Traducido del inglés para Rebelión por J. M.
Unos yemeníes contemplan las ruinas de un mercado en Sana, bombardeada en un ataque aéreo de la coalición saudí, 20 de julio de 2015. El fabricante de armas británica BAE Systems es un importante exportador de armas a Arabia Saudita. Yahya Arhab EPA
El Kings College de Londres ha dado una explicación engañosa sobre sus inversiones en empresas que suministran armas y sus componentes a Israel y Arabia Saudita.
En los últimos meses los estudiantes de la universidad británica han estado protestando por sus conexiones financieras con la industria de las armas.
Un grupo llamado desmilitarizar a la King’s investigó cómo invierte la universidad -a través de los fondos- en empresas como BAE Systems y GE -General Electric- El grupo ha calculado que la King’s ha invertido más de 1,5 millones de libras (1,9 millones de dólares) en el comercio de armas.
En lugar de abordar las cuestiones planteadas por el grupo, el administrador jefe de la King’s ha tratado de apartarlo.
«El Kings College de Londres no tiene ninguna inversión directa en el comercio de armas», dijo a The Electronic Intifada Edward Byrne, presidente de la universidad. «Invertimos únicamente a través de fondos y, al hacerlo, se trata de conciliar nuestros objetivos financieros con consideraciones sociales más amplias».
Byrne añadió que la King’s utiliza un fondo administrado por la empresa de servicios financieros BlackRock que, según él, «deliberadamente excluye la inversión en empresas que producen armas controvertidas».
Distorsionar la verdad
La investigación llevada a cabo para desmilitarizar la King’s sugiere que Byrne está distorsionando la verdad.
La investigación muestra que la King’s ha invertido en el GE por medio del fondo que administra BlackRock y que hace referencia Byrne. GE proporciona equipos y servicios a Israel a través del programa de ayuda militar de Estados Unidos.
La corporación está directamente involucrada en la producción de armas polémicas. Su repartición de aviación, por ejemplo, proveyó motores para los helicópteros Apache , que se utilizaron ampliamente durante el ataque israelí de 2006 sobre el Líbano y sus posteriores ofensivas contra Gaza.
Desmilitarizar la King’s ha basado su investigación en los datos obtenidos en virtud de la libertad de las reglas de información. La investigación se ha llevado a cabo en colaboración con Fossil Free KCL, un grupo de campaña para exigir que la universidad abandone sus inversiones en las industrias del petróleo y del carbón.
Desmilitarizar a la King’s ha puesto especial énfasis en las inversiones de la universidad en la BAE, la mayor industria armamentística de Gran Bretaña y exportadora clave de armas a Arabia Saudita.
En total Gran Bretaña ha autorizado la venta de armas por valor de más de 3,3 millones de libras (4,1 millones de dólares) a Arabia Saudita desde que comenzó a bombardear Yemen hace casi dos años. Las ventas de armas a Arabia Saudita han continuado a pesar de que la propia organización de control de exportación del Gobierno británico ha recomendado que sería «prudente y cauteloso» detenerlas.
BAE también tiene una filial en Jerusalén y se ha asociado con Elbit, un proveedor líder de aviones no tripulados a los militares israelíes, entre una variedad de proyectos. Por otra parte, BAE hace los componentes de los aviones de combate F-35 que ensambla Lockheed Martin, el gigante de armas de Estados Unidos.
Israel ha ordenado 50 de esos aviones de combate.
Hipocresía
Los administradores de la King’s se han enfrentado a acusaciones de hipocresía. El mes pasado los activistas de desmilitarizar la King’s interrumpieron un discurso que dio Byrne en el lanzamiento de un plan denominado «Visión 2029».
En su introducción a ese plan -que pone la mirada en el bicentenario de la universidad en el año 2029- Byrne escribe que el «espíritu fundador de la King’s es «simplemente hacer del mundo un lugar mejor».
A pesar de esta afirmación la universidad tiene fuertes vínculos con instituciones que apoyan la agresión israelí.
La King’s, por ejemplo, alberga el Centro Internacional para el Estudio de la Radicalización (CIRS). El ICSR se formó en asociación con el Centro Interdisciplinario de Herzliya, una ciudad en Israel.
El Centro Interdisciplinario es más conocido por la organización de una conferencia anual en la que los líderes políticos y militares de Israel discuten sus estrategias. También se imparten cursos de «diplomacia pública» -un eufemismo para la propaganda- que se centran en la presentación de los crímenes de guerra de Israel con una luz positiva y en contrarrestar el movimiento de solidaridad con Palestina.
La postura de Byrne señala un desprecio por la democracia. En 2014 la asociación de estudiantes de King’s votó por apoyar el llamamiento palestino al boicot, desinversión y sanciones contra Israel.
La inversión, que continua en la industria de las armas, sugiere que la King’s no está prestando la debida atención a las opiniones de sus estudiantes.
Shahd Abusalama es un artista de Gaza, que ahora vive en Londres. David Cronin es editor asociado de The Electronic Intifada.
Fuente: https://electronicintifada.net/content/london-college-invests-makers-israels-weapons/19531
Esta traducción se puede reproducir libremente a condición de respetar su integridad y mencionar al autor, a l traductora y Rebelión como fuente de la traducción.