos son como el cáncer, y el 33% de los israelíes judíos se identificaron con la violencia desatada contra los migrantes.
Aunque la lista del Likud para las próximas elecciones aún debe combinarse con la de su socio de coalición, Yisrael Beiteinu , Regev ya se ha perfilado como de las primeras figuras, moviéndose desde el número 26 hasta el número 13 por la fuerza de estas y otras declaraciones racistas.
4. Ron Huldai
El día después del pogromo, el alcalde de Tel Aviv Ron Huldai lanzó la «carta a los alcaldes», recogiendo sus compromisos de apoyo, al igual que Babayof, el concejal de la ciudad que lanzó la «carta a los rabinos» contra los africanos para obtener su apoyo.
La carta, apoyada por los alcaldes de Ashdod , Bnei Brak, Ashkelon , Petach Tikvah y Eilat, pidió que los africanos solicitantes de asilo sean encarcelados o deportados ( Un día después de las violentas protestas contra los africanos, el parlamentario del Likud llama a ‘ distanciar a los infiltrados ‘ inmediatamente , Haaretz , 24 de mayo de 2012).
Si hay aproximadamente 25.000 a 30.000 solicitantes de asilo africanos en Tel Aviv, entonces el llamado de Huldai a hacer una cacería para echar a los solicitantes de asilo africanos representa una limpieza étnica de entre el 6% y el 8% de la población de la ciudad.
Huldai seguramente no es el único alcalde en el mundo que ha llamado a la limpieza étnica de una parte de sus residentes. Pero es probablemente el único alcalde que lo hace el mismo año en que una organización patrocinada por un movimiento gay distinguió a su pueblo como la » mejor ciuda d gay » del mundo. Tel Aviv está hermanada con la ciudad de Nueva York (25% afroestadounidenses).
3. Yossi Edelstein
El título oficial Edelstein es director de la Unidad de Ejecución del Ministerio del Interior para la Población de Trabajadores, fundada en 2009. En pocas palabras, es directamente responsable de la unidad de Oz, los agentes de seguridad que tienen la tarea de acosar físicamente y arrestar a los solicitantes de asilo africanos.
Es de esperar que los agentes del Estado que tienen el monopolio del uso de la violencia ejerzan ese poder con mucho cuidado y con el menor perjuicio posible. Lamentablemente, parece que los agentes de Oz no tienen instrucciones de tratar a la gente de África con el respeto que merece, sino exactamente lo contrario.
Incluso cuando los africanos en cuestión son judíos, pueden ser sometidos a niveles alarmantes de abuso físico y emocional. En octubre de 2010, la unidad de Oz golpeó brutalmente a una familia entera de afroestadounidenses que se convirtieron al judaísmo y viven legalmente en el país, entre ellos a una mujer embarazada de siete meses, su madre y su hija de un año.
Mientras los golpeaban, los oficiales de la unidad Oz gritaban: ¡»niggers, no los necesitamos aquí!» ( La unidad de la policía Oz del Ministerio del Interior acusada de golpear a i nmigrantes de Estados Unidos «, Haaretz , 21 de octubre de 2010).
Edelstein dejó claros sus verdaderos sentimientos por los solicitantes de asilo africanos en una reunión informativa a los oficiales de seguridad en julio de 2012. Cuando le preguntaron qué hacer en caso de que una mujer africana empezara a desnudarse en señal de protesta -una forma de protesta política en África- Edelstein propuso someter sexualmente a la mujer. Los oficiales encargados de ejecutar sus órdenes rieron de buena gana como respuesta (se puede oír a Edelstein y su alegre audiencia en el vídeo incluido en el informe de Israel del Canal 10 en la sesión informativa ).
2. Eli Yishai
El funcionario de más alto rango que vomita la mayor cantidad de diatribas antiafricanas es sin duda el jefe de Edelstein, Eli Yishai . Yishai ocupa la cartera de ministro del Interior, una posición inmensamente poderosa en Israel. Yishai usa este poder para poner en práctica la ideología supremacista judía del partido ultraortodoxo Shas que dirige.
Esta actitud fue muy bien resumida por el líder espiritual del partido, el Rabino Ovadia Yosef, en octubre de 2010, cuando dijo que la única razón de la existencia de no judíos es para servir al pueblo judío. Yishai hace grandes esfuerzos para asegurar que las personas no judías que vienen a Israel -para hacer el trabajo sucio que los israelíes no están dispuestos a hacer- dejen el país antes de que encuentren el amor y empiecen a tener hijos.
Si hubiera querido, Yishai podía conceder permisos de trabajo a los solicitantes de asilo de África, permitiéndoles la autosuficiencia. Esto rápidamente diluiría la población africana sin techo que es una carga para el sur de Tel Aviv y reduciría en gran medida las tensiones en los barrios de bajo nivel que en principio se empobrecieron económicamente. Pero en vez de dar trabajo a los africanos no judíos ya establecidos en el país, Yishai prefiere importar cada año decenas de miles de asiáticos surorientales, a quienes expulsa e intercambia por otros nuevos cada pocos años. Esta política de puerta giratoria asegura que la población no judía es siempre vulnerable a los abusos. También es muy lucrativo para las agencias de recursos humanos israelíes, un término para lavar a los laureados traficantes de mano de obra esclava.
Yishai no se muerde la lengua. En junio de 2012, lamentó que los solicitantes de asilo africanos no entendían que » este país nos pertenece a nosotros, a los hombres blancos «, y en agosto de 2012, dijo, «hasta que pueda expulsarlos voy a encerrarlos para hacer su vida miserable». También en ese mes calificó a los africanos solicitantes de asilo de amenaza tan grave como los misiles nucleares y fabricó una sangrienta calumnia sin fundamento contra ellos acusándolos de convertir las sinagogas en aseos ( Israel promulga ley que permite a las autoridades detener a los inmigra ntes ilegales de hasta 3 años , Haaretz , 3 de junio de 2012).
1. Benjamín Netanyahu
En última instancia, el principal responsable de la guerra racista de Israel contra los africanos no judíos solicitantes de asilo no es otro que el primer ministro Benjamín Netanyahu . Aunque emitió moderadas condenas por los más flagrantes casos de racismo antiafricano, también puso el sello y la firma en todas las medidas draconianas adoptadas contra ellos.
Cuando cientos de rabinos israelíes emitieron un edicto religioso prohibiendo a los judíos israelíes alquilar pisos a los africanos, Netanyahu criticó a los clérigos en una insignificante foto para la prensa -un concurso trivial de adolescentes- pero no tomó medidas para eliminarlos. Todo lo contrario: a los pocos meses, el gobierno de Netanyahu duplicó y triplicó sus salarios.
En diciembre de 2011, Netanyahu anunció que iba a sellar la frontera abierta entre Israel y Egipto -por la que los africanos pueden cruzar a Israel- tan pronto como sea posible. Contacté con su oficina luego de preguntar si iba a equilibrar sus esfuerzos para evitar que más africanos solicitantes de asilo lleguen a Israel, con otras medidas que mejoren la vida de los que ya están en el país, como la concesión de permisos de trabajo y la asistencia sanitaria, por ejemplo.
La oficina de Netanyahu respondió de forma negativa. Pronto siguió a estas palabras con acciones, lo que demuestra que no sólo quiere reducir la cantidad de africanos que entran en Israel, sino que quiere revertir completamente su migración y expulsarlos del país. Hasta que llegue ese momento, respaldó con entusiasmo todos los planes de Yishai de construir campos de concentración para albergar indefinidamente a los africanos solicitantes de asilo ( Deri de Shas pone el ojo en el voto árabe , Ynet , 6 de noviembre de 2012).
Es probable que Netanyahu gane las próximas elecciones nacionales y siga siendo primer ministro del país por lo menos unos cuantos años más. No hay esperanza en el horizonte de que cualquier líder político capaz de formar una mayoría en la Knesset pueda ver a los solicitantes de asilo africanos como seres humanos y potenciales socios y no como amenazas a su existencia.
David Sheen es escritor independiente y director de cine. Nacido en Toronto, Canadá, vive en Jaffa. Su página web es www.davidsheen.c om y se puede seguir en Twitter: @davidshee.
Fuente: http://electronicintifada.net/